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Por la crisis, la UNNOBA suspendió el equipamiento del laboratorio y aulas del nuevo edificio Illia
SIN PRESUPUESTO

Por la crisis, la UNNOBA suspendió el equipamiento del laboratorio y aulas del nuevo edificio Illia

El rector Guillermo Tamarit planteó las dificultades económicas que atraviesan debido a la falta de aprobación del presupuesto nacional. “Hay un límite y en la medida en que no existan respuestas vamos acercándonos”, aseveró. Además, pidió acompañamiento de la sociedad.

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Guillermo Tamarit, rector de la Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires (UNNOBA), dialogó con diarionucleo.com sobre las dificultades económicas que les toca vivir debido a la falta de aprobación del presupuesto nacional, afectando la capacidad de respuesta y el desarrollo de la institución.

Además, cuestionó a los famosos vauchers educativos. Dijo que “son un slogan” y que “terminaron siendo un subsidio para estudiantes de escuelas privadas”.

En la actualidad hay un conjunto de universidades públicas que están planteando las dificultades presupuestarias de cómo afrontar este 2024 con los mismos números del año pasado.

Al no haber votado en el Congreso de la Nación el presupuesto nacional, hay una prórroga que establece el Gobierno de la Nación y que tiene la situación técnica por la cual le pueden dar el mismo monto de gastos para las universidades de enero del 2023.

El problema es que se trata de un periodo que hubo un 270% de inflación. Para Tamarit, esto hace evidente que “no hay forma de dar respuesta a la actividad normal y habitual de la universidad con ese presupuesto”. Y anexó: “Muchos rubros tienen un alto impacto, como es el aumento de la luz, del gas y de los servicios. Esta es la complejidad que estamos dándole visibilidad y pidiendo el acompañamiento de la sociedad en este reclamo”.

Claro que cuando los números no cierran hay que empezar a ajustar. Como en cualquier hogar, en la UNNOBA está sucediendo lo mismo y se están “privilegiando gastos”. Hay algunos que son flexibles y se pueden ir postergando, pero otros no.

Situación del edificio "Presidente Arturo U. Illia"

En Pergamino, por ejemplo, el flamante edificio “Presidente Arturo U. Illia”, que funciona al lado de la sede tradicional, se postergó la etapa de equipamiento para desarrollar la tecnología que requiere ese edificio con el equipamiento de investigación. Si bien la planta funcional está terminada, el edificio está vacío.

“En esta situación no lo podemos afrontar. Además, hay dificultades que no solo tienen que ver con lo presupuestario. Es muy difícil obtener cotizaciones, desarrollar las licitaciones en estos niveles de inflación, porque los propios proveedores no quieren comprometerse a establecer precios y desarrollar trámites administrativos”, admitió Tamarit.

Estar lejos de situaciones normales hace que no exista la posibilidad para la UNNOBA de ir proyectando a lo largo del año, adecuando los gastos normales con la inversión. “Todo esto ha desaparecido, sólo atendemos las urgencias y nos enfocamos en mantener abierta la institución”, aseveró.

En cuanto al del Secundario, el proyecto quedó en “stand by” antes de la crisis severa porque había quedado muy lejos la posibilidad. “Cuando el Gobierno Nacional terminó con el programa de desarrollo de nivel secundario en las universidades se hizo muy difícil proyectar una institución de esas características que involucra una enorme inversión equivalente a la de una escuela de la universidad o una facultad de la universidad”, explicó. 

Por lo que, antes de todo aquello, quedó en suspenso. “Ahora ha sido realmente una catástrofe porque son procesos que no se pueden detener y que no hubiera habido ninguna posibilidad de afrontarlo con presupuesto propio”, admitió el rector de la Unnoba.

El edificio está ubicado en José Vela y Estrada. Se trata de una construcción dotada de aulas y laboratorios que se financió con fondos del Programa de Apoyo a la Infraestructura Universitaria, en el marco de un convenio del Gobierno Nacional con el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).

Los famosos vauchers educativos

El programa de "Voucher Educativo" es impulsado por el Ministerio de Capital Humano que tiene como finalidad otorgar una "ayuda para acompañar la educación" de niños y jóvenes que asistan a instituciones educativas públicas de gestión privada de niveles inicial, primario y secundario.

Para Tamarit “lo de los vauchers es como un slogan que termina siendo un subsidio para estudiantes de escuelas privadas”. “Eso no es un voucher, son todos slogans y cuestiones que confunden más que ayudar a esclarecer sobre esta situación”, cuestionó.

El impacto de la crisis económica en la matrícula

Hasta el momento no hay números oficiales. Aunque sí hay una mayor demanda de los estudiantes para acceder a las becas, principalmente a las de transporte. “Un estudiante que viaja de Rojas a Pergamino paga 4 mil pesos el boleto. Son situaciones de contexto que van a limitar sin ninguna duda la posibilidad de participar a muchos del sistema educativo en la medida en que no se reviertan estas situaciones”, adelantó Tamarit.

En el medio de la crisis, los estudiantes, que, si las soluciones no aparecen, seguramente la situación se irá complejizando aún más. “Le pedimos a la sociedad que nos acompañe, porque creemos que la universidad pública es muy valiosa”, marcó Tamarit.

Situación atípica sin nada de nuevo

Consultado si en los años que lleva en su cargo le ha tocado vivir una situación similar a esta, Tamarit consideró que “el mayor problema que tienen las universidades es cuando no hay presupuesto nacional”. “La universidad no es una oficina burocrática del poder ejecutivo, sino que es una institución de la propia Constitución Nacional. La autonomía universitaria es uno de los atributos principales que tenemos como institución. Y tiene su correlato en que el Congreso de la Nación es el que establece el presupuesto para no quedar en manos de la discrecionalidad de ningún funcionario”, recordó.

Tamarit explicó que esto ha sucedido varias veces y las universidades quedan a criterio de funcionarios que tienen un sinnúmero de cuestiones a resolver y de prioridades que establecer que no necesariamente coinciden con las de las universidades. “Ya nos ha pasado. Ahora, en este caso, estamos alertando sobre el estado de situación por la que atravesamos en la actualidad. Y que, por supuesto, trabajamos tanto a nivel del Congreso como el Poder Ejecutivo para resolverlo”, destacó.

Panorama para el resto del 2024

Para el rector de la UNNOBA el panorama para este año es complejo porque entiende que el conjunto de la sociedad está atravesando estas dificultades, pero aseguró que no reclaman un privilegio o una excepción. “Sí necesitamos advertir que hay un límite para estas cuestiones y que en la medida en que no existan respuestas vamos acercándonos a ese límite”, argumentó.

De todos modos, aclaró que “la UNNOBA va a seguir brindando acciones a lo largo del año”. “Hay otras universidades que tienen situaciones mucho más complejas. Las que tienen hospitales o las que atienden al público porque requieren de presupuestos crecientes. Porque también allí hay complejidades específicas respecto a lo que aumentan los servicios, los medicamentos y la tecnología. Y empieza a competir el dictado de clases con la atención de pacientes. Entonces, son cuestiones que hay que resolver”, remarcó.

Claro está que con claridad que con el presupuesto del año pasado y un 270% de inflación en el medio es inviable pensar que las universidades puedan tener alguna respuesta adecuada para su desarrollo durante este año. 
 

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