“Milei dijo que el ajuste lo iba a pagar la casta, pero lo terminaron haciendo los jubilados”
El diputado nacional Martín Tetaz cuestionó las medidas que lleva adelante el Gobierno Nacional y dijo que “el verdadero problema de la economía es el mercado externo”. “Milei está tratando de construir una realidad populista de derecha”, aseveró.
Martín Tetaz, economista y diputado nacional, dialogó con Diarionucleo.com sobre la actualidad económica del país y de la provincia de Buenos Aires. Habló de las acciones que está llevando adelante el gobierno del Presidente Javier Milei y se mostró preocupado por la recesión y el impacto del sector externo. En ese sentido, cuestionó las “medidas populistas de derecha” y dijo que “son de dudosa efectividad”.
Sobre la inflación, Tetaz consideró que “con suerte se llegará a los números de Martín Guzmán” y en cuanto a la cosecha del campo explicó que “es un factor clave para el sector externo”. También se mostró en contra del “impuestazo” de Axel Kicillof y puso en duda sus políticas fiscales.
- Hace un tiempo el Presidente de la Nación, Javier Milei, dijo la famosa frase “no la ven” refiriéndose a la economía. ¿Usted qué ve?
- Me preocupan mucho las expresiones del estilo de no la ven, que aspiran a una cuestión medio mística, religiosa. Los números están a la vista, no me convencí hablando de las fuerzas del cielo.
- Se lo nota preocupado…
- Sí. Estoy muy preocupado porque el programa del gobierno es muy recesivo y no veo ninguna de corta que se la están imaginando ellos. No existe ningún dato de la realidad.
Cuando vos miras los números de la economía, ves que se cae al 6%, pero la construcción, por ejemplo, se cae al 22%, la industria al 12% y la fuente general de empleo, que puede movilizar la clase media, media baja, está detonada completamente.
- ¿No ve algún mecanismo que pueda hacer mejorar la economía?
- No, no veo qué es lo que sería lo que empuja a eso, tal vez, la recuperación de la actividad. Obviamente, el Gobierno está haciendo una tarea ingrata. Tiene que ordenar un desastre, que es una situación macroeconómica completamente insostenible y no es fácil. Es complejo y costoso para toda la economía, pero no veo que eso implique una recuperación de la economía rápida ni mucho menos.
- ¿Cuál es el problema más grave que tiene la economía?
- Es de algo que se habla muy poco que es el problema del sector externo. Más allá del desastre de la inflación y de todos esos problemas que se hablaba mucho el año pasado.
La gran bomba que recibió el Gobierno es la del sector externo, la deuda con los importadores, que está todo parado. En el primer trimestre del año las importaciones se frenaron un 65%, los pago importaciones casi eran un 65%, no un 8, un 10, un 15%. 65%, quiere decir que 2 de cada 3 importaciones no se están haciendo.
No hay chance de que se recupere la actividad económica y empiece a crecer hasta que no se normalice el sector externo.
La deuda es tan grande con los importadores que incluso con la cosecha no va a alcanzar. Entonces uno se imagina que la normalización del sector externo va a demorar por lo menos todo el año, que eso va a ser complejo y que va a implicar una situación para la economía donde recién hacia el año que viene puede ser que empiece a haber alguna recuperación.
- Es decir que por ahora usted “no la ve” …
- La verdad que por ahora no. No es que no lo veo yo, es que realmente no se ve.
- En campaña el Milei decía que el ajuste lo iba a pagar la “casta”, pero en realidad lo están pagando los trabajadores. ¿Fue una estafa?
- Sí, absolutamente. Él hizo una campaña pensando que no iba a ganar y ganó. Después se dio cuenta que para ganar las elecciones podés decir que vas a ajustar 5 puntos a la casta, pero no hay 5 puntos de la casta de gastos públicos.
Si eliminas la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores, eso es el 0,03% del PBI, no mueve la aguja. Entonces cuando vas a los gastos grandes, son complejos, no son tan fáciles de resolver y de bajar en dos meses.
La única manera de bajar en dos meses el gasto es llevándose puesto las jubilaciones y los salarios del Estado.
- Es decir que el ajuste lo están pagando los jubilados…
- Sí. La caída fue muy fuerte, casi el 35% de poder de compra perdieron los jubilados y, obviamente, eso te permite tener un superávit. Pero si vos le pones el superávit acumulado del gobierno, de los 3 billones de pesos del primario que tuvo en el primer bimestre, 2 billones son por el ajuste a los jubilados. Entonces, esencialmente lo que terminó descubriendo Milei que era más fácil, y fue hacer lo que tantos otros habían hecho antes o habían al menos intentado hacerlo. Milei dijo que el ajuste lo iba a pagar la casta, pero lo terminaron haciendo los jubilados.
- ¿Mueve la aguja los despidos en Télam, Inadi y otros sectores públicos?
- No. Es una batalla cultural. Hasta que la pelota no entre de manera significativa Milei va a usar mucho lo de la batalla cultural. Está tratando de construir una realidad populista de derecha, pero en el medio está la gente que hace 20 años que trabaja, y ellos arrasan igual que con un ñoqui que hace tres meses que no va a trabajar.
Después hay muchas discusiones que uno se pone a pensar y dice: “¿el Inadi funciona?”. No, obviamente que no. “¿El Ministerio de Mujeres Funciona?” No, obviamente que no. Entonces nadie se va a dar cuenta, lo cual es gravísimo desde el punto de vista de lo mal que está el Estado. Porque cierran un organismo entero y nadie se da cuenta porque estaba pintado. Pero tampoco es que al otro día la gente está mejor.
- ¿El Gobierno tiene contacto con la realidad?
- El problema de la gestión con argumentos populistas es que tarde o temprano tiene que hacer contacto con la realidad. Es decir, si vos me dijeras cierra el Inadi, baja la inflación y estamos todos mejor, es bárbaro. Pero eso no pasa. La batalla populista está muy bien. Están todos contentos. Cerró el Ministerio de Mujeres, cerró al Inadi, pero eso es el 0,01 del PBI y por lo tanto el gasto público no baja. Y no mueven la aguja ni resuelven los problemas que tiene la gente. No estoy defendiendo con esto Inadi, ni el Ministerio de Mujeres.
- Cuando una persona tiene sobrepeso y empieza a cuidarse en las comidas al principio pierde de peso rápidamente, pero luego es más difícil, ¿con la inflación es igual?
- Sí, absolutamente. Es relativamente muy fácil bajar la inflación de 200 a 20. Después de 20 para abajo es muy difícil. Me acuerdo una entrevista que le hicieron a Massa en los últimos días de la campaña del año pasado y le preguntaban si la inflación iba a bajar el año siguiente. Y Massa fue gracioso, pero no menos certero, porque dijo algo así como que la inflación iba a bajar aunque gobernara Myriam Bregman.
Es relativamente fácil bajar una inflación de 300. De acá a fin de año va a bajar a los niveles que tenía Martín Guzmán, que ya era un escándalo. Y vamos a festejar que, después de todas estas vueltas, volvamos a estar como cuando estaba Guzmán.
- ¿Qué es lo que espera el Gobierno de la cosecha del campo?
- Como te decía, uno de los problemas centrales de la economía es el sector externo. La falta de dólares en la economía es un drama. La cosecha va a permitir que se empiecen a normalizar los pagos a los importadores, pero la deuda es de casi 50 mil millones de dólares. Entonces, ¿cuánto va resolver? Y, con suerte, la mitad del problema. Probablemente vamos a seguir teniendo restricciones para acceder a los dólares y eso requiere una devaluación para después de la cosecha, para julio o agosto.
Si el gobierno trata de salir del cepo y hacer una unificación monetaria, muy probablemente lo va a tener que hacer con un impuesto más alto. Entonces, la cosecha es importante, pero no nos va a salvar porque el problema es de dos cosechas, para hacer los términos cuantitativos. Tenemos un problema de dos cosechas, no de una.
- Los productores rurales están muy molestos por la suba en los impuestos provinciales, principalmente en el Inmobiliario Rural. ¿Qué opinión tiene al respecto?
- Lo de Axel Kicillof es insólito porque hace trampa poniéndose atrás de la ambulancia de Milei y pasa los semáforos en rojo. Se hace el distraído y está pasando desapercibido su terrible ajuste que está haciendo el Presidente.
Kicillof está haciendo un ajustazo y pasa desapercibido, pero es peor que el que hace el Presidente de la Nación y se excusa diciendo que él no prendió la licuadora y, por otro lado, pega un impuestazo que es brutal.
Kicillof está haciendo lo mismo o peor que lo que está haciendo Milei, pero se hace el distraído atrás de la ambulancia del Presidente.
-¿Esa postura que plantea de Kicillof la repiten los intendentes?
- Es un poco más complejo porque los intendentes están muy afectados por los menores fondos de coparticipación. Entonces, el freno de obra pública nacional que se gestionaba a través de muchos intendentes también nos impacta negativamente. Hay que analizar intendente por intendente, pero es más compleja. No quisiera estar en el lugar de los intendentes.
- ¿Qué opinión tiene de Kicillof y Milei como economistas?
-Milei es un gran economista teórico, pero en el mismo sentido en que yo soy un gran futbolista teórico. Es decir, sé perfectamente cómo hay que hacer la jugada. Ahora, después, en la realidad, es otra película. Una cosa es la teoría y otra cosa es jugar.
Kicillof tiene un modelo dentro de su cabeza de cómo cree que funciona la economía que no tiene nada que ver con la realidad y, por lo tanto, es peligroso. Como ministro de Economía fue muy peligroso, por suerte no la maneja más, pero no se puede esperar de él grandes razonamientos.