El destino bohemio que fusiona campo y playa en la Costa Atlántica
Ideal para el descanso, esta ciudad de la Provincia combina playas tranquilas con un entorno campestre y una creciente oferta inmobiliaria.
Uno de los balnearios históricos de la Provincia Buenos Aires, se ha convertido en un destino popular entre quienes buscan escapar de la rutina en un ambiente natural y relajado. Ubicado a solo 23 kilómetros de Mar del Plata, ofrece la combinación perfecta de mar y campo, posicionándose como un referente en la tendencia “hippie chic” de la Costa Atlántica.
Chapadmalal es conocido por sus hoteles presidenciales, construidos en las décadas de 1940 y 1950 como parte de un ambicioso proyecto social y turístico del gobierno argentino. Estos icónicos edificios frente al mar otorgan al lugar una relevancia histórica que, junto a su belleza natural, atrae a turistas y emprendedores que valoran su singularidad.
Mar del Plata es el principal balneario de la Provincia, pero no sólo se destaca por sus atractivos turísticos, sino también que es una de las localidades más habitadas de Buenos Aires (supera los 600 mil habitantes), que mantiene vida propia durante todo el año. En ese sentido, la educación es un pilar para el crecimiento constante de la ciudad, por lo que, entre otras obras, el gobierno de Axel Kicillof encaró este año el reacondicionamiento de la Secundaria N°58, que implicó una inversión total de $256.000.000 en el marco del programa “Escuelas a la obra”, que ya lleva ejecutados trabajos en 7.500 establecimientos educativos.
La calma del mar, lejos del bullicio
A diferencia de las concurridas playas de Mar del Plata, Chapadmalal se destaca por sus costas tranquilas, ideales para actividades como yoga, pilates y meditación. La baja concurrencia de sus playas permite disfrutar del sonido del mar y de una paz inigualable, perfecta para quienes buscan un descanso profundo sin alejarse demasiado de la ciudad.
Crecimiento inmobiliario: casas y chacras frente al mar
En los últimos años, Chapadmalal ha experimentado un boom inmobiliario, con la construcción de casas y chacras que integran el campo y el mar en diseños minimalistas y rústicos. Estas viviendas, con amplios ventanales y espacios abiertos, permiten una conexión constante con el entorno natural, ofreciendo una alternativa al estilo urbano y reforzando la tendencia de vivir en armonía con la naturaleza.
Un estilo de vida al aire libre
La vida en Chapadmalal invita a disfrutar de actividades al aire libre, como caminatas, cabalgatas y tardes de playa. Este estilo de vida, que combina el ambiente campestre con el mar, atrae a un público variado, desde jóvenes profesionales hasta familias y personas que buscan un refugio de tranquilidad.
Un futuro prometedor para inversores
Gracias a sus terrenos todavía accesibles, Chapadmalal se presenta como una oportunidad interesante para inversores que ven en este destino una nueva joya de la Costa Atlántica. Comparado con lugares como José Ignacio en Uruguay, su crecimiento inmobiliario va de la mano con un enfoque en la preservación natural, lo que lo convierte en un lugar ideal para inversiones turísticas y residenciales a largo plazo.
Con su encanto bohemio y una oferta en constante crecimiento, Chapadmalal es hoy un destino que fusiona lo mejor del campo y la playa, ofreciendo una alternativa refrescante en la Costa Atlántica.