Cuando todavía la aprobación del aumento a los jubilados era una posibilidad incierta, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, salía a cuestionar duramente la sesión que ya había logrado quórum en el Senado para ese fin y la definía como “un golpe institucional”. En esa misma entrevista, adelantaba que, en caso de que se aprueben los proyectos que impulsa la oposición -como finalmente sucedió- el Gobierno no los dará por “válidos”.
“La sesión del Senado es una suerte de golpe institucional”, afirmó el jefe de Ministros en declaraciones a Radio Rivadavia.
Francos se refería a los proyectos de aumentos a las jubilaciones, la extensión de la moratoria y la declaración de la emergencia por Discapacidad, y se mostraba contundente: el Gobierno “no lo va a dar por válido” y lo va a “judicializar” porque, dijo, la sesión “no es legítima”.
“El Ejecutivo lo va a vetar y va a plantear judicialmente la ilegitimidad”, advirtió.
A su vez, sostuvo que no se pueden aumentar las jubilaciones “de manera ilegítima” y “sin fundamentos ni recursos económicos” y lanzó críticas hacia el kirchnerismo por “destruirlas” durante su mandato.
“El kirchnerismo destruyó el sistema jubilatorio de la Argentina. Hay un interés por oponerse al plan económico del Gobierno. No tienen argumentos para atacar, salvo imponer un gasto que no tiene recursos; quieren romper el equilibrio fiscal”, manifestó.
Y advirtió que la oposición “intenta debilitarnos de acá a octubre, pero los resultados del plan económico están y no lo van a poder cambiar”.
Frente a la posibilidad de que los proyectos del Senado rompan el equilibrio fiscal conseguido por la administración libertaria, Francos negó que la aprobación del temario vaya a a influir en las cuentas públicas.
“La sesión de hoy no es indispensable para el plan económico que tenemos. Tampoco creo que sea determinante para el equilibrio fiscal.”
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