noscript
Campanella y los robots: el director se pronunció a favor de la IA y hay debate
TENDENCIAS

Campanella y los robots: el director se pronunció a favor de la IA y hay debate

El realizador de “El secreto de sus ojos” contó que usa la herramienta para elaborar gacetillas e investigar. Y se armó polémica.

Compartir

¿La inteligencia artificial nos reemplazará a todos? En la industria del cine así lo creen, motivo por el cual en la última huelga de escritores y actores se consiguió que los grandes estudios pongan límite al uso de las IA, que ya empezaban a utilizarse para escribir y corregir guiones, realizar animaciones y hasta traer de regreso a la vida a viejos actores y actrices.

En pánico ante el mundo que se avecina inexorablemente, muchos tratan de ponerle límites a una tecnología que efectivamente amenaza con generar recortes en varias áreas creativas, la que se consideraba como la última frontera de los robots. Y sin embargo, aquí estamos: como dice el meme, parece ridículo que hayamos entrenado a los robots para escribir poesía mientras los humanos tenemos que seguir trabajando de 8 a 17. Se suponía que debía ser al revés.

En fin: no todo el mundo rechaza y quiere poner límite a la oleada de las IA. Menos apocalíptico, el director y guionista de cine argentino, Juan José Campanella, aseguró que la inteligencia artificial “es muy buena” y que también la usa “para escribir gacetillas de prensa”.

“Todos nos sorprendemos con la IA, pero en realidad es un gran copypastero”, resaltó el cineasta, director de “El secreto de sus ojos”, que le valió el Oscar a mejor filme extranjero.

Campanella habló con el programa radial “Desayuno Incluido” y eligió meterse en una polémica más en su vida: el cineasta ya divide aguas por sus opiniones políticas, y ahora decidió hablar a favor de las IA, afirmando que su uso en los efectos especiales “es solo el siguiente paso de los efectos por computadora”.

El debate, claro, es más amplio. La irrupción de las IA en las artes creativas ha generado hasta aquí un contenido estéticamente discutible, saturado, edulcorado, algo distópico en su falso realismo, que plantea un interrogante obvio (de qué vamos a trabajar cuando los robots hagan todo) y otro más sutil: si efectivamente las IA solamente copian y pegan de contenidos del pasado para realizar sus contenidos, ¿qué pasará cuando solo consumamos entretenimiento generado por IA? ¿No implicará una profunda reducción en la originalidad, que ya estamos viendo en esta era donde “todo vuelve”, donde todo es refrito?

A Campanella no le importa tanto, y ve su alcance en lo cotidiano: genera gacetillas de sus proyectos, un trabajo profundamente mecánico, con IA, y también, contó, para investigar. Pero no osó decir que la IA podría reemplazarlo a él: el se encuentra entre los que piensa que puede controlar el alcance de la tecnología, usarla a su favor. Es un punto de vista.

LO QUE VIENE

¿Qué viene para Campanella? Adelantó que “Los Enviados” tendrá una tercera temporada, ya que “tuvo una muy buena recepción en toda la región” y la vieron “millones de personas”.

También prepara una nueva obra de teatro, “Empieza con D, siete letras”: “Es la primera vez que voy a trabajar con Fernanda Metilli. Con Eduardo Blanco vengo trabajando hace años. La química entre los dos es muy buena”, sostuvo. Se estrenará el 10 de enero.

Además, Campanella anunció la adaptación de una de sus películas más emblemáticas, “El hijo de la novia”, a una serie en inglés. La serie será una precuela que explorará más a fondo las temáticas de la película, como el conflicto generacional, la familia y el amor.

Y confesó que tiene dos proyectos cinematográficos en mente. “Tengo muchas ganas de hacer ‘Parque Lezama’ en cine, pero estamos tratando de conseguir los derechos, que no están tan libres como sí lo estaban los de la obra de teatro”, explicó el cineasta. Días después, se confirmó que el proyecto se llevará adelante con Netflix, el año próximo.

Además, Campanella tiene un proyecto junto con Eduardo Sacheri, que se centra en la unión de todos los cuentos del escritor: “Es una amistad de dos hombres desde que son chiquitos hasta el geriátrico. Es toda una vida”, adelantó. Sobre el mismo, también confesó que en un principio había quedado en “stand by” por la situación del cine. “No tengo ganas de hacer una película para que vaya directamente a la televisión. Hoy en día, las ventanas (el tiempo que tiene una película para estar en el cine) están planteadas así. Me afectó mucho la crisis por la que está pasando el cine, por eso me he enfocado más en la televisión y en el teatro”.

Etiquetas
logo
Comentarios