Con más de 1350 jugadoras y jugadores en distintas categorías, el Vóley en la ciudad de Pergamino crece día a día. La liga cuenta con 120 equipos, no solo de Pergamino, sino también de Colón, Arrecifes y de los 12 pueblos del Partido.
Diarionucleo.com entrevistó al Presidente de la Asociación Pergaminense de Vóley, Maximiliano Cane, quien hizo un repaso de su gestión, los torneos, metas y objetivos futuros, capatación de talentos, entre otros puntos interesantes.
¿Qué balance hacés de la temporada que se acaba de terminar?
MC: “Siempre a la hora de hacer un balance, uno un poco divide diferentes cuestiones en las cuales uno puede estar más o menos satisfecho. En cuanto a lo cuantitativo te diría que un 2023, un año único, que nunca se dio en la Asociación de contar con tanta masividad en la práctica del deporte. En ese sentido, creo que somos, hoy día, el deporte más inclusivo de todos, en el sentido de que juegan nenes y nenas desde sub 12, hasta hombres y mujeres de cualquier edad, te diría. Con las categorías Intermedias abarcamos todas las edades, no solo eso sino que integramos, en el 2023, un poco de la mano con la Secretaría de Deportes, una gestión que se hizo conjunto, se logró integrar a la totalidad de los pueblos del partido, los pueblos que quedaban sin participar, y se logró integrarlos, de diferentes maneras. Continuamos teniendo a clubes de la ciudad de Colón jugando con nosotros, se recuperó la participación de Ricardo Gutiérrez de Arrecifes. O sea, en lo cuantitativo el balance, en resumen es sumamente positivo, de ganancia total. En lo cualitativo, ahí es donde se debe trabajar todavía, es una cuestión de trabajo, de maduración y de tiempo. Se han logrado cosas importantes a nivel club, se participó en la Copa Argentina, en un club que participó en la Copa Argentina, donde participa la élite del vóley formativo, en Mar del Plata, que fue el Club Argentino, estaba también clasificado el Club Comunicaciones, en otra categoría, en la categoría sub-18. Se van dando resultados a consecuencia de lo primero; para poder tener calidad tenés que tener una masa crítica y una cantidad de jugadoras y de jugadores de la cual después ir seleccionando e ir formando los mejores equipos posibles. Y en ese sentido, el vóley masculino es materia todavía en desarrollo, no podría decir que es negativo el balance porque no lo es, pero hay mucho por trabajar, y ahí va a ser clave la integración con las otras asociaciones vecinas de la zona norte de la provincia de Buenos Aires, tanto de la zona de Junín como de San Nicolás, que abarca todo lo que es el corredor de Río Paraná, San Pedro, Baradero, Ramallo, porque a todas nos pasa un poco lo mismo; no hay una masa crítica de jugadores y de equipos que nos pueda dar, o con la cual podamos generar una competencia local atractiva, entonces hay que intentar integrarse con ese tipo de asociaciones que están en la misma situación. Ahí el tema económico es donde entra a jugar también. Así que en términos generales el balance es positivo, por supuesto que todavía puede ser mejor al final de cada año. Creo que el camino que se está transitando es el que nos va a conducir hacia buenos resultados, no tanto en lo competitivo, sino en seguir luchando y logrando que la actividad crezca”.
¿Cuántos jugadores y jugadoras tiene fichaje, por así decirlo, en la APV?
MC: “En categorías intermedias, el vóley de mayores, donde ya deja de ser vóley formativo, participaron entre 520, porque varía según el torneo Clausura y Apertura, pero te puedo hacer un promedio de 540 jugadores, entre categorías femeninas, donde tenemos Intermedia A, B, C y D. Y en Intermedia varones tenemos categoría A y B. A esos 540 sumale 560 jugadores y jugadoras de categorías formativas, y sumale otros 240 jugadores de sub-12, que los sub-12 nosotros no los fichamos para no agregarle otro costo a los clubes y a los papás. No se los ficha, pero sí se les organiza una competencia, a nivel club, obviamente competitivo, con un campeón. Eso también se hizo durante el 2023, se le dio un carácter competitivo a la categoría sub-12, pero con pautas a respetar, que tienen que ver con la inclusión de todos los jugadores, y de jugar como mínimo tres sets para precisamente permitir que todos los jugadores puedan participar de los partidos”.
¿Qué objetivos se proponen desde la APV para la próxima temporada?
MC: “El objetivo principal para el año 2024, que ya nos venimos planteando y que le vamos a dar mayor empuje, es intentar generar mayor atractivo en esta actividad en el vóley masculino. Ahí se compite con otros deportes, y si bien también pasa también en el femenino, es como que aquí en el ámbito del Pergamino se dejó, y te diría que es bastante generalizado, salvo excepciones, como que se dejó de trabajar en el voleibol masculino; se priorizó o se enfocaron, la mayoría de los clubes, en la captación y en la actividad del voleibol femenino y no tanto en el masculino, y esto viene sucediendo desde hace mucho tiempo, y si bien la decisión y el deseo de revertirlo está no va a ser sencillo y va a llevar años reconstituir la actividad en la que, salvo algunas excepciones, como te puedo mencionar a Alfonso, clubes que continúan desde hace mucho tiempo con el vóley masculino, inclusive con categorías formativas, y generando nuevos jugadores, año tras año, me sobran los dos de la mano para decirte y mencionarte los clubes que lo están haciendo. Un poco ese es el objetivo más importante, sin descuidar la competencia del vóley femenino. Y en cuanto al organizativo, hay diferentes puntos a mejorar y a optimizar como la generación de mayor cantidad de árbitros, nosotros estamos organizando semanalmente entre 40 y 45 partidos por semana, y muchas veces una limitante importante son los árbitros, es la cantidad de árbitros y la disponibilidad, es sabido que todos tienen como una actividad complementaria el arbitraje, y todos tienen sus trabajos, no es sencillo lograr la disponibilidad y que ese punto sea fluido. Nos costó bastante este año, pero en términos generales se logró hacer. La idea es que se haga con mayor fluidez y con más eficiencia ese punto”.
Y en este repaso, ya hablamos de balance…¿Qué temas pendientes quedaron en este 2023 que se termina?
MC: “Y en cuanto a los objetivos del 2023, claramente se lograron. Ahí hay mucha ayuda y mucha colaboración, y mucho logro por parte de muchos clubes, de varios de los clubes, en los que internamente, por una cuestión de limitación en cuanto a espacio y a disponibilidad de gimnasio, tuvieron que generar nuevos lugares, casos de Gimnasia con la sede de Rocha, casos de Comunicaciones con la sede del Cruce. No solo que generaron esos espacios, sino que se logró, también, que sean de calidad, y se logró una mejora en los pisos, en las iluminaciones. En ese sentido, se logró, también, que cada club le dé al voleibol el lugar que merece en función a la cantidad de participantes y de socios que la actividad aporta a los diferentes clubes. Sin temor a equivocarme, te diría que la masa societaria de la mayoría de los clubes, en su mayoría son participantes y socios del vóley. Entonces, la gestión y el peso específico que tiene que tener la actividad dentro de cada club tiene que ir acompañando esa importancia, esa relevancia en cuanto a la cantidad de socios que la actividad aporta. Del lado nuestro, se deja trabajar con comodidad a los clubes, sin limitaciones, sin restricciones, con pautas organizativas y puntos a tener cuidado, pero se los deja trabajar y se les cobra una cuota de afiliación mínima que hace al funcionamiento básico de la Asociación, que como tal tiene una estructura prácticamente llevada a su mínima expresión, con una colaboradora, te diría, súper eficiente y capaz como es Marisol Aresté, que sigue sosteniendo sobre sus espaldas gran parte del trabajo administrativo y organizativo y de coordinación. Con una sola persona se administra y se organiza todo el volumen de partidos, ese es un logro de trabajar con eficiencia y con los mínimos costos para no tener que trasladar a los clubes esos costos, y que cada uno pueda generar fondos y utilizarlos en su propia actividad. Ese punto es relevante.
Y otro objetivo, tal vez a mediano plazo, tiene que ver con la matriz de ingresos y de financiación, donde las categorías intermedias, de alguna manera, hoy están siendo de alguna forma sostenidas por los adicionales que cobramos en las afiliaciones de las categorías formativas, cuando nuestro criterio, en realidad, tendría que ser a la inversa. Ese es un proceso de cambio de paradigma, donde hay que trabajar con los clubes, y los clubes tienen una disparidad en cuanto a su formato organizativo; cada uno también tiene diferentes prioridades e intereses, y diferentes masas societarias en cuanto a la capacidad económica y a las fuentes de ingresos que tienen. También hay que equilibrar y balancear todo eso. Ese es otro de los objetivos para el 2024: cambiar esa matriz en la composición y en el origen de los ingresos para poder, a nuestro modo de ver, ser más eficaces en esa temática que es lo que nos faltó, que nos viene faltando, pero es un trabajo de, te diría, un cambio cultural en muchos clubes”.
Hablamos de los torneos, de los objetivos cumplidos y los que se proponen. ¿Cuál sería el análisis, a modo personal, de tu gestión?
MC: “Yo asumo en plena pandemia, allá por diciembre del 2020. Desde el inicio fue complicado porque desde la realización propiamente dicha de la asamblea, con todos los requisitos y los protocolos y todo lo que había que respetar, y se respetó en ese momento, un poco en ese contexto asumí yo como Presidente, y con una Comisión Directiva conformada por personas que de alguna u otra manera comprometen su apoyo, lamentablemente después en la práctica y en el día a día el apoyo se reduce a una o dos personas, porque lamentablemente es lo que sucede, cuesta mucho encontrar gente que se involucre; sabido es que esto es una actividad dirigencial absolutamente ad honorem, en la que cada uno dedica tiempo, y lo prioriza en función a tener que postergar otras cosas, muchas veces la familia, muchas veces hasta nuestros propios trabajos, y acá no hay un solo peso para ningún dirigente, como no lo hay en los clubes, pero en los clubes se tiene, por lo menos, el elemento de identificación con la camiseta de cada club, en donde cada uno por ahí se desarrolló y se crió y se hizo deportista, entonces si bien es complicado, no es tan complicado como las entidades intermedias, como la Asociación lograr que la gente se acerque, se involucre y esté dispuesta a ayudar. Como balance de mi gestión, y un poco poniéndola en contexto, se hace muchísimo, con muy poquitas personas, con casi cero costos fijos, intentando que esa eficiencia en costos sea trasladada a los clubes; sí muchas cosas por mejorar desde ya, pero en función a los recursos que se utilizan y lo que se ha logrado el balance de la gestión en estos tres años es sumamente positivo. Siempre se quiere ir por más y mejorar, porque siempre se puede mejorar, pero en términos generales siempre el resultado se analiza en función a los recursos con los que se cuenta, y en función a eso te diría que es muy muy positivo el balance”.
La gestión dirigencial tiene un desgaste, como bien vos decis. ¿Querés continuar un mandato más?
MC: “No hay mucha gente que quiera tomar el puesto; de haberla yo la verdad cedería mi lugar porque no soy partidario de estar mucho tiempo y de que los cargos se ocupen durante tanto tiempo. Lo que me motivó a intentar y a ser Presidente de la Asociación es mi amor por el deporte, mi pasión por este deporte, desde mi adolescencia, y antes que lo practico, lo sigo practicando. Quiero que el deporte, el vóley en Pergamino, y ojalá en la Provincia, y en la ciudad, sea lo mejor que pueda ser. Y de mi granito de arena, desde esta Asociación, si lo puedo aportar será aportado, y es lo que intento hacer”.
Sin dar nombres propios, hoy tenemos jugadoras y jugadores conformando selecciones provinciales, nacionales. ¿Cuál es tu visión para continuar o aumentar la cantidad de deportistas que puedan llegar a otros planos?
MC: “Un poco viene de la mano con lo que te comenté anteriormente respecto a la masa crítica de jugadores, a la cantidad de jugadores y de chicas que practican el deporte, eso es lo que te permite captar, y dentro de esa cantidad tener elementos, jugadores o jugadores con potencial, que buena medida es detectarlo cuanto antes a ese potencial y a esas capacidades diferentes; uno ya puede advertirlo a temprana edad a ese tipo de factores. Ya a los 11, 12, 13 años uno puede darse cuenta de que técnicamente, y en cuanto a la comprensión de los fundamentos y de las instrucciones, y de los lineamientos tácticos que a esa edad se le puede dar, pero uno ya puede advertir y darse cuenta que hay jugadoras y jugadores con un potencial diferente. Lo que sucede en Pergamino es que es una ciudad que tiene una gran cantidad de clubes para la cantidad de habitantes que tiene. Muchas veces me han preguntado cómo Junín viene y nos gana siempre, o gana las ligas provinciales en categoría sub-16, sub-18. La respuesta es que en Junín, una ciudad con la misma cantidad de habitantes que Pergamino, hay dos o tres clubes, ahora se ha sumado, entre estos dos o tres clubes, el Club Sarmiento, que le ha dado mucho empuje a la actividad. Pero acá en Pergamino tenés nueve, diez, once clubes. Lo mismo pasa con Colón. Cómo puede ser que Alianza de Colón nos gane tantos títulos siendo Colón una tercera parte de lo que es Pergamino. Pero es eso lo que sucede. Eso tiene una parte buena y una parte mala: La parte buena es el trabajo social, la cobertura y la capilaridad de los clubes que logran, inclusive, no solo hacer su función social muy importante, sino que a la vez competir. Eso no sucede en muchas ciudades con el tamaño de Pergamino. Inclusive San Nicolás, con mayor cantidad de habitantes, no tiene la cantidad de clubes que tiene Pergamino. La selección nicoleña forma sus campeonatos gracias a que abarca muchas ciudades vecinas, y no tan vecinas, desde Baradero hasta, inclusive, Villa Constitución, que se suma a jugar con la selección nicoleña por una cuestión de cercanía. Pero ni siquiera San Nicolás tiene la cantidad de clubes en una competencia local como tiene Pergamino. Lo que sucede es que son muchos esfuerzos divididos, y cuesta encontrar y lograr resultados a nivel clubes, resultados consistentes y duraderos. Eso es lo que por ahí nos diferencia de otras ciudades. Te diría que Mar del Plata tiene la misma cantidad de clubes en una liga como Pergamino, con cinco veces más habitantes. El trabajo y el logro de captación de talentos es consecuencia de tener gran cantidad de jugadores. Los resultados a nivel club no se logran, a mi modo de ver, por este motivo esencial, que es tener a todos esos talentos repartidos en varios clubes. Y el trabajo de los entrenadores, obviamente, es la clave en la detección temprana de esos talentos, en cómo se los trabaja de manera diferenciada, pero sin perder el contexto que están participando y que forman parte de un grupo de jugadores y jugadoras. Y a partir de ahí ver qué proyección se le puede dar. Así como te digo esto nos pasa lo que le pasa también a otras disciplinas, muchos jugadores y muchas chicas se van, terminado el secundario, se van a estudiar a Buenos Aires, a Rosario, a otras ciudades y ya las perdés a los 17, 18 años. Lo interesante sería que ya para esa edad tengan el nivel de juego y la proyección para poder ir a jugar a la ciudad donde estudian. Ese sería uno de los objetivos. Y te ato esto con uno de los objetivos a mediano plazo, que tal vez lo podamos plantear para el 2024, y que tiene que ver con lograr un trabajo de, no sé si llamarles de selecciones, pero un grupo diferenciado, un trabajo en un grupo diferenciado con las tres categorías femeninas y las categorías de varones, aprovechando el nuevo espacio que vamos a tener en no mucho tiempo, que es el estadio multiuso que está haciendo la Municipalidad, aprovechando esa estructura y dar ese paso adelante que es conformar grupos de trabajo con aquellas jugadoras y aquellos jugadores con un potencial diferente al del grupo en general. Entrenando entre mejores jugadores se potencian, todavía más, esas cualidades, y por qué no formar en ese grupo un equipo y poder ir a competir en torneos abiertos y en diferentes competencias que te permiten participar, no digo de manera no federada, sino conformando un equipo con jugadores federados de diferentes clubes. Hay torneos abiertos que te lo permiten, y eso sería una forma de ir y participar en esos abiertos con otra expectativa; y no la sola expectativa de ir y participar, sino de tratar de lograr resultados. Ese es otro de los objetivos para el 2024”.
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