La interna en el peronismo bonaerense volvió a quedar expuesta durante un acto oficial en la Gobernación. Fue cuando la intendenta camporista de Quilmes, Mayra Mendoza, cruzó con dureza a su par de Avellaneda, Jorge Ferraresi.
El telón de fondo es la disputa que libra la agrupación que lidera Máximo Kirchner con Axel Kicillof. ¿Dónde encaja Ferraresi en esta pelea? El alcalde comenzó a caminar la Provincia en busca de su propia proyección pero promoviendo la candidatura presidencial del Gobernador.
La reacción de Mendoza se enmarca en ese clima de tensión. Pero la quilmeña directamente estalló porque el fin de semana pasado Ferraresi le anduvo caminando su distrito donde encabezó un acto junto a dirigentes peronistas enfrentados con la jefa distrital.
El episodio en Casa de Gobierno ocurrió frente al propio Kicillof que había convocado a varios intendentes para firmar convenios para la compra de maquinarias. Cuando Mendoza se cruzó con Ferraresi, cuentan diversas fuentes, le lanzó un exabrupto.
Varios de los asistentes quedaron perplejos, pero el acto continuó. Mendoza decidió ausentarse de la foto final.
En La Cámpora le apuntan al propio Kicillof por tensar la cuerda. Aseguran que no puede estar ajeno a estos movimientos territoriales de Ferraresi. “No es sólo contra Mayra o contra La Cámpora. Lo mismo le hicieron al Frente Renovador en San Fernando y a Menéndez en Merlo”, cuestionan.
“Son provocaciones. Arman un acto contra Mayra en Quilmes con Ferraresi y la foto del Gobernador, diciendo “todos con Axel”, hablando mal de otros sectores del peronismo y promoviendo divisiones. Al otro día, nos llaman para sacarnos una foto como si no hubiese pasado nada. Todo esto es un error político porque lo único que hace es romper el peronismo de la Provincia y distanciar a los intendentes”, dicen fuentes de la organización que lidera Máximo Kirchner.
Si bien parecía que Kicillof y Máximo Kirchner habían acordado una tregua, el alto el fuego se rompió hace varios días. El de ayer en la Gobernación es un episodio más de la disputa que retornó con fuerza.
De hecho, tal como informara en exclusiva este diario, cerca de Kicillof acusan a La Cámpora de haber promovido un polémico proyecto en la Legislatura para aumentar las indemnizaciones por despidos. Dejan trascender que lo hicieron para hacerle pagar un costo político al Gobernador.
Esa iniciativa fue aprobada en la Cámara de Diputados y generó un enorme revuelo en el Senado, hasta donde se movilizaron distintos sectores empresarios para expresar su rechazo. Argumentan que las indemnizaciones se multiplicarán por 7, que en esas condiciones ninguna Pymes va a tomar trabajadores y que varias firmas se verán obligadas a cesar su actividad.
El proyecto fue impulsado por diputadas camporistas. En Gobernación creen que buscaron empujar a Kicillof a maniobrar para frenar la ley o incluso tener que vetarla. Al final, la oposición se juntó y garantizó que no pasará en la Cámara alta.
ACTO
En medio de este clima, Kicillof tiene previsto encabezar el 1 de julio una actividad en la Quinta de San Vicente con motivo de cumplirse un nuevo aniversario del fallecimiento de Juan Domingo Perón. Sería un acto sin militancia aunque ahora quedó en medio de la disputa renovada. La incógnita es si La Cámpora participará de ese acto o si optará por vaciarlo como ocurrió hace un mes en Florencio Varela cuando Kicillof convocó a un plenario en el que mostró parte de su armado político, pero con la excusa de rechazar las políticas del gobierno nacional.
Tras el revuelo, la intendenta de Quilmes procuró luego bajarle el perfil de la disputa. A través de sus redes sociales escribió que “mientras en el gobierno nacional suspendieron las obras, desde la Provincia y el municipio seguimos trabajando para la comunidad”. Pero para entonces, la renovada disputa ya estaba instalada.
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