Los salarios en Argentina crecieron 3,2% en agosto de 2025, superando la inflación del mes (1,9%) y consolidando una tendencia de recuperación parcial frente al deterioro acumulado en años anteriores.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), el índice de salarios mostró una mejora interanual del 49,6%, por encima del 33,6% de inflación registrada en el mismo período. Este dato representa el tercer mes consecutivo en que los ingresos crecen más rápido que los precios, aunque aún no compensan la pérdida de poder adquisitivo acumulada desde 2023.
Desde diciembre de 2024, los salarios acumulan una suba del 27,6%, impulsada principalmente por el sector privado no registrado, que creció un 67,4%. En contraste, el sector público aumentó 22,5% y el privado registrado apenas un 18,8%. Esta disparidad refleja la dinámica de recomposición informal, donde los ajustes suelen ser más abruptos, pero menos sostenibles.
En el período enero-agosto, los salarios subieron 24,8%, superando el Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumulado del 19,5%. El crecimiento mensual de agosto se desglosa en 2,2% para el sector privado registrado, 2,8% para el público y 6% para el privado no registrado.
El análisis por subsectores del empleo público muestra que los salarios nacionales crecieron 3% en agosto, mientras que los provinciales lo hicieron en 2,9%. En la comparación interanual, el aumento fue de 23,3% para el nivel nacional y 44,3% para el provincial. Desde diciembre, el acumulado es de 14,6% y 25,7%, respectivamente.
Este repunte salarial ocurre en un contexto de fuerte ajuste fiscal, caída del consumo privado y contracción del empleo formal. Según datos oficiales, más de 205.000 puestos asalariados se perdieron entre diciembre de 2023 y julio de 2025, lo que tensiona aún más el mercado laboral.
Además, el salario mínimo vital y móvil, que en octubre se ubicó en $322.000, sigue muy por debajo de la canasta básica total para una familia tipo, estimada en más de $350.000. Esto evidencia que, aunque los salarios nominales crecen, la recuperación del poder adquisitivo sigue siendo parcial y desigual.
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