Allanaron los domicilios deInsaurralde, Cirio y Clerici
En busca de documentos, teléfonos y computadoras en el marco de la investigación por presuntos delitos de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito.
El juez federal Ernesto Kreplak ordenó allanamientos en siete inmuebles en los que viven o habrían vivido el intendente de Lomas de Zamora en uso de licencia Martín Insaurralde, su exesposa Jesica Cirio y su pareja reciente Sofía Clerici, como parte de una causa penal que los investiga por los presuntos delitos de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito.
Vinculados con Insaurralde, Kreplak dispuso allanar una casa en un barrio cerrado de San Vicente, en un inmueble en Lomas de Zamora y en otro en Banfield. Figuran en distintos registros como de propiedad de él, dijo una fuente de la investigación.
En cuanto a Cirio, la orden fue avanzar en dos domicilios del barrio porteño de Cañitas. En uno de ellos vive. Con respecto al otro, si bien las tareas previas habían arrojado como resultado que ella lo utilizaría, cuando llegó la Policía se encontró con una familia que habita allí y dijo haberlo comprado hace varios años.
En relación con Clerici, el juez ordenó allanar un inmueble de Nordelta en el que vive y otro de Martínez, que pertenecería a una amiga, pero en el que le reciben correspondencia. Según informaron fuentes judiciales a La Nación, Kreplak ordenó los operativos a pedido del fiscal del caso, Sergio Mola, luego de varios días de tareas de investigación policial destinada a determinar cuáles eran los lugares en los que podría haber documentos y otras pruebas útiles para la causa. Los responsables de los operativos tenían la orden de llevarse, por ejemplo, computadoras y teléfonos.
Esta causa se inició después de que Clerici publicó en sus redes fotos de un viaje con Insaurralde por el Mediterráneo a bordo de un yate, llamado “El Bandido”, rodeados de lujos.
La declaración jurada de Insaurralde que está en poder de la Oficina Anticorrupción, en la que declaró como todo patrimonio el equivalente a menos de 50.000 dólares, no parece condecirse con el tren de vida que muestran esas fotos. Conocidas las imágenes, llovieron las denuncias contra Insaurralde. Finalmente, se fueron acumulando en el juzgado de Kreplak.