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Leandro Alem, el club donde todos juegan por el barrio
HISTORIAS DE VIDA

Leandro Alem, el club donde todos juegan por el barrio

Es una de las instituciones más nuevas de Pergamino. Por el momento solo tienen fútbol como actividad, pero esperan contar con más disciplinas. El club cumple un rol social importante en la zona oeste de la ciudad. El vínculo de la familia Illia con la entidad deportiva. Diarionucleo.com conversó con Sandra Calvigioni, la presidenta del “verde y blanco”.

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El Club Social y Deportivo Leandro N. Alem está emplazado en el Barrio 12 de Octubre, una de la zonas más humildes y populosas de la ciudad (se estima que más de cuatro mil familias viven ahi). El lunes pasado cumplió 23 años de vida (fundado el 6 de marzo de 2000), en donde va creciendo ´paso a paso´, como dice una frase futbolera. 

Por qué el club lleva el nombre “Leandro N. Alem”, el fundador de la Unión Cívica Radical; es que su gestación se dio entre los vecinos del barrio y Guillermo Illia, sobrino del ex Presidente Don Arturo. Además, el terreno donde hoy se emplaza la entidad deportiva son tierras donadas por la familia Illia. 
  La institución formó, de a poco, las distintas categorías de fútbol con el semillero de chicos del barrio. En la actualidad compite en la Liga Pergaminense con las categorías infantiles, inferiores (sub 12, 13, 17 y 23) y Primera División. Entre tantos anhelos de la dirigencia, aspiran a poder desarrollar el fútbol femenino y otras actividades para ofrecer al barrio. Un club joven que logró también gritar campeón del fútbol pergaminense y competir en torneos regionales. 

Desde hace pocos meses, Sandra Calvigioni comanda las riendas del club. La titular de la entidad dialogó con diarionucleo.com acerca del pasado, presente y futuro del “verde y blanco”. 

Sandra, ¿cómo se dio tu llegada a la Presidencia del club? 

- SC: “Yo siempre estuve en Alem porque el club se creó en mi casa, con mi marido (Rubén Crespi) y Guillermo Illia, pero nunca me atreví a estar al frete de la institución. Un día mi hijo me dijo ´mamá, me acompañás a estar en la Comisión´, porque siempre hemos estado, pero no como ahora, siempre fue mi marido, también Juan Rimoldi, que fue un hombre que también trabajó mucho en el club, esas son las personas que marcaron al club. Ahora me atreví a enfrentar esto, que me gusta. Siempre me gustó el fútbol, jugué al fútbol cuando era adolescente. Estoy muy contenta de estar al frente del club”. 

En una situación compleja y difícil como vive el país hoy en día, me imagino que el club debe tener muchas necesidades

- SC: “Sí, como todos. Lo primero que precisábamos era el agua, y gracias a Dios ya la tenemos. La mayoría de los chicos han colaborado haciendo tiritas, hicimos un torneo de fútbol femenino para poder comprar la bomba, la Municipalidad también nos ayudó en una parte. Ahora vamos por la habilitación de la cacha, que ya está lista, ya no nos queda nada, hicimos todos los baños nuevos, también pusimos el alambrado nuevo, un portón; hicimos tantas cosas en tan poquito tiempo, no hace ni un mes y medio que asumimos. El grupo que tengo de la Comisión es muy lindo, hasta algunos de los chicos juegan al fútbol defendiendo a Alem. Es un club muy a pulmón. Cobramos una cuota de mil pesos, que no es nada a comparación de lo que cobran en otros lugares, pero sirve, al menos, para poder pagar el seguro, porque tenemos que cubrir ese gasto”. 

Te llevo para el lado netamente deportivo, vienen de salir campeones, en Primera División, del Torneo Preparación. ¿Qué esperan para esta temporada, Sandra?

- SC: “Los chicos de la Primera del, casi la mayoría, son del barrio, son muy pocos los chicos que vienen de afuera, pero te aseguro que ellos se ponen a defender la camiseta como lo hacen los chicos de acá, corren hasta que no dan más, no te lo puedo explicar; cuando lo ves en los partidos sacan una garra tremenda, defienden su camiseta, su equipo, juegan por su barrio, defienden su barrio. No tenemos solamente del 12 de Octubre, hay de Guemes, La Lomita, todos los chicos de alrededor. Acá se da que hay papás que juegan en Primera y dejan a sus chicos entrenando con las inferiores, es una familia. Quiero que haya unión entre todas las categorías, que estemos todos unidos para poder pelear el campeonato, esa es la forma”. 

Vos recién decías que aspiran a desarrollar más actividades para darle más ofertas al barrio. ¿Hay posibilidades de formar el fútbol femenino? 

- SC: “Sí, pero a mi me gusta tener todo en regla, soy muy prolija: primero quiero encaminar las inferiores y fútbol infantil, y que nos habiliten la cancha grande, y después ahí si vamos encarar el fútbol femenino”.

Sandra, hace poco asumiste y si bien ya dejó de ser una rareza la figura de la mujer en el ambiente futbolístico, ¿cómo fue tu primera incursión dentro de la Liga Pergaminense?

- SC: “Cuando fui por primera vez a la Liga estuve acompañada por con mis compañeros de la Comisión, me sentía medio tímida, fue una excelente reunión. Ya en la próxima reunión me sorprendí, para bien, porque ya había dos mujeres más, no eran presidentas pero sí de las comisiones directivas de otras instituciones, eso me puso muy contenta”.

¿Sandra, qué es para vos Leandro N. Alem?

- SC: “Uh, qué pregunta. Para mi Alem es todo, es mi casa, nació en mi casa, yo amo este club. Me han pasado muchas cosas en mi vida, y el club siempre es el que me saca adelante. Yo encontré el amor de los chicos en el club, ellos me demuestran todo el amor, como las familias en el barrio, me siento muy querida, tengo fuerza de seguir adelante, amo el club. Yo le brindo mi tiempo al club. Algunos chicos me dicen ´seño´, ´abuela´. Quiero que los chicos tomen al club como su segunda casa. Yo los llevo y juntamos los papelitos que hay tirados, que aprendan a valorar y a cuidar con sus manos. El club es para todo el barrio, porque hay chicos que salen del colegio, los que tienen vuelven a su casa a comer algo, sino vienen y los atendemos en el club, desde las necesidades básicas. Todos los clubes de barrio tienen que tener el apoyo de la gente, que los ayuden, ese es mi deseo. Yo soy una agradecida porque siempre que pido algo me ayudan y me dan la colaboración que necesito. Los chicos tienen que estar contenidos, y para eso también están los clubes”. 
 

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