Durante el año 2019 se realizó la Encuesta Nacional de Niños, Niñas y Adolescentes (2019-2020) de Unicef Argentina y se reveló que el 59% de chicas y chicos entre 1 y 14 años experimentó prácticas violentas de crianza; el 42%, castigo físico y el 51,7%, agresión psicológica.
El mismo organismo llevó a cabo en el año 2022 en una consulta a 1500 adolescentes a través de la herramienta U- report y se demostró que las primeras estadísticas no habían sufrido variaciones. La encuesta arrojó que el 40% de los adolescentes consultados atravesaron su primer hecho violento entre los 6 y los 13 años, y que 4 de cada 10 chicos y chicas afirma haber recibido maltratos en su casa o la casa de un familiar.
La Oficina de Violencia Doméstica que depende de la Corte Suprema de Justicia de la Nación publicó un informe en el que aseguraba que, durante el tercer trimestre de 2022, 3 de cada 10 personas afectadas por situaciones de violencia doméstica fueron niños y que 8 de cada 10 niñas, niños y adolescentes afectados sufrieron violencia por parte de sus progenitores.
En este contexto de estadísticas que demuestran que la violencia infantil es una problemática real y que merece ser abordada desde los organismos competentes, diarionucleo.com dialogó en exclusiva con el fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 4, Nelson Mastorchio, para indagar sobre esta problemática.
Violencia infantil en Pergamino
La Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 4 tiene a su cargo las temáticas de violencia de género y violencia intrafamiliar, en la cual también tiene competencia el Juzgado de Familia. El fiscal a cargo es Nelson Mastorchio quien le expresó a diarionucleo.com que "en lo que va del mes de marzo ingresaron a la UFI siete denuncias por casos de violencia contra niños por parte de sus padres".
"De esas siete causas, en dos de ellas lamentablemente pudimos comprobar que dos menores, uno de 7 y otro de 12 años, habían sido golpeados por sus madres. Ante esta situación dimos intervención al Servicio Local y los niños fueron retirados de la custodia de sus padres y fueron derivados al cuidado de otros familiares, a quienes se les otorgó una guardia provisoria hasta que el hecho se termine de dilucidar".
Aunque resulte difícil de creer y de entender, Mastorchio aseguró que uno de los niños presentaba lesiones de consideración y en la revisación médica se descubrieron marcas de agresiones que tenían vieja data. "Su cuerpo tenía cicatrizaciones que demostraron actitudes de golpes diarios", expresó.
Ante estos casos aberrantes, la UFI Nº 4 tiene la modalidad de determinar el grado de lesiones de los chicos e intervenir en la dinámica familiar para analizar el grado de responsabilidad penal de los padres y, de ser así, realizar el procesamiento. Los chicos golpeados son alejados rápidamente del hogar en conflicto y son derivados a otros familiares o a un centro de contención de menores.
- Nelson Mastorchio, fiscal de la UFI Nº 4
Mastorchio expresó que, en la gran mayoría de los casos, los niños que padecen violencia física por parte de sus progenitores se encuentran en una situación de vulnerabilidad y, por lo general, no están escolarizados. "En muchos de estos hechos observamos que la dinámica familiar no es la mejor", sostuvo. Aunque también ingresan denuncias en la fiscalía de casos que se producen en estratos sociales medios y altos.
Las madres de los dos niños golpeados enfrentan una causa por 'lesiones leves', la cual prevé un mínimo de pena de 6 meses. Pero más allá de la pena que les corresponde por el delito cometido, Mastorchio recalca que lo fundamental es alejar lo más rápido posible a las víctimas del hogar. "Después se reunirán las pruebas, se hará la Cámara Gesell y se obtendrán las declaraciones de los vecinos. Pero lo imperante es alejar a los chicos para evitar que la situación llegue a niveles mayores".
- Los niños que son apartados de sus familias por hechos de violencia, ¿regresan al hogar después de un tiempo?
- La única manera en que un menor regrese al hogar en donde fue maltratado sería teniendo la certeza de que sus progenitores no volverán a golpearlo nunca más, y esto es algo imposible. Es muy difícil que el juez de Familia o el Servicio Local envíe nuevamente a la criatura al hogar existiendo el antecedente de violencia. La mayoría de los chicos en esta situación no vuelven con sus padres.
Con respecto al perfil que suelen tener los padres acusados de golpear a sus hijos, Mastorchio sostiene: "Por lo general, este tipo de personas tiene la característica de dejar al azar la crianza de sus hijos ya que no les importan o tienen problemas de adicciones".
Marcas imborrables
Los niños que son maltratados física y psicológicamente por sus padres llevan consigo una doble marca de estos hechos. Una de ellas son las marcas en la piel producto de los golpes, y la otra, la cual también es muy importante, son las huellas que les dejan las agresiones sufridas en su estructura psicológica, las cuales pueden llegar a tener serias consecuencias en el futuro del niño.
Horacio Oldani es el agente fiscal del Fuero Penal Juvenil del Departamento Judicial Pergamino y trata cotidianamente con menores de edad que ingresan en edad temprana al mundo delictivo. Consultado por diarionucleo.com por esta problemática dijo lo siguiente.
- Horacio Oldani, fiscal del Fuero Penal Juvenil
"Es una constante que los chicos que llevan a cabo actos delictivos siendo menores de edad hayan tenido una infancia muy dura. De las pericias psicológicas y psiquiátricas que les realizamos siempre surgen problemas previos relacionados con las drogas y con violencia intrafamiliar. Es algo que los niños van vivenciando desde muy pequeños y es por eso que la violencia y el delito no les son ajenos desde el nacimiento".
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