La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) registró durante el 2021 más de 45.000 denuncias por torturas y malos tratos en cárceles de Buenos Aires y advirtió sobre el aumento del uso letal de la fuerza por parte de la Policía bonaerense que generó durante el año pasado 120 víctimas, mientras que ocurrieron 25 muertes en comisarías, el número más alto de decesos registrados en la última década en seccionales de esa provincia.
Así lo detalla el Informe Anual 2022 sobre políticas de seguridad y encierro en la provincia de Buenos Aires que presentó la Comisión Provincial por la Memoria, en el marco de su labor como mecanismo de control y monitoreo de los lugares de encierro, que incluye las unidades penitenciarias y comisarías de Junín.
Más de 450 inspecciones
Durante el 2021 la CPM realizó 456 inspecciones a lugares de encierro como cárceles y alcaidías, comisarías, centros cerrados para jóvenes y lugares de atención a la salud mental y realizó 40.599 entrevistas con personas detenidas o familiares.
Esas entrevistas dieron lugar a 25.562 presentaciones judiciales de habeas corpus y acciones individuales, así como también 199 habeas corpus colectivos por violaciones de derechos humanos estructurales en diferentes lugares de detención.
Este contacto directo con las víctimas permitió registrar 45.544 hechos de tortura, malos tratos o falta de acceso a la justicia de las personas alojadas en el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) y en comisarías provinciales. Además, la CPM intervino en 403 casos de violencia policial que involucraron a 466 víctimas individuales, siendo el 15% de ellos menores o jóvenes.
El crecimiento de la población encarcelada entre 2020 y 2021 fue del 7,9% y reconoció que "como propuesta para resolver este problema, el gobierno provincial construyó 1.300 nuevas plazas, pero ingresaron al sistema 3.600 nuevos detenidos. Si no se modifica la política criminal, las medidas adoptadas no resolverán el problema".
En 2021, la sobrepoblación en cárceles bonaerenses alcanzó el 111%, las 49.662 personas detenidas bajo la órbita del Servicio Penitenciario Bonaerense están alojadas en las 22.060 plazas que tienen actualmente las 66 unidades penitenciarias. Mientras que en comisarías la sobrepoblación alcanzó el 232%, con 4.445 personas alojadas en 1300 plazas.
Violencia patriarcal y muertes
El Informe dedica una especial atención a la situación de las mujeres y las personas trans en el encierro y precisa que 2021 se registró un aumento de las detenciones que alcanzó un total de 2.405 personas, la mayoría vinculada al narcomenudeo en clave de acciones de sobrevivencia "lo que replica la violencia patriarcal".
Otro dato preocupante del 2021 fue que en las cárceles bonaerenses murieron 199 personas y el 87% de estas muertes se produjeron por desatención de la salud, es decir muertes que podrían haberse evitado si hubiese una gestión diferente de la salud en el encierro. Esto implica un incremento de la tasa de mortalidad a 4,4 cada 10.000 personas contra un promedio de 3,3 de tasa promedio durante los años anteriores. En tanto, en comisarías se registraron 25 muertes durante el 2021, el número más alto registrado en la última década.
Por otro lado, durante 2021 fueron asesinadas 120 personas a manos de fuerzas de seguridad, 25 de ellas menores de edad. En 8 de cada 10 casos se comprobó que la muerte se produjo mediante el uso del arma reglamentaria y con el agente fuera de servicio, siendo la principal fuerza responsable de estos asesinatos la Policía Bonaerense con el 52%, seguida por agentes de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, responsables del 21% de los asesinatos.
Compartir