¿A quién no le ocurrió que hizo una compra por internet y recibió un producto defectuoso? ¿Cuántos otros tuvieron problemas para reclamar y recuperar el dinero o un artículo en condiciones? Para los consumidores estadounidenses eso dejará de ser un dolor de cabezas.
Es que un organismo que monitorea la seguridad del consumo en Estados Unidos votó por unanimidad responsabilizar a Amazon de los productos defectuosos o inseguros vendidos por terceros en su sitio web y su aplicación.
Se trata de la Comisión de Seguridad de los Productos de Consumo (CPSC), encargada de ordenar a las empresas que retiren productos peligrosos vendidos en el país. Ese organismo dijo que encontró más de 400.000 productos defectuosos vendidos en la plataforma de Amazon que el minorista en línea ahora debe retirar o enfrentarse a consecuencias legales.
Más del 60% de las ventas en las tiendas de Amazon proceden de vendedores independientes, dijo la empresa en enero, y la batalla sobre quién debe ser considerado responsable de estos productos cuando fallan se ha librado en los tribunales durante años. Pero la CPSC comunicó que un juez de derecho administrativo se había puesto de parte de la agencia, dictaminando que Amazon actuaba como distribuidor de productos de terceros, y que las notificaciones de la empresa a los clientes de que los productos que compraban tenían "posibles" problemas de seguridad eran insuficientes para proteger a los consumidores.
La sentencia –emitida esta semana- subraya la ofensiva de la CPSC contra los productos que considera inseguros. Los presidentes en funciones de la agencia fueron nombrados por el presidente Joe Biden. Entre los productos incluidos específicamente en esta orden figuran detectores de monóxido de carbono que no emiten una alarma, numerosos pijamas infantiles que podrían incendiarse y secadores de pelo que podrían electrocutar a las personas si se caen al agua.
"Amazon no notificó al público sobre estos productos peligrosos y no tomó las medidas adecuadas para alentar a sus clientes a devolverlos o destruirlos, dejando así a los consumidores en riesgo sustancial de lesiones", dijo la CPSC en un comunicado este martes. "Amazon ahora debe desarrollar y presentar planes propuestos para notificar a los compradores y al público sobre los peligros del producto, y para proporcionar reembolsos o reemplazos para estos productos".
La respuesta
Pero Amazon respondió. En un comunicado, dijo que estaba decepcionado por la decisión y planea apelar.
"En caso de retirada de un producto en nuestra tienda, retiramos los productos afectados rápidamente después de recibir información procesable de las agencias que retiran el producto, y seguimos buscando formas de innovar en nombre de nuestros clientes", dijo un portavoz de Amazon en un comunicado. "Nuestro servicio de alertas de retiradas también garantiza que nuestros clientes reciban rápidamente notificaciones de información importante sobre la seguridad de los productos, y que el proceso de retirada sea eficaz y eficiente".
La CPSC dijo que Amazon tiene ahora que presentar una propuesta de plan para notificar a los consumidores los productos defectuosos y retirarlos de las estanterías en línea.
Amazon hoy es una multinacional tecnológica estadounidense especializada en comercio electrónico, computación en la nube, streaming digital (Amazon Prime) e inteligencia artificial. Fue fundada en 1994 por Jeff Bezos como una simple librería en línea, pero rápidamente se expandió para vender una amplia variedad de productos, desde electrónica hasta ropa y muebles.
Hoy esa empresa está valuada en 1,3 billones de dólares (un millón de millones de dólares) y el patrimonio personal de Bezos se estima en alrededor de 162 mil millones de dólares.
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