Robo histórico: la directora del Louvre admitió fallas de seguridad
Laurence des Cars debió comparecer ante el Senado francés a causa del sorprendente golpe. La funcionaria admitió fallas en el sistema de vigilancia, que ya habían sido anticipadas por los sindicatos.
La directora del Museo del Louvre, Laurence des Cars, admitió fallas en el sistema de vigilancia externa del edificio que derivaron en el espectacular robo de joyas históricas y anunció una serie de medidas de seguridad.
En su comparecencia ante el Senado francés, Des Cars afirmó ayer miércoles que la cobertura externa del circuito cerrado de televisión (CCTV) del museo era insuficiente y que el robo de joyas del domingo había expuesto varios “puntos débiles”.
“Nos enfrentamos a una terrible falla en el Louvre, del cual asumo mi parte de responsabilidad”, declaró, añadiendo que había presentado su dimisión, pero el ministro de Cultura la rechazó.
Des Cars describió varias medidas para mejorar la seguridad, incluyendo el refuerzo de la protección perimetral con barreras antivehículos, la ampliación y modernización de los sistemas de vigilancia en todo el complejo museístico y la solicitud al Ministerio del Interior de instalar una comisaría dentro del museo.
Por otro lado, defendió el plan de seguridad actual del museo, de 80 millones de euros (92,89 millones de dólares estadounidenses), rechazando un informe reciente que citaba “retrasos persistentes” en su implementación.
El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió que se aceleraran las mejoras de seguridad del Louvre durante la reunión de gabinete del miércoles.
El museo reabrió sus puertas al público el miércoles por la mañana, tres días después del espectacular robo de joyas, cuyo valor se estima en unos 88 millones de euros (102 millones de dólares estadounidenses).
Una tiara adornada con perlas que perteneció a la emperatriz Eugenia figura entre los objetos robados por un grupo de cuatro personas durante el atraco cometido el domingo. En solo siete minutos, se llevaron ocho piezas de la colección de joyas de Napoleón y de la colección de los reyes franceses.
El robo generó, incluso, conmoción política en Francia. Más cuando trascendió ayer que antes del robo, los sindicatos del museo ya habían advertido sobre problemas estructurales, así como falta de personal. "Es todo el sistema de vigilancia del museo el que está obsoleto hoy en día", dijo Alexis Fritche, secretario general de la sección cultural de CFDT, un sindicato nacional. "Falta personal para la vigilancia, pero también para la evacuación en caso de emergencia", agregó.