El Gobierno buscará sacar la reforma laboral en extraordinarias
Mientras tanto, la CGT se puso en guardia.
El Gobierno aceleró el proyecto de reforma laboral y planea tratarla en sesiones extraordinarias con la nueva composición del Congreso, envalentonado por el contundente triunfo electoral del domingo y ante la inminencia de una última reunión del Consejo de Mayo pautada para entre el 20 y el 27 de noviembre.
La CGT, por su parte, recibió como un baldazo de agua fría el inesperado éxito electoral del partido libertario y ahora afronta el desafío de tratar de resistir esa reforma o suavizarla frente a una administración libertaria con mayor fortaleza, con bloques de diputados y senadores más robustos de lo que se pensaba antes de las elecciones.
En este contexto, el cosecretario general de la CGT Héctor Daer adelantó ayer que la central obrera rechazará la reforma laboral que propone el Gobierno si es para “retroceder” en los derechos adquiridos.
“Si la reforma laboral es progresiva es una cosa. Nosotros tenemos un concepto de progresión de derechos, pero si es para retroceder no va a haber ninguna negociación de ningún tipo”, sentenció Daer en declaraciones radiales.
Hasta el momento, la central obrera venía participando de las reuniones del Consejo de Mayo a través de uno de los referentes de su “mersa chica”, el titular de la UOCRA, Gerardo Martínez, quien de todos modos hace una semana advirtió que “la pretendida reforma laboral como solución a todos los males que acumula nuestro país en materia económica no es más que la ratificación del Decreto 70/23 en su capítulo laboral, decisión inconsulta y que fuera oportunamente rechazado por la CGT y judicializado con éxito por nuestra central sindical”.
En ese marco, la CGT pronosticaba que tras los comicios recientes el Gobierno de Milei quedaría golpeado por una derrota y con poco resto para pelear una reforma laboral. Pero el resultado del domingo cambió drásticamente el escenario.