"Afortunadamente estamos avanzando en la construcción de los caniles... ya pronto mis HIJITOS vendrán a vivir a la Quinta de Olivos conmigo...", escribió en X (antes Twitter) ayer sábado el presidente Javier Milei, y acompañó el posteo con fotos.
Días atrás se había enfurecido por versiones sobre la mudanza de sus perros a Olivos. Había utilizado sus redes sociales para desmentir airadamente que en su mudanza había llevado a sus perros. No le faltan problemas al gobierno del ultraderechista, pero cuando se trata de sus perros todo lo demás pareciera pasar a un segundo plano.
Milei se mudó a Olivos a casi un mes de asumir como presidente. Su demora en trasladarse, según la respuesta que dio, fue que sus perros no podían acompañarlo porque no estaban las condiciones para alojarlos. La mudanza quedaba condicionada a que sus mascotas estén bajo el mismo techo que él, y para eso necesitaba que llegaran materiales importados para realizar la construcción de los caniles.
La publicación de ayer sábado cierra con el típico "Viva la libertad, carajo", al que le siguen fotos de las jaulas, contradicción señalada por usuarios de la red social.
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