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PESE A LAS CRÍTICAS

La reacción del Gobierno por una designación de Trump

El presidente de Estados Unidos puso a Mauricio Claver-Carone al frente del Departamento de Estado para América Latina.

El anuncio de Mauricio Claver-Carone como el nuevo encargado del Departamento de Estado para América Latina electo por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue bien recibido por el Gobierno de Javier Milei.  Pese a las fuertes críticas del flamante funcionario al plan económico libertario, fuentes oficiales aseguraron que su designación era “esperable” y confían en que aportará al buen vínculo con Estados Unidos. 

“Sus dichos no afectan en nada la relación”, sentenciaron, y agregaron: “Es un ´trumpista´ línea dura y prevalece la posición del Gobierno por sobre cualquier tema personal”. 

Luego de que Claver-Carone destacara la participación del Presidente en conferencias internacionales, pero descalificara a varios funcionarios al sostener que la política domestica es “peronista”, en Casa Rosada sostienen que su inclusión al Gabinete estadounidense “no es una mala elección”, ya que creen que su alineamiento con Trump prevalecerá a la hora de profundizar la sintonía que pretende la administración libertaria. 

 

Amistad 

“Las líneas de ambos gobiernos son amistosas y eso es lo que va a prevalecer”, destacaron al respecto pese a que el extitular del Banco Interamericano de Desarrollo haya descreído de la posibilidad de que la nueva administración republicana de carta blanca a los créditos internacionales para países sin capacidad de pago. 

En otra oficina de Balcarce 50 consideran que lo dicho por Claver-Carone fuera de la función pública no tiene correlato con su nueva responsabilidad, y consideran que la elección del republicano está orientada estratégicamente a encarnar específicamente las relaciones con Centroamérica.  “En los últimos cuatro años, el caos y la anarquía han invadido nuestras fronteras. Es hora de restablecer el orden en nuestro propio hemisferio. Mauricio conoce la región y sabe cómo poner los intereses de Estados Unidos en primer lugar”, fue el argumento esgrimido por el reciente electo mandatario para designar al cubanoestadounidense.