Ayer a las 20 horas se llevó a cabo en el predio de la Sociedad Rural Pergamino (SRP) la Convocatoria Ciudadana Abierta para tratar las problemáticas que traerá al Partido este año las consecuencias de la gran sequía registrada durante el 2022.
El evento convocó a todas las personas e instituciones que están preocupadas acerca de la gran merma económica que habrá por la escasa producción que dejarán los cultivos de trigo maíz y soja.
Recordemos que la SRP realizó un informe en el que las estimación de pérdida económica para todo el Partido en el 2023 será de 192 millones de dólares, lo que es equivalente a 3,58 presupuestos anuales de la Municipalidad.
"Luego de hacer el reporte, que no deja de ser un estimativo, concluimos que las pérdidas serían de 192 millones de dólares. Luego nos fijamos en los datos públicos de la Municipalidad y nos encontramos con que el presupuesto para el 2023 es de casi 9 mil millones de pesos. Finalmente multiplicamos por el precio del dólar oficial y nos dio que, lo que va a dejar de producir la ciudad, son 3,6 presupuestos anuales del municipio", explicó Jorge Josifovic, presidente de la SRP.
Ante este pesimista panorama, los sectores productivos de la ciudad evaluaron las consecuencias de la sequía y se habló de cómo afrontar la reconstrución. De la reunión participaron representantes de diferentes sectores y diarionucleo.com habló con varios de ellos.
El anfitrión, Jorge Josifovich, presidente de la Sociedad Rural de Pergamino, explicó que el objetivo del encuentro fue “poner en blanco y negro el problema de la sequía que atraviesa el campo desde el invierno”. Además, recordó que el fenómeno climático tendrá como consecuencia una baja en la producción en el partido. “Venimos hace tiempo sacando números y lo llevamos a un plano para que la gente entienda el impacto”, manifestó.
Luego de eso la Sociedad Rural sacó un informe sobre el impacto económico que tendrá la sequía e invitaron a actores de la sociedad y sociales para explicar el trabajo y analizar propuestas para llevar a los tres estamentos del Estado para paliar y solicitar medidas ya que la zona núcleo pasará por una gran “tormenta”.
En cuanto a las medidas que tomaron desde el Departamento Ejecutivo Municipal para con los productores rurales, el presidente de la Sociedad Rural consideró que “como gesto es interesante” porque “es el puntapié inicial para tratar la baja de impuestos”. “Creemos que la carga impositiva es muy alta y agobia a la sociedad, impidiendo la inversión”, anexó.
Preocupación en los textiles
En tanto, Gustavo Rasuk, vicepresidente de la Cámara de Confeccionistas y Textiles de Pergamino, le dijo a diarionucleo.com que “el ánimo es malo” porque “el país no está en una situación buena”. “A esto se le suma el tema de la sequía que traerá consecuencias para el comercio. Al ser productores industriales vemos con preocupación que se va a caer la venta de nuestros productos en los comercios”, relató Rasuk.
Al igual que Josifovich, el vicepresidente de la Cámara de Confeccionistas y Textiles pidió “bajar la carga tributaria” para que el productor no se sienta asfixiado y pidió créditos blandos para que los productores puedan encarar la próxima campaña. “El año pasado fue un año relativamente bueno a pesar del cierre de las importaciones, pero ya notamos que la economía se está enfriando”.
Un mercado inmobiliario sin movimientos
Fabián Acerbo, presidente del Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de Pergamino, dijo que la reunión realizada anoche fue “fundamental de cara a lo que se viene” ya que “los pueblos del interior se mueven gracias al sector agropecuario”. Además, Acerbo consideró que “2023 será un año terrible”.
Si bien no hay una estadística clara de lo que pueda ocurrir, la base nace en los años duros que ha transitado el sector. “Tenemos una ley de alquileres que no se ha reformado, el que tiene no quiere invertir porque hoy es la renta más baja de la historia y el que necesita no puede comprar porque no hay créditos ni financiamientos. Lo único que está funcionando son los loteos con financiamiento de los dueños, pero el resto de las operaciones son muy pocas”, dijo Acerbo.
El comercio local dijo presente
En tanto, desde la Cámara de Comercio de Pergamino, aseguraron que “el sector la está pasando verdaderamente mal”. Su presidenta, Mariana García, le dijo a diarionucleo.com que están muy preocupados porque “no se toma medidas”. “Cuando fue la famosa crisis del campo de La 125, sentimos el impacto en el consumo de forma muy fuerte. Y en esta oportunidad sabemos que se nos viene una muy difícil y complicada con algunos rubros comerciales”, aseveró García.
Los comerciantes mostraron preocupación sabiendo que 2023 será muy duro. Al rubro, se le suma un cierre de paritarias que supera el 100% para los empleados y faltante de mercadería para reponer. La presidenta de la Cámara de Comercio remarcó que tienen una presión fiscal muy grande por lo que están “en estado de alerta”.
Inclusive, García destacó que “después de las Fiestas el consumo se frenó de una forma que nadie esperaba”. Y agregó: “Los comerciantes cada vez tienen menos rentabilidad. Se vende menos, más caro, pero la ganancia es chica. Con eso hay que afrontar los aumentos de paritarias que tienen impacto directo en las cargas sociales. El empleado se merece el aumento, eso no está en discusión, pero está muy difícil para el comerciante afrontar el pago. Inclusive, varios tienen mucha deuda impositiva y retraso en los pagos de los 931”.
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