Miembros de la cooperativa Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP) se movilizaron ayer a la Municipalidad de Lanús para denunciar una supuesta “desproporción presupuestaria” en torno a las cooperativas, en un territorio comandado por Julián Álvarez, alineado a La Cámpora de Máximo Kirchner.
La protesta tuvo lugar 24 horas después de que se registrara un conflicto similar en Quilmes, y por el que se cruzaron el dirigente Juan Grabois y la diputada provincial Mayra Mendoza a raíz de un reclamo de los trapitos.
Si bien a UTEP actualmente la conduce Alejandro Gramajo, el diputado Grabois es uno de los fundadores.
Gramajo sostuvo que “en la cooperativa de Lanús están cobrando 130.000 pesos” y, por ese motivo, “reclaman un bono de fin de año”.
Consultado por la Agencia Noticias Argentinas sobre si el reclamo estuvo vinculado con la movilización del martes en Quilmes, Gramajo sostuvo que son planteos “distintos” porque los trabajadores informales de ayer rechazaron “una ordenanza que se estaba votando en el Concejo Deliberante” y que, puntualmente, “afectaba a los cuidadocoches”.
“Esto es una movilización que definieron los compañeros de Lanús vinculado a que hay compañeros cooperativistas que trabajan para el municipio y que cobran 130.000 pesos, que no tienen bonos de fin de año. Esos son los dos reclamos centrales. Después también despidieron a promotoras de salud que están vinculadas a la UTEP. Son reclamos distintos, pero, por supuesto, del mismo sector”, aclaró.
El episodio de los trapitos en Quilmes fue brutalmente reprimido a pedido de la gestión local camporista para sofocar la protesta en contra de la ordenanza municipal que establece un sistema privado de estacionamiento medido.
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