Argentina no crece y los argentinos se empobrecen. Así lo indican los números del Indec, que esta semana revelaron que más del 40% de los habitantes de nuestro país son pobres o indigentes.
La falta de crecimiento y generación de riqueza de la economía argentina se reflejan en el indicador del PBI per cápita, que hoy iguala niveles de 2007 y la proyección, con inflación y devaluación mediante, determinarían niveles mucho más bajos de ingresos para la población. Además, dejan en evidencia que en 16 años la economía no logró crecer lo suficiente para que los ingresos de sus habitantes mejoren.
Un informe elaborado por la Fundación Libertad y Progreso en base a estadísticas oficiales indica que, con datos hasta julio de 2023, el ingreso por habitante se ubicó en los mismos niveles que registraba en abril del año 2007. Desde la Fundación advierten que las proyecciones son negativas para lo que resta del 2023.
Los últimos datos del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) publicados por el INDEC, mostraron que la actividad cayó un 1,3% anual en julio. En la tendencia de largo plazo Argentina acumula doce años de estancamiento en el nivel de actividad. El último dato del EMAE está solo 0,2% por encima del pico registrado en septiembre de 2011.
El panorama es aún más dramático cuando se observa el desempeño económico ajustado por el crecimiento poblacional. En el mismo período (2011-2023), la población creció a una tasa promedio del 1% anual y un 12,7% entre puntas, según estadísticas demográficas del INDEC. En otras palabras, la economía no acompañó el crecimiento de la población, lo que derivó en una caída del ingreso por habitante del 11,1% entre septiembre del 2011 y julio de 2023.
Teniendo en cuenta los vaivenes cíclicos de la economía argentina, el EMAE per cápita de julio de 2023 es equivalente al registrado en noviembre de 2021, octubre de 2019, octubre del 2009 y abril del 2007, por tomar algunas referencias.
Para lo que resta del 2023, la Fundación Libertad y Progreso estima que continuará el deterioro en la actividad económica y que el PBI podría cerrar el año con caídas de hasta el 5% anual. De confirmarse esta proyección, para diciembre de 2023 el ingreso por habitante estaría en los mismos niveles de julio del 2006.
Eugenio Marí, Economista Jefe de la Fundación Libertad y Progreso dijo que “si Argentina hubiese crecido al mismo ritmo que el promedio de la región, hoy tendríamos un PBI per cápita alrededor de 15% superior al actual. Esto significaría menos pobreza, menos marginalidad, más oportunidades”.
Marí además agregó que “pero el crecimiento no es una causa, sino una consecuencia. Para volver a crecer de manera sostenida hay que cambiar las reglas de juego y devolver potestades al sector privado. El modelo económico de cada vez más Estado fracasó y ahora estamos frente al desafío de poner en vigencia un modelo nuevo que devuelva la rentabilidad a la inversión y al trabajo”.
A partir de 2012 la economía comenzó a alternar años de crecimiento con caídas, en ambos casos moderadas.
El PBI per cápita de nuestro país calculado por el Banco Mundial viene cayendo en picada desde 2017, cuando alcanzó los 14.613 dólares por persona al año.
Tras las varias devaluaciones recientes que sufrió el peso, el PBI per cápita se ubicó en 2020 en 8.441 dólares por persona al año.
Este valor significó una abrupta caída del PBI per cápita en relación a 2019. El PBI cayó desde 2018, y fue duramente golpeado por las restricciones impuestas en medio de la pandemia de Covid-19 en 2020. En 2021, en medio de la recuperación por el derrumbe anterior, dio un salto y se ubicó, en valores nominales, en U$S487.230 millones, y un año después trepó a U$S632.770 millones, según el Banco Mundial.
Argentina registró la peor caída de su Producto Bruto Interno (PBI) per cápita entre 2010 y 2020 en Latinoamérica. Así lo señala un informe del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, según su sigla en inglés), que señaló que desde 2010 la evolución del PBI per cápita en los países fue: Perú 14%, Colombia 13%, Chile 8%, Brasil -6% y Argentina -16 por ciento.
De acuerdo con el CIA World Facebook, nuestro país se ubicaba de en el puesto 87 de entre 229 países, y en América Latina solo es superado por Chile y Uruguay y compartiendo valores con Costa Rica, según CNN.
En Provincia hubo caída interanual, pero crecimiento del 2,4% contra junio
El ministerio de Hacienda y Finanzas de la Provincia de Buenos Aires dio a conocer los datos de la actividad económica bonaerense que creció 2,4 por ciento durante el mes de julio, en relación con el mes anterior.
Si bien el indicador registró una merma interanual, al aislar el efecto sequía acumula un crecimiento de 1% en los 7 meses del año. En este contexto, el ministro Pablo López detalló que “el agro bonaerense (que explica el 40% de la actividad a nivel nacional) está dando los primeros signos de recuperación. Superada la sequía, existen condiciones reales para un nuevo ciclo virtuoso en la economía nacional”.
Según el gráfico que compartió Pablo López, la explotación de minas y canteras fue el sector que más creció en el primer semestre del año en relación al anterior. También crecieron las actividades inmobiliarias, el comercio mayorista y minorista, y la enseñanza.
En tanto que sólo cayeron la pesca, la intermediación financiera y el transporte y las comunicaciones, sin contar la actividad agropecuaria que se vio afectada por la sequía histórica.
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