Si bien no trascendieron fotos ni nuevas declaraciones, la ministra de Comunicación provincial, Jesica Rey, confirmó que el gobernador Axel Kicillof tuvo el jueves una segunda reunión con el Papa Francisco, tras el encuentro que ambos habían mantenido ese día en el Vaticano, en horas de la mañana.
Según pudo saberse, la segunda visita que el Gobernador realizó al Sumo Pontífice no figura en la agenda pública del Vaticano. Sin embargo, desde la Argentina, Rey dijo que el encuentro extraoficial duró “más de una hora” y que fue “a solas”.
La información surgió cuando el Gobernador ya se encontraba a bordo del avión, rumbo a Buenos Aires, donde llegó el viernes por la noche para trasladarse luego a La Plata.
Entre los trascendidos, circuló que la visita se habría producido poco después de las 17.30 del jueves.
El gesto llamó la atención porque no es habitual que el Papa reciba dos veces a la misma persona, en el mismo día. Sin embargo, desde la Gobernación provincial indicaron que
Kicillof y Francisco mantuvieron el jueves un segundo encuentro y que el mandatario volvió “muy emocionado”, tras “un diálogo franco, frontal y distendido” con la máxima autoridad eclesiástica.
La agenda
Kicillof había arribado a Roma el miércoles al atardecer para acudir al Vaticano a las 9 del día siguiente, acompañado de su ministro de Gobierno, Carlos Bianco, y la jefa de Asesores, Cristina Álvarez Rodríguez. Allí fueron recibidos por el Sumo Pontífice, de manera oficial, a quien no conocía en persona y a quien le expresó su “preocupación” por la situación social de la Argentina.
Ese encuentro se desarrolló en la biblioteca del Palacio Apostólico y duró 40 minutos. Luego, el Gobernador recorrió los jardines de la Santa Sede, en compañía del cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, con quien cultivó una relación personal cuando este último fue arzobispo de La Plata.
Sin embargo, el viernes la ministra de Comunicación provincial reveló que esa tarde, horas después, Kicillof regresó al Vaticano para ser recibido de nuevo por Francisco, esta vez en el Palacio Santa Marta y en soledad. Más allá de la confirmación de Rey, hasta ahora, de esta segunda reunión no trascendió ningún detalle.
El jueves, al regresar del otro lado de la Porta Angélica del Vaticano que custodia la guardia suiza, el mandatario provincial había dicho que el Papa “sabe de los problemas de la Provincia y le preocupan” y contó que, en el intercambio de regalos recibió la copia de dos encíclicas y una artesanía realizada en los talleres vaticanos. También, que él llevó entre los obsequios ejemplares de sus dos libros, un mate y una foto de San Lorenzo, el equipo del que es hincha Francisco.
Sin declaraciones
Axel Kicillof no volvió a dar declaraciones respecto de un segundo encuentro con el papa Francisco y tampoco pudieron conocerse detalles de esa reunión imprevista en la agenda desde fuentes del Vaticano.
La celebración de dos reuniones de este tenor en un mismo día resultó llamativa, dado que el Papa cuenta con una agitada agenda. El viernes, por ejemplo, tenía previstas diez reuniones bilaterales, en el marco del inicio de la cumbre del G7, que también se lleva a cabo en Italia.
En el acto de inauguración, Francisco también estuvo con el presidente, Javier Milei, con quien Kicillof mantiene un fuerte enfrentamiento. El mandatario nacional se acercó a saludarlo e intercambiar comentarios. En su caso, había sido recibido en el Vaticano en febrero pasado, para dejar atrás una serie de críticas que le había hecho antes de ser Presidente y que quedaron atrás luego de ese cónclave.
Con todo, Roma fue en las últimas horas escenario de contactos entre Su Santidad y los dos líderes de la Argentina que exponen las diferencias políticas más conflictivas, con la Ley Bases mediante.
Kicillof había insistido en su reclamo por la transferencia interrumpida de fondos para la Provincia, y volvió a cuestionar las políticas del libertario. Casi en simultáneo, desde Buenos Aires, y tras la votación en general de la polémica norma en el Senado, Milei también volvió a elegir de enemigo al bonaerense y a cuestionar su administración.
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