La causa por el crimen de Mauricio Cordara sigue avanzando. La última información referida a este policial la aportó la fiscal Magdalena Brandt, a cargo de la UFI 1 y de la investigación por el salvaje asesinato de Cordara, chofer del ex diputado Pablo Ansaloni.
Brandt señaló algunos aspectos de la causa, que ya tiene a cuatro imputados, tres en carácter de participe por estar relacionado con la preparación del coche para el asesinato y uno como autor.
En una nota brindada al medio 02473 Noticias, la fiscal dijo que una de las primeras puntas de investigación fue la visualización del famoso palio rojo, que se utilizó para perpetuar el asesinato, a través de las cámaras de seguridad del distrito. “Está faltando detener a una o dos personas”, agregó.
Si bien aún hay muchas hipótesis sobre el móvil del crimen, Brand confirmó que los criminales se equivocaron de persona, ya que el ataque era dirigido al gremialista de Uatre, Pablo Ansaloni.
Lo cierto es que cada vez quedan menos piezas sueltas de la trama mafiosa detrás del crimen de Cordara. Hay que recordar que en los últimos días la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de Santa Fe capturó a Iván Alonso (19), quien ante la Policía provincial admitió haber conducido el Fiat Palio rojo del que bajó el sicario y mató al asistente de Ansaloni el 18 de noviembre pasado.
Alonso, que tenía pedido de captura por homicidio agravado por ensañamiento y alevosía en calidad de coautor, se había teñido de rubio para evitar ser reconocido por los agentes que lo buscaban. Sin embargo, no logró engañar a la brigada de la AIC, bajo la dirección de Damián Meza, que lo seguía.
En ese momento, según indicaron fuentes del caso, admitió que era la persona tras el volante del vehículo involucrado en el homicidio. Sus dichos deberán ser refrendados ante el Ministerio Público de la Acusación.
A pesar de ello, dijo que le habían pagado 50 mil pesos para conducir el coche y que nada sabía del encargo. El día del crimen, lejos de denunciarlo, retomó el camino rumbo a Rosario, desde dónde habían salido, sin tener en cuenta que las cámaras de seguridad registraron su paso.
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