Juventud marcha último en la tabla de posiciones, y hasta el momento no pudo conseguir ningún triunfo en el certamen. La semana pasada Horacio Sparano dio un paso al costado de la conducción técnica. La Dirigencia se movió rápido y contrató los servicios de Francisco “Paqui” Bóveda, ex entrenador de Ricardo Gutiérrez de Arrecifes.
Diario Núcleo dialogó en exclusiva con el flamante técnico de “La Juve”.
P: Francisco, ¿Cómo se dio tu llegada al club y qué expectativa tenés en cuanto a lo que podés aportarle a la institución teniendo en cuenta el presente?
FB: “La verdad que es una experiencia nueva. Uno a través de los años cosechó muchos amigos en el básquet, Joaquín (Zeperiza) es un amigo, a quien tuve el orgullo de dirigir en diferentes seleccionados, y surgió la posibilidad a principio de año, no se dio por diferentes circunstancias, y ahora, tras la salida del técnico anterior (Horacio Sparano), la Comisión Directiva me llamó para contarme de la idea que tenían. Estoy muy agradecido a la gente de Juventud porque han confiado en mí. Es la primera experiencia fuera de mi ciudad (Arrecifes). La verdad que tengo muchas granas, es un desafío muy lindo. El viernes estuve en el partido que jugó Juventud contra Sirio observando a los chicos. Creo que hay mucho para trabajar, mucho para dar, hay muy buen potencial, las ganas de los chicos también me motivaron a tomar este desafío que no va a ser nada sencillo. Estoy contento y agradecido. Daré todo como lo hice en cada proyecto que llevé adelante para tratar de sacar a Juventud del fondo de la tabla”.
P: “Paqui”, ¿Se mira el fondo de la tabla o se piensa en un proyecto a largo plazo, teniendo en cuenta el plantel que tenés plagado de chicos?
FB: “Lo que tiene Juventud hoy es un futuro asegurado, hay muchos chicos con potencial. Creo que los profes de inferiores están haciendo un muy buen trabajo. Uno a lo que viene es a tratar de hacerlos jugar de una forma más ordenada. Hay mucho para aprender, no solo ellos sino yo también. Este presente no lo vamos a revertir mañana, pero sí creo que hay que empezar a trabajar y poner un objetivo en común con ellos, a largo plazo, para poner a Juventud donde tiene que estar. Juventud es un grande Pergamino, ha tenido épocas de gloria en el básquet, y trabajaremos para eso.
Estamos tranquilos, los dirigentes lo han entendido así, me han manifestado que los resultados no tienen que llegar mañana, pero sí empezar a trabajar para que esta camada de chicos el día de mañana quede en la historia grande del club”.
P: Vos remarcás que hay material para pensar en un futuro…Pero pensando en el presente a corto plazo: ¿hay posibilidad de sumar algún jugador experimentado?
FB: “Una de las motivaciones mías, más allá de los chicos, es poder conjugar la juventud con la experiencia. No voy a decir yo como es Joaquín Zeperiza como jugador, más como persona, es un símbolo de Juventud. Hablar de Joaquín es hablar de Juventud y viceversa. Ese apellido dentro de la institución es una historia, se la ganó con los años, con los títulos, es un ejemplo a seguir.
También va a probar José García, que es un amigo de toda la vida. Cuando le conté de este proyecto me dijo que tenía ganas de acompañarme, además que también lo une una relación muy estrecha con Joaquín, así que también existe la posibilidad de poder contar con él.
Queremos estar todos mentalizados en acompañar a los más chicos en el crecimiento para un segundo torneo y estar un poco más arriba de lo que estamos hoy. Sabemos que va a llevar tiempo, no es fácil, pero tenemos con mucha actitud”.
P: Recién decías que es tu primera experiencia fuera de Arrecifes, tu ciudad. Si bien sos joven, pero tenés mucha experiencia y un nombre en la actividad. ¿Por qué no se dio antes la posibilidad de venir a dirigir en Pergamino?
FB: “No se dio por las circunstancias de la vida. Dirigí selecciones y eso me hizo crecer. Pero cuando uno no se dedica cien por ciento a esto, tiene otras obligaciones que no puede descuidar, entonces no estás a full. Ahora creí que era el momento de volver a dirigir. Además, el apoyo familiar es clave porque cuando vas a dirigir un equipo afuera es una hora que salís antes y una hora que llegás después. La verdad que estoy muy mentalizado en este proyecto nuevo”.
P: Un entrenador tiene siempre una idea de juego, una filosofía. ¿Se impone o se adapta según el recurso con que se cuenta?
FB: “Es algo que se conjuga. Las desventajas que yo tengo acá es que esto recién arranca y no tengo tiempo, ya el viernes jugamos contra Sportivo Rojas acá. Uno tratará de inculcarle conceptos básicos de lo que yo pretendo, tanto defensivo como ofensivo, me va a llevar tiempo pero lo tengo que ir corriendo sobre la marcha, de esa manera en el segundo torneo vamos a tener un poco más de plazo para crecer. Estos partidos me van a servir para que ellos entiendan mi idea, que no es rebuscada, el básquet es sencillo, hay que tratar individualmente de estar en un buen nivel, y que colectivamente podamos sumar y entendernos. Lo bueno es que los chicos vienen jugando juntos en sus categorías. Hay que llevarlos despacio, son muy pibes. Intentaré mostrarles claridad. Hay que trabajar y trabajar.
Lo que más me motivó cuando los vi es la actitud que tienen estos chicos de venir a entrenar, de seguir adelante pese a que no ganaron ningún juego, del sentimiento por la camiseta del ´Celeste´. Desde afuera pondremos todo. Ese triunfo a la larga va a llegar.”
P: Es un torneo en donde si hacemos un repaso hay muchísimos jugadores jóvenes, por ejemplo: en Sportivo Rojas, Gimnasia, Sirio, mismo Juventud. ¿Qué opinás del torneo?
FB: “Sí, es real lo que planteas que hay mucha juventud. Creo que hay que conjugar la idea que uno tiene y comprender la etapa evolutiva de los chicos.
En nuestro caso, ellos más que nada se merecen estar más arriba, poder ganar un juego; pero para eso hay que trabajar mucho en la semana.
Lo lindo de un torneo con gente joven es que vamos a tener mucho futuro, y estos chicos en un par de años, seguramente, van a hacer crecer a la institución en lo deportivo y van a lograr muchos objetivos”.
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