El fiscal interino de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nº32, Leonel Gómez Barbella, solicitó la elevación a juicio oral y público de la causa que investiga al arquero de Sarmiento de Junín, Lucas Mauricio Acosta. Se le imputan los delitos de amenazas coactivas a su expareja y la difusión sin consentimiento de un video de contenido íntimo.
Los hechos se habrían iniciado el 19 de julio del año pasado, cuando la denunciante encontró una nota amenazante en el parabrisas de su vehículo, en Vicente López. Horas después, un video íntimo suyo fue difundido sin su consentimiento en un grupo de mensajería, lo que motivó la denuncia formal el 20 de julio ante la Policía de la Ciudad.
El 14 de agosto, la víctima habría recibido nuevas amenazas. Durante la investigación, se incorporaron diversas pruebas, incluyendo capturas de pantalla de redes sociales, informes médicos, grabaciones de cámaras de seguridad, testimonios de la denunciante y allegados, análisis de teléfonos y la declaración del propio acusado.
En su declaración indagatoria, Lucas Acosta negó haber sido notificado como denunciado y afirmó no haber estado en Buenos Aires en las fechas de los hechos, salvo por motivos laborales. Declaró tener la aplicación Telegram instalada, pero sin cuentas activas ni haber subido videos.
No obstante, el fiscal Gómez Barbella consideró que el arquero de Sarmiento de Junín habría proporcionado a terceros información sensible de la víctima, como su número telefónico, lugar de trabajo y el video íntimo. Además, se destacó que el contenido difundido incluía una captura de la víctima junto a una amiga, lo que implicaría un conocimiento personal de su entorno.
Inicialmente, la línea utilizada para las amenazas fue atribuida a una mujer, quien fue sobreseída el 23 de diciembre de 2024. El fiscal señaló que la conducta de Lucas Acosta se enmarca en la Ley de protección integral contra la violencia hacia las mujeres y la Ley Olimpia, que incorpora el concepto de violencia digital al marco legal argentino.
Gómez Barbella sostuvo que el accionar imputado constituye una forma de agresión basada en el género, con el fin de vulnerar la dignidad e intimidad de la víctima mediante la difusión no consentida de material íntimo.
La calificación legal propuesta es la de amenazas coactivas reiteradas en calidad de autor. Por lo expuesto, Gómez Barbella solicitó que el caso avance a la etapa de juicio oral y público para determinar la eventual responsabilidad penal de Lucas Acosta.
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