Las empresas semilleras están apostando fuerte al mejoramiento genético de materiales, buscando que tengan una mayor performance a diferentes ambientes, menor susceptibilidad a enfermedades, mejor índice de cosecha, mejora en la captación y eficiencia nutricional, resistencia a insectos, entre otros factores. Sin embargo, en el caso de especies autógamas como la soja, los avances en Argentina han sido más lentos.
La baja recuperación de la inversión por parte de la industria semillera, acota los presupuestos destinados al mejoramiento genético de autógamas. En este sentido, el nivel de inversión en investigación en mejoramiento genético de soja es considerablemente inferior en Argentina, al comparar con Brasil y Estados Unidos.
Recientes datos, evidencian que en Argentina la inversión en investigación en soja es 1 USD/ha, mientras que en Brasil y Estados Unidos es 2,5 y 5 USD/ha, respectivamente. El reconocimiento de la propiedad intelectual es fundamental para que la industria semillera continúe invirtiendo en investigación en nuestro país. En este sentido, según datos mostrados en el congreso de la cadena de valor de soja, el reconocimiento de la propiedad intelectual en Argentina es de 35%, siendo de 71% en Brasil y 100% en Estados Unidos.
Sin lugar a dudas, esto es una de las razones de la mayor inversión en investigación en los países competidores. La baja inversión en investigación y desarrollo en Argentina es notable. Esto deriva en una producción estancada respecto a los competidores. No obstante, se debe entender el contexto de esta situación.
El productor argentino sufre una carga impositiva insólita que se queda con gran parte de la rentabilidad lo cual no ocurre en Estados Unidos y Brasil, por lo que el comparativo que se realiza debe tener en cuenta esta realidad para evitar conclusiones equivocadas. El cultivo de soja podrá lograr una mejora en su productividad si se logra combinar mejora en la oferta genética y/o biotecnológica de las variedades, junto con mejoras en las prácticas de manejo.
Argentina ha sido vanguardista en la adopción de la oferta genética y biotecnológica, así como la adaptación a diferentes ambientes. No obstante, la evolución de la ganancia genética no es comparable con la de los competidores en producción y exportación, como Estados Unidos y Brasil. El rol del estado es fundamental para que esto se revierta.
Ingeniero agrónomo (MSci) Martín A. Principiano. MP (CIAFBA): 1110, MN (CPIA): 18105
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