El pasado domingo 16 de octubre, las autoridades policiales de la ciudad de Kansas City, en el estado de Missouri, Estados Unidos, comunicaron el hallazgo de dos cuerpos dentro de un vehículo. Cuatro días más tarde, desde el Departamento de Policía de Kansas City (Kcpd, por sus siglas en inglés) confirmaron que se trataba de Misty Brockman, una madre de 40 años, y Kevin Ray Moore, un hombre de 42. Este último, según se pudo cotejar en las últimas horas a través de una prueba de ADN, fue el supuesto asesino que mató a principios de mes a la estudiante argentina Camila Behrensen y a su compañero chileno, Pablo Guzmán Palma.
Según precisaron desde el Kcpd, Moore fue visto sin vida junto a Brockman -madre de cinco niños, de acuerdo a una página de GoFundMe abierta por familiares y amigos- dentro de un automóvil que estaba estacionado en Northeast 48th Street y Randolph Road, cuando unos niños paseaban por esa área boscosa del condado de Clay. A medida que avanzó la investigación, la Unidad de Homicidios local determinó que el hombre había asesinado a la mujer y luego se dio un disparo en la cabeza.
Fuentes del Kcpd citadas por diversos medios de Kansas, ese mismo domingo por la tarde, los agentes respondieron a una llamada médica justo antes de las 14 -hora local- en el área de Northeast 48th Street y Randolph Road. Allí, los testigos de la escena llevaron a los oficiales a un área en el bosque donde había dos personas que sufrían un “trauma aparente”, según explicó Drake.
Compartir