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La contaminación de los cuerpos de agua y su impacto en los sistemas productivos

La contaminación de los cuerpos de agua y su impacto en los sistemas productivos

La creciente contaminación de los humedales por los aportes que reciben de diferentes orígenes provoca serios problemas en los sistemas de producción.

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El término humedales engloba una amplia variedad de ambientes, que comparten una propiedad que los diferencia de los ecosistemas terrestres: la presencia del agua como elemento característico. Esta juega un rol fundamental en la determinación de su estructura y funciones ecológicas 


¿Qué son los humedales?

 

Lagos, ríos, arroyos, lagunas y otros ecosistemas de agua se engloban actualmente bajo el término humedales (Wetland, en inglés). Por tanto, son parte del ambiente y  están en estrecha relación con los diferentes sistemas de producción,
Los procesos hidrológicos y ecológicos que ocurren en los humedales, la diversidad biológica que sustentan y los recursos naturales que proveen, determinan que estos ambientes sean esenciales para el desarrollo y bienestar de la humanidad.
Los humedales juegan un papel muy importante en el ciclo del agua; reciben agua por precipitaciones (lluvia, granizo), agua subterránea o a través de los ríos y arroyos, y la liberan ya sea a otros cursos de agua superficiales, por infiltración a través de los suelos constituyendo depósitos de agua subterránea o por evaporación y transpiración de las plantas nuevamente a la atmósfera.
Como en general el agua se acumula o su circulación es más lenta en los humedales, su liberación ocurre lentamente, y esto tiene importantes efectos: los humedales funcionan como reguladores de los excesos y deficiencias hídricas, favorecen la mitigación de crecientes y la recarga y descarga del agua subterránea. Además, a través de la retención, transformación y transporte de sedimentos, nutrientes y contaminantes, juegan un papel fundamental en los ciclos de la materia y en el mantenimiento de la calidad del agua. Dado que la disponibilidad de agua dulce se evidencia como uno de los problemas ambientales más significativos de los próximos años, la conservación de los humedales tiene una importancia vital para la humanidad.
 

Aportes que impactan…

 

Los continuos impactos que reciben los cuerpos de agua obligan a que permanentemente los sistemas reaccionen en busca de equilibrio. A los aportes que reciben provenientes de causas naturales (muerte de seres vivos, polvo, etc) hay que sumarle aquellos que son producto de la acción antrópica. Entre ellos, los efluentes cloacales sin tratar producen serios disturbios a través de los nutrientes que se generan en la descomposición de la materia orgánica. Su incorporación a los cuerpos de agua optimiza la oferta de nutrientes y acelera los procesos naturales hasta provocar disturbios en el sistema (Eutroficación).
Se suman además los aportes de escorrentía de campos que arrastran fertilizantes,  abonos y principios activos que se suman a las deyecciones de los sistemas de producción de carne.

Pero además de estas situaciones, en este último tiempo ha sido alarmante la presencia de algas verde azuladas (cianobacterias) que generan toxinas que provocan problemas en personas y animales. El efecto de las temperaturas crecientes (derivadas del cambio climático) sumado al aporte de nutrientes, y la luz solar, resultaron un ambiente favorable para la proliferación de cianobacterias y otros organismos perjudiciales.  
 

La incidencia en los sistemas de producción 

 

Si bien las regulaciones han frenado la “gran contaminación” derivada de los residuos de la industria, la "contaminación de fuentes no puntuales" ha ido avanzando y el grado de impacto en los ecosistemas ha ido en aumento. Hoy tenemos un importante volumen de agua dulce impactado y muchos cuerpos de agua, suman a su deterioro natural por el paso del tiempo los impactos derivados de la acción antrópica y por lo tanto están sufriendo un creciente deterioro y muchos se han transformado en cauces pantanosos con serias deficiencias de oxígeno que impiden la vida acuática. En esa situación, los humedales reducen los beneficios ecosistémicos y dejan de realizar el necesario intercambio de agua con la napa freática. En muchos casos hasta pueden afectar las aguas profundas y transformarse en verdaderos focos contaminantes. La afectación del agua freática se trasladará a los sistemas productivos que necesitan de un agua equilibrada de calidad y en cantidad suficiente para la bebida de los animales. La presencia de toxinas, puede provocar anomalías en el ganado y en las personas.
 

Hacia las soluciones.

 

Conociendo el diagnóstico, es importante conocer cuáles son las acciones que podemos llevar adelante para minimizar el problema. Es fundamental que se realicen monitoreos de agua de los sistemas de producción. La presencia alta de nitratos y nitritos indica que existe alguna fuente (materia orgánica, fertilizantes) de aportes que está impactando el agua de consumo.  Una determinación de toxinas podrá darnos idea de la proliferación de algas, así como la presencia de estas en laguna o estanques. La continua observación de lagunas y reservorios de agua dulce es importante a fin de determinar cambios de coloración o mortandad de peces, que podrían indicar situaciones anómalas. Tanto la limpieza permanente de estanques como la aireación a través de paletas o disipadores, son prácticas que mejoran las condiciones…en definitiva…saber que los ecosistemas de agua son sistemas muy sensibles y que podemos perjudicarlos, pero también, que con pequeñas acciones podemos beneficiarlos.

(*) Raúl Cardielo es director de ESAM. ESTUDIO AMBIENTAL.

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