El Frente de todos cruzado por una fuerte interna
Nuevo capítulo de una pelea política que se libra en el oficialismo bonaerense de manera subterránea.
En medio de la compleja situación social agigantada por los elevados índices de inflación, pasó de costado, casi desapercibido, el nuevo capítulo de una pelea política que de manera subterránea se libra en el oficialismo bonaerense. Sin tener la exposición pública que exhibe el PRO para mostrar sus aspirantes a la Provincia, en el Frente de Todos hay dirigentes territoriales del peronismo dispuestos a no aceptar, al menos por ahora, la candidatura a la reelección de Axel Kicillof.
Existen movimientos, algunos poco perceptibles. Otros, un poco más explícitos como el que acaba de concretar un diputado provincial al compás de una declaración fuerte: salió a plantear directamente que Kicillof debería ser candidato a presidente. Quien lanzó esa apreciación mezclada con expresión de deseos fue Alejandro Dicchiara, quien reporta a Lomas de Zamora. Dicchiara es un hombre del jefe de ese distrito, Martín Insaurralde.
Esa ligazón acaso contribuya a aclarar algunas cuestiones. La primera es que si bien el nombre de Kicillof suena fuerte para ir por un nuevo mandato con la supuesta bendición de Cristina Kirchner, existe un núcleo de intendentes del peronismo que intentan resistir. Insaurralde, actual jefe de Gabinete provincial, es el nombre que enarbolan como alternativa.
La declaración de Dicchiara tiene, entonces, el valor del proyecto político que parece estar detrás. Si Kicillof fuera candidato presidencial, el casillero bonaerense quedaría vacío.
Es el escenario con el que sueñan en varios distritos del Conurbano.
Precauciones
Cerca del Gobernador toman precauciones. Dicen no tener información en contrario respecto de que el futuro mediato de Kicillof no será otro que el bonaerense. Pero por las dudas, mantienen la guardia en alto. Otros dos intendentes peronistas, el histórico Juan José Mussi (Berazategui) y el kirchnerista Pablo Zurro (Pehuajó), salieron casi de inmediato a hablar de que el actual mandatario debe ir por otro período. ¿Actuaron convencidos o recibieron algún llamado para que salieran a cruzar a Dicchiara? Quizás hubo un poco de cada cosa.
Kicillof, mientras tanto, viene expresando su preocupación por la marcha de la economía y en particular con una de sus variables: los precios. Hay quienes atribuyen al Gobernador ser uno de los principales impulsores de un proyecto para establecer un congelamiento por seis meses con método para domar la inflación. Cristina Kirchner escucha con atención esos consejos.
De acuerdo a lo que vienen trascendiendo, el ministro de Economía Sergio Massa no estaría de acuerdo con la adopción de esa medida. Ese rechazo acaso tenga una respuesta mañana, en la conmemoración del Día de la Lealtad en Plaza de Mayo a la que asistirán Máximo Kirchner, Kicillof y dirigentes sindicales que orbitan el kirchnerismo.
La Provincia quizás brinde en ese emblemático día para el partido fundado por Juan Domingo Perón, una respuesta acorde a la liturgia y anuncie el aumento salarial que los gremios docentes, estatales, médicos y judiciales le vienen reclamando para que los sueldos no pierdan contra la inflación.
Mensajes
Esa jornada dejará expuesta para el oficialismo otra fisura. Las organizaciones sociales albertistas denominadas Los Cayetanos, harán su propio acto en La Matanza y no irán a Plaza de Mayo. El mensaje no se acota en la elección de lugares distintos como forma de marcar diferencias con La Cámpora y el sindicalismo K: puede que se transforme en un mensaje que acaso pueda impactar sobre los planes electorales del kirchnerismo.