El sector del campo pide audiencia al Gobierno nacional ante "la crítica situación de los productores agropecuarios"
Andrea Sarnari (FAA), Lucas Magnano (Coninagro), Carlos Castagnani (CRA) y Nicolás Pino (SRA) se reunieron ayer por la mañana en la sede de CRA. Los dirigentes de la Comisión de Enlace analizaron la crítica realidad que atraviesa el sector.
Los presidentes de las cuatro entidades que nuclean al campo argentino (FAA, Coninagro, CRA y SRA) definieron solicitar una audiencia con el Ministro de Economía y el Secretario de Agricultura, con el fin de exponer la crítica situación del campo y solicitar un alivio fiscal inmediato, a través de la reducción de impuestos que permita a los productores hacer frente a los costos crecientes y mantener sus actividades y la eliminación de los derechos de exportación.
Las condiciones climáticas, como la falta de lluvias y las altas temperaturas, sumado a la depresión de los precios internacionales y los altos costos de producción, condicionan la actividad que genera desarrollo económico y arraigo en todas las provincias del país. Frente a este contexto desde la Comisión de Enlace se propone trabajar en conjunto con el gobierno para encontrar soluciones de manera inmediata.
Además, se trataron otros temas clave para el desarrollo del sector: Infraestructura: mejorar caminos rurales y accesos para garantizar el traslado de insumos y producción. Hidrovía, puertos y ferrocarriles: la necesidad de avanzar en infraestructura estratégica que garantice una logística más eficiente y competitiva. Conectividad rural: promover inversiones que lleven internet de calidad a las economías regionales para fortalecer la productividad y la educación en el campo. Seguridad rural: la creciente preocupación por la inseguridad en el ámbito rural requiere de medidas inmediatas para proteger a los productores y familias rurales.
Socios en las malas
El campo fue uno de los motores de la recuperación económica de 2024. En rigor, fue el sector, junto con el petrolero, que hizo que la caída de la actividad no fuera tan pronunciada. Ahora, una incipiente sequía podría poner en riesgo esa inercia.
Así lo evidencian los distintos reportes elaborados por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y otros organismos especializados. Ya en diciembre, según la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías, se registró un "déficit" de precipitaciones y un "rápido desecamiento de la humedad" en los suelos. Ahí se empezaron a detectar "cultivos de verano con síntomas de estrés hídrico" sobre todo en el oeste de la provincia de Buenos Aires.
Esta falta de agua parece estar profundizándose, al menos durante esta primera quincena de enero. De acuerdo al Boletín Agrometorológico Decádico del SMN, prácticamente todo el territorio bonaerense atraviesa una sequía que puede oscilar entre incipiente (en el centro) y extrema (en el sudoeste).
Para completar el panorama, el futuro inmediato no se presenta muy prometedor. Las previsiones para el trimestre enero-febrero-marzo del SMN hablan de lluvias inferiores a las normales en el centro y este de la Provincia.
Las retenciones
Todavía falta para conocer el impacto que tendrá esta falta de agua en los cultivos y la cosecha. El presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa, Ignacio Kovarsky, ya avisó que "se está empezando a evaluar la declaración de emergencia (agropecuaria)". Castagnani, coincidió con su análisis y puso el ojo en los derechos de exportación, más conocidos como retenciones.