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LA INTENCIÓN DE LLEVAR ESPERANZA, CUANDO LA REALIDAD ATENTA CONTRA ÉSTA EN NUMEROSOS PAÍSES

Navidad ensombrecida: el Papa Francisco pidió “silenciar las armas”

Reclamó “superar las divisiones” en el mundo, sacudido por las guerras, y puso especial énfasis en las situaciones dramáticas que se viven en Gaza y Ucrania.

El papa Francisco exhortó a hacer callar las armas y “superar las divisiones” en el mundo, dirigiéndose a los millones de cristianos que celebraron una Navidad de nuevo ensombrecida por los conflictos en Gaza, Ucrania y otras regiones.

Como cada año en su tradicional mensaje “urbi et orbi” (a la ciudad y al mundo), con transmisión planetaria, el pontífice argentino hizo un repaso de los principales conflictos y focos de tensión en los dos hemisferios.

“Invito a todas las personas a hacerse peregrinos de esperanza, a silenciar las armas y superar las divisiones”, dijo ante miles de fieles en la plaza de San Pedro del Vaticano.

 

“Una situación gravísima en gaza”

Jorge Bergoglio, de 88 años, denunció la situación humanitaria “gravísima” en la Franja de Gaza y pidió un cese el fuego y la liberación de los rehenes israelíes en manos de Hamás.

La víspera, el Papa dio inicio al “Año Santo” 2025 de la Iglesia católica, para el que se esperan más de 30 millones de peregrinos en Roma.

Durante la misa, invitó a los fieles a pensar en “las guerras, en los niños ametrallados, en las bombas en escuelas u hospitales”, en alusión a los bombardeos de Israel en Gaza.

Francisco, que citó no menos de 18 países, recordó entre ellos a Haití, Venezuela, Colombia y Nicaragua, pidiendo “encontrar lo antes posible soluciones eficaces en la verdad y la justicia, para promover la armonía social”. El jesuita también lanzó un mensaje para Ucrania, que celebró por segunda vez en su historia moderna la Navidad el 25 de diciembre, y no el 7 de enero como en el calendario juliano que rige en la Iglesia ortodoxa rusa.

“Que callen las armas en la martirizada Ucrania. Que se tenga la audacia de abrir la puerta a las negociaciones para llegar a una paz justa y duradera”, declaró, horas después de que Rusia lanzara más de 70 misiles contra la red energética ucraniana.

 

“Limitamos nuestra alegría”

En Belén, ciudad de Cisjordania ocupada y cuna del cristianismo, las celebraciones fueron silenciosas.

Desde que comenzó la guerra en Gaza en octubre de 2023, Belén prescindió de su enorme árbol de Navidad y de las elaboradas decoraciones que normalmente atraen a los turistas, conformándose con unas pocas luces festivas.

El patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, contó ante una pequeña multitud que acababa de regresar de Gaza, donde vio “todo lo que fue destruido, la pobreza, el desastre”. “Pero también vi vida. No se rinden. Así que ustedes tampoco deben rendirse”, agregó. 

Hisham Makhul, residente en Jerusalén, afirmó que pasar la Navidad en la ciudad santa ofrecía una “vía de escape” de la guerra entre Israel y Hamás, que asola la Franja de Gaza desde hace más de 14 meses.

“Lo que estamos viviendo es muy difícil y no podemos olvidarlo por completo”, declaró Makhul, refiriéndose a la situación en el territorio asediado.

El Ministerio de Salud del gobierno de Hamás en Gaza reportó ayer 23 muertos en 24 horas en el territorio palestino.

Alrededor de 1.100 cristianos viven en Gaza, y cientos se reunieron en una iglesia para rezar por el fin de la guerra. “Esta Navidad huele a muerte y destrucción”, declaró George Al Sayegh, un desplazado palestino en Ciudad de Gaza.