Cristina Fernández presentó un recurso para que Gabriel Carrizo, supuesto líder de “la banda de los copitos”, sea procesado como coautor del delito de intento de asesinato en su contra, cuando el 1 de septiembre atentaron contra la vida de la vicepresidenta.
“Recién intentamos matar a Cristina”, citó la exmandataria que escribió Carrizo pasadas las 23 en una pericia a su teléfono celular esa noche en Recoleta. “Hoy solicitamos que sea procesado como coautor por este delito (intento de homicidio) junto a Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte y que, además, se les aplique la figura de asociación ilícita prevista en el Art. 210 del Código Penal”, tuiteó Cristina.
“Recordá esta fecha”, “Esta hdp (sic) ya está muerta”, “No sabés que hicimos con esto”, “Generar miedo”, “Para que el gobierno sepa con quienes se están metiendo”, son otros de los mensajes hasta ahora desconocidos y enviados desde el celular de Carrizo, jefe del grupo de supuesto vendedores de copos de nieve para el que trabajaban quienes agredieron a la vicepresidenta, según surge de la presentación de la querella.
En el escrito presentado ayer, los abogados que representan a Fernández también se refirieron a dos mensajes enviados por Carrizo en la mañana del 2 de septiembre, horas después del ataque fallido, a uno de su interlocutores de confianza a quien le decía: “Es un golpe que le dimos al gobierno” y “esto se va a poner peor”. De acuerdo a la presentación, los mensajes están consignados en un informe producido por la Dirección de Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (Datip) del Ministerio Público Fiscal (MPF) producido el 26 de octubre.
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