Por separado, el juez federal Ariel Lijo y el catedrático Manuel García-Mansilla, los dos candidatos propuestos por Javier Milei para completar la Corte Suprema de Justicia de la Nación, deben presentarse en el Senado nacional para las audiencia públicas: el primero -cuyo pliego es el más polémico-, el 21 de agosto; el segundo, el 28 de ese mes.
Así lo anunció la presidenta de la comisión de Acuerdos, Guadalupe Tagliaferri (PRO-CABA), tras un consenso entre el oficialismo y los bloques dialoguistas, que ya elevó una nota a la Secretaría Parlamentaria del Senado, que depende la de la vicepresidenta Victoria Villaruel, notificando las fechas en las que debe recibir a los postulantes, quienes tienen que defender sus designaciones.
Ahora, las autoridades del Senado deben avanzar con la publicación en el Boletín Oficial del edicto convocando a las audiencias. Eso se concretará el 19 y el 22 de este mes. Es el comienzo oficial del tratamiento legislativo de ambos pliegos.
Una vez publicados los edictos, el 23 de julio se abrirá un proceso de 7 días en el se recibirán adhesiones e impugnaciones a las candidaturas de Lijo y García-Mansilla. Una vez cumplimentado este paso, la Comisión de Acuerdos tendrá tres días para analizar las presentaciones y girarle a los postulantes aquellas impugnaciones que haya considerado válidas. El ciclo se completa con un período de cuatro días en el que los nominados deberán responder los cuestionamientos formulados a sus candidaturas.
El apuro oficial
La decisión de llevar todo a la segunda quincena de agosto fue consensuada por Tagliaferri con los miembros de la Comisión de Acuerdos. Pero la definición de la fecha no estuvo exenta de tironeos entre la Casa Rosada y la presidencia del Senado. Es un reflejo de la disputa que mantienen Villarruel, por un lado, y la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, y el poderoso asesor presidencial Santiago Caputo, por el otro. El Ejecutivo pretendía que fuera antes.
Se esperan largas audiencias en el Senado sobre todo con Lijo, ya que sumó 328 impugnaciones durante el proceso pre-legislativo, que estuvo a cargo del Ministerio de Justicia. Entre otros actores, lo observaron la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina (AMJA), el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP), la Federación Argentina de Colegios de Abogados y Poder Ciudadano. La lista sigue. Además, enfrenta una denuncia en el ámbito del Consejo de la Magistratura. Allí, el kirchnerismo mantiene frenada la apertura de un sumario administrativo por mal desempeño en sus funciones por no haber profundizado la investigación del proceso de re-estatización de YPF.
Es una denuncia presentada en su momento por Elisa Carrió. Y ese sugestivo parate es parte del combustible que enciende las especulaciones de un acuerdo entre el gobierno libertario y Cristina Kirchner en torno al nombre del juez.
“Los dos o ninguno”
Los casos de Lijo y García-Mansilla serán discutidos en medio de un clima de creciente tensión política ante la decisión del Gobierno de exigir que “se aprueban los dos pliegos o ninguno”. Esta postura encendió las alarmas: ¿y si esa exigencia los anularan mutuamente y no se consiguen los votos necesarios en el Senado?
Para ser designado juez de la Corte se requiere de una mayoría calificada de dos tercios de los senadores presentes el día de la votación. Cerca de Lijo aseguran tener ese apoyo, aun cuando ningún senador ha manifestado de manera pública su decisión de respaldarlo. Es que se habría movido en las sombras con perfil de lobbista de su propia postulación.
La postulación de García-Mansilla encuentra resistencia por su postura en contra del aborto legal y porque injustamente ha quedado como ocupando un lugar que debería corresponder a una mujer. ¿Porqué no endilgarle a Lijo ese cupo si en verdad sería él quien terminaría reemplazando a Helena Highton, ya jubilada? Es que García-Mansilla se propone para reemplazar a Juan Carlos Maqueda, recién a fin de año. Así, por aquello de “los dos o ninguno” la situación del catedrático de la Universidad Austral amenaza con convertirse en un pesado lastre para Lijo.
En el Senado esperan una intensa negociación entre el oficialismo y los dialoguistas. El bloque de La Libertad Avanza sólo tiene 7 senadores y con el PRO, que hasta aquí fue su principal aliado, llega a los 14 votos. La nominación de Lijo enfrentaría algunos rechazos dentro del propio bloque libertario. Además, Luis Juez y Carmen Alvarez Rivero, ambos amarillos, avisaron que no lo votarán. Carolina Losada también anticipó al interior del bloque UCR que votará en contra, mientras que la cordobesa Alejandra Vigo (Unidad Federal) presentó un proyecto para que se respete la paridad de género en el máximo tribunal. ¿Otro aviso para no avalarlo?
El resto de los senadores mantiene en reserva su opinión. Es claro que asoma como vital para que sobre todo Lijo se convierta en cortesano el apoyo del kirchnerismo.
Compartir