Desde el 10 de diciembre de 2003 que los destinos de Colón son dirigidos por el intendente peronista Ricardo Casi. Si bien su espacio ha perdido algunas elecciones intermedias, a lo largo de estos 20 años, a la hora de revalidar su lugar en la intendencia ha obtenido la victoria. Pero desde la oposición, principalmente desde la Unión Cívica Radical, vienen planteando que esta situación “no ayuda a la alternancia que tanto bien le hace a la democracia”.
Hasta el momento Casi no ha confirmado su candidatura, aunque todos los caminos conducen a su nombre. Quien sí ha mostrado sus intenciones de ser candidato a intendente fue el abogado Javier Fidalgo, perteneciente a Evolución, un espacio interno de la UCR, quien ha sido también concejal en el período 2007-2011.
En diálogo con diarionucleo.com, el radical dio su parecer de la actualidad de su distrito, habló de política y de cuáles serían los ejes de gestión de un gobierno radical en Colón, en el caso de ganar las elecciones en octubre. “Empecé a militar a los 14 años en la Juventud Radical y ahí la política me apasionó”, dijo el ex presidente del comité y actual convencional provincial.
-Le ha tocado ser parte del Comité en un momento donde se creó una interna que terminó dividiendo el bloque de concejales…
-Hicimos todos los esfuerzos y tratamos de mediar para que esa ruptura no se produzca, pero terminó con dos bloques. Desde el partido trabajamos a la par con los dos espacios. Más allá de estar divididos, ambos trabajan y están comprometidos con los vecinos y eso le hace bien a la institución. La UCR de Colón se reúne de manera semanal desde hace años, inclusive en los peores momentos. Entendemos que hay que cuidar lo que logramos, porque nos ha costado mucho tener la cantidad de ediles que hay en el HCD.
-En estos últimos 20 años el electorado colonense ha mostrado una inclinación hacia el peronismo…
-Sí. El electorado en general se ha volcado por la figura del intendente, quien ha hecho muy buenas elecciones, pero tiene muchas falencias en sus gestiones. Consideramos que se podría haber hecho mucho más.
La planta municipal creció de casi 300 empleados a más de 800, y eso se dio en estas últimas dos décadas. En cambio, el empleo privado no ha crecido y entendemos que eso es vital para el distrito. El Estado no puede ser una agencia de desempleo. Creemos en otra forma de gobernar.
-Más allá de todo al espacio oficialista le ha tocado perder algunas elecciones intermedias, ¿eso genera optimismo?
-Sin ninguna duda. El radicalismo tiene muchas chances de ganar en 2023. En las elecciones intermedias los ciudadanos buscan un mayor control del Estado y se vuelva por la oposición. Pero el hecho de estar 20 años en la intendencia, significa que el peronismo no ha logrado generar dirigentes de recambio. Y eso hay que aprovecharlo, porque si no va Casi, no se asoma nadie de su entorno.
Interpreto que al ciudadano le cuesta salir de la zona de confort y acepta que las cosas no funcionen. Pero es necesario buscar alternativas porque el déficit presupuestario, la falta de objetivos de los funcionarios y otras cuestiones no da para más. La ciudadanía se está dando cuenta de eso y que las políticas kirchneristas no van más, porque ha dejado una Argentina con el 60% de pobres y una inflación mensual del 6%. En estas elecciones habrá una gran mayoría que va a querer salir de esa situación.
Cada mañana me levanto a trabajar al igual que muchos ciudadanos y ver cómo pagamos la luz, el resto de los servicios y cómo hacemos para llegar a fin de mes. Y en los momentos libres me dedico a la política para poder cambiar esta realidad.
-¿Tiene intenciones de ser el candidato a intendente por el radicalismo?
-Sí. Pero hay que entender que el radicalismo viene funcionando con un equipo, independientemente de las diferencias que podamos tener. Hay múltiples candidatos, pero más allá de eso la decisión que vamos a tomar es salir a la cancha con el más competitivo y nos acerque más a poder gestionar el municipio. Lo importante no es quién va a ser el candidato, sino que tenemos un equipo de trabajo que está preparado para gobernar. El radicalismo tendrá una responsabilidad muy grande en las elecciones que se vienen.
-Posiblemente otras personas tengan las mismas intenciones que usted…
-Seguramente. Pero lo que tenemos que tener en claro es que no podemos someter al partido a las apetencias personales. Todos coincidimos en eso y que tenemos que estar unidos para ganar. Lógicamente me gustaría ser candidato, porque me apasiona la política y tener la posibilidad de mejorar la calidad de vida de los vecinos. Quiero un Colón mejor y eso se puede lograr con trabajo y honestidad. Pero si no me toca ser, siempre voy a acompañar.
-Haciendo un poco de futurismo, ¿con qué gestión municipal se va encontrar el vecino si gana la UCR?
-Lo que primero hay que hacer es un ordenamiento muy grande, tanto financiero como de gestión y política. El objetivo de eso será potenciar el desarrollo productivo de la ciudad, acompañando al sector privado para potenciar sus recursos y posibilidades para que Colón crezca. Esto va a generar mayores recursos, los cuales deben ser bien administrados para hacer funcionar lo que hoy no lo está haciendo.
Nos preocupa mucho la gestión ambiental. Hace 20 años que la Planta Depuradora no funciona y estamos tirando prácticamente en crudo los desechos al río que pasa por Rojas, Salto y Arrecifes, terminando en el Paraná. También nos preocupa la salud de los ciudadanos, por eso es necesario mejorar la atención en el hospital, pero también deben tener acceso a agua potable, que hoy no la tienen porque la red pública no está atendida como corresponde.
También vamos a desarrollar políticas más eficientes en materia de seguridad, porque en Colón hay problemas y tenemos que trabajar mucho en materia preventiva. Hoy el Foro de Seguridad no funciona y cada vez que hay un hecho grave no hay cambios. El funcionamiento en seguridad no es claro. Por eso venimos trabajando desde el partido con diferentes proyectos para que cuando asumamos nos pongamos a trabajar desde el primer día.
Hay que mejorar los destinos de los fondos educativos y trabajar de manera estratégica con aquel vecino que quiere estudiar y formarse. Esto es fundamental para tener futuro. Hoy hay tres universidades y los chicos se siguen yendo porque las que hay no dan opciones que se relacionen con las necesidades del municipio.
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