Pese a la recuperación de Mar Chiquita, la sequía extrema que viene afectando a Junín y la Región desde hace tres años con el fenómeno La Niña, volvió a transformar esta semana en un gran desierto a la Laguna de Gómez.
En este contexto, la provincia de Buenos Aires envió, ayer, a personal de Hidráulica para controlar el plan del Comité de Cuenca del Salado. Así lo informó a Democracia Néstor Álvarez, subsecretario de Recursos Hídricos bonaerense.
Según explicó, en la laguna Mar Chiquita el nivel de agua no llega a la compuerta para que descargue a Gómez. “Pedimos que vayan para ver que el plan del Comité de Cuenca se esté manejando como corresponde, para poder retener el agua en caso de una lluvia importante y así recuperar la Laguna”, dijo a este diario.
En el caso de El Carpincho, aclaró que “el nivel se mantiene ya que en ese espejo de agua llegan los pluviales de la ciudad”. E informó que “el plan de manejo lo define el Comité de Cuenca del Salado y lo maneja Hidráulica. Es por eso que enviamos personal, para asegurar que el plan esté bien y que no se pierdan lluvias importantes”.
Esta situación de sequía, “hay que ponerla en un contexto crítico con olas de calor y con el fenómeno El Niño que aún no ha sido muy beneficioso”, explicó Álvarez. Pero aclaró: “Estamos saliendo de La Niña y las lluvias no se han visto reflejadas en las lagunas. En Trenque Lauquen también están bajos los niveles, al igual que en Chascomús, donde hay mortandad de peces y se suspendió una competencia de kayak”.
“El panorama es complejo, a pesar de que mejoraron las lluvias. Los campos están mejores, pero los sistemas de lagunas no se recuperaron, arrastrando tres años de sequía”, señaló el subsecretario en exclusiva a Democracia. Y agregó que “no ha llovido lo suficiente” en la zona que alimenta la superficie de la cuenca del Salado, y que las lluvias de Córdoba fueron “más arriba”.
Por último, dijo que existían expectativas de que septiembre último iba a ser llovedor y que se había armado una mesa hídrica de emergencia, pero “la lluvia no fue lo suficiente y los pronósticos no se vienen cumpliendo”.
“Entra un hilo de agua”
Al respecto, el concejal y exsecretario de Obras Públicas Marcelo Balestrasse realizó una recorrida ayer por la zona de Mar Chiquita, donde afirmó que está entrando poca agua por la cañada Las Horquetas, a la altura de la Ruta 50.
“Preocupados por la situación. El intendente Pablo Petrecca nos pidió un informe, por lo que realizamos una recorrida con Juan Fiorini para verificar la situación y ver si había un tema extra al climático que debíamos trabajar con Provincia, que es quien tiene el manejo de compuertas”, manifestó.
“Las lagunas de Junín están sufriendo la mayor sequía de los últimos 60 o 70 años que se tenga memoria. Son dos años consecutivos y tres de La Niña, lo cual es un periodo seco, y en este caso fue extremadamente seco, donde no se pasó la mitad de la media anual y han llovido por año 400-500 milímetros, teniendo en cuenta que llueve de 900 a 1100”, comenzó diciendo.
“Si sumás los tres últimos veranos tenés una faltante hídrica no más por la época estival de 1.200 metros cúbicos. Con lo cual realmente el sistema lo ha afectado, tal como se ve, una sequía de las más grandes que se recuerda. Del 47 al 51 hubo sequía, en el 63 hubo sequía, en el 85, 86 hubo sequía, en el 2009 hubo sequía, y ahora actualmente en los últimos dos años hay sequía, pero ninguna fue tan grave como la de ahora, porque siempre en Gómez se mantuvo el agua en el medio y ahora directamente no está”, indicó a este diario.
Según dijo, el fenómeno de lluvias llamado El Niño “ya está en esta región, pero no está llegando a la zona pampeana, mejor dicho. Está lloviendo mucho en Brasil, está lloviendo mucho en el norte de nuestro país, en la zona de Córdoba también, en el Litoral, pero no llega a la zona pampeana todavía”.
“Esa es la consecuencia de que toda la cuenca de la subregión A1, donde estamos inmersos, tenga tanta sequía y haya hecho desaparecer prácticamente las lagunas, o las dos lagunas más importantes, que son Mar Chiquita y Gómez”, agregó.
La cuenca la integran los partidos de General Villegas, Ameghino, General Pinto, General Arenales, Leandro N. Alem, Lincoln, Viamonte, y Junín. “Y también recibimos agua por fuera de la cuenca del río Salado, directamente por fuera de la provincia de Buenos Aires y el sur de Santa Fe, todo lo que es lagunas encadenadas, Laguna el Chañar. También, al oeste de Arribeños, hay una cuenca pequeña que termina en Arenales y desemboca en la laguna. Los tres afluentes más importantes son esta cuenca que viene de Arribeños, que hoy está seca; lo que viene del sur de Santa Fe y Teodelina, que hoy no está ingresando agua, también está prácticamente sin ningún tipo de evento hídrico importante”, explicó.
“Y, por último, la más grande de todas, que es la cañada Las Horquetas, nos trae agua desde la laguna La Salada, en Coronel Granada. Hoy está entrando un hilo de agua ahí, prácticamente, y es lo que está alimentando, de a poco, a Mar Chiquita, que estuvo hasta el año pasado totalmente seca, como está Gómez hoy”, subrayó.
Pero “con el agua que ingresó de las últimas lluvias no alcanza para más que una superficie laminar, pocos centímetros, y el agua hoy no llega ni siquiera al sistema de compuertas de Mar Chiquita. Está muy por debajo de la cota de la línea de ribera, que es 75-50. Hoy la cota debe ser menos de 75, ya en esa zona de Mar Chiquita”, señaló.
A su vez, Mar Chiquita, “cuando se levanta, cuando agarra el caudal necesario, vuelca sus aguas ya al canal hecho por el Plan Maestro del Salado, que llega hasta el Puente Morote y es de allí donde nace la Laguna de Gómez. Hoy está ese canal con agua, pero estancada, porque su profundidad es menor que el piso de las lagunas”, agregó Balestrasse a Democracia.
Tanto el Puente Morote como el Puente de Saforcada, de la Ruta 7, “están secos al igual que Gómez. Hay algo de agua a la altura de la isla, conocida como la Isla de Borchex, para el lado del Rincón del Carpincho (sur), y en la zona denominada Tres Aguas, donde se juntan tres lenguas de la laguna. Todo este sistema está con una depresión y con una faltante hídrica muy grande”. También, el concejal resaltó que “las napas están a flor de tierra, pero no tienen la suficiente fuerza e ímpetu para sobresalir y alimentar las lagunas. En el caso de Gómez, muchas veces es alimentada por napas, pero hoy no tienen la suficiente fuerza para salir a superficie. Están muy bajas”.
Por último, destacó que el canal, entre Ruta 7 y El Carpincho, tiene agua y aclaró que “ahí hay muy poca diferencia de nivel, y es el agua que fundamentalmente largamos los vecinos de Junín hacia la calle, por los sumideros y los desagües pluviales que van hacia El Carpincho. Además de las lluvias que hubo, y como no está pasando la compuerta, el agua está retenida y hoy se está manteniendo el nivel”.
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