El crimen de Eva Falcón, cometido en 2000 por su pareja Ramón Ángel Abregú, quedó este martes impune ya que la Justicia de Tierra del Fuego declaró prescripta la causa. El femicida estuvo 22 años prófugo luego de escaparse de la cárcel y se entregó en octubre pasado para reclamar lo que el magistrado resolvió.
La decisión fue adoptada por la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones de la ciudad de Río Grande y esta resolución fue apelada en una última instancia ante el Superior Tribunal de Justicia de la provincia, por lo que se deberá esperar si el fallo se mantiene firme.
Durante 22 años, Abregú se mantuvo oculto en la selva, en el Chaco Salteño, y logró reingresar a Tierra del Fuego sin ser detectado. Su abogado reveló que pasó por cuatro pasos fronterizos -dos argentinos y dos chilenos- "de manera furtiva" y sin llevar documentos encima.
De esta manera, el imputado pudo llegar en octubre pasado caminando hasta las puertas del Tribunal de Juicio en lo Criminal de Río Grande, el mismo que había ordenado su captura hace más de 20 años. Lo hizo junto al letrado Alejandro De la Riva, quien presentó un escrito solicitando su libertad debido a la "prescripción del caso".
Si el fallo de la Cámara queda firme, Abregú recuperará la libertad. De tener que cumplir la condena, el femicida podría solicitar la prisión domiciliaria debido a que tiene 70 años.
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