“Quien afrontó la deuda con el FMI, negoció con acreedores, hizo frente a la pandemia, trajo vacunas y ahora afronta las consecuencias de la guerra es Alberto Fernández. Ni con la prepotencia de los soberbios ni con el coraje de los mercenarios. Un país se construye con diálogo”. De ese modo el presidente Alberto Fernández ayer le dio el pulso al cierre del Coloquio de Idea en Mar del Plata.
Fernández cerró el Coloquio de Idea y, en línea con el lema del encuentro (“ceder para crecer”), llamó a dejar de lado la intolerancia política y mirar “el vaso medio lleno” de la situación económica.
Durante su exposición, el mandatario mostró gráficos con algunas variables macroeconómicas como el crecimiento de la actividad, la creación de empleo industrial y la tasa de inversión, para pedir a los empresarios “mirar el medio vaso lleno”.
“Todas las curvas van para arriba, ¿por qué pensar que el vaso está medio vacío?”, se preguntó. Sin embargo, reconoció que la inflación es un problema que “tenemos que resolver”, pero “viene paulatinamente descendiendo”. “La inflación no es un problema que se generó con nosotros, yo asumí en 2019 con 54 %”, insistió y dijo que solo controlando la suba de los precios se podrá garantizar “una mejor distribución del ingreso”.
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