Medio del Campo
IMPACTO DE LA SEQUÍA

Este año cosechará menos maíz y soja

Calculan que el 55% del maíz temprano está “regular” y el 25% en “mal estado”, en la zona núcleo agropecuaria.

La sequía causa estragos en los cultivos sembrados en la zona núcleo, estimándose una caída sustancial en los rindes de maíz y soja, de acuerdo con las proyecciones realizadas por los especialistas.

Desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) se sigue observando una situación crítica en las tierras cosechadas por las inclemencias del tiempo, sobre todo por la recurrente falta de lluvias. 

Según el último informe, e las 200.000 hectáreas de maíz temprano sembradas en región núcleo, el 55% está en condición “regular” y el 25% en “mal estado”. Solo se conservan en buenas condiciones un 20% de los cuadros. Además, en una semana, los cuadros regulares y malos han aumentado un 24% y los buenos han descendido un 21%.

“Estamos como en cuartos de final: si no llueve, se van. El cultivo se juega la última ficha con estas lluvias que se pronostican. Si se atrasan, se cocinan. Ya estamos pensando en un 50% de merma del rinde”, cuentan expertos. 

En ese sentido, explicaron que hay mucha preocupación, porque además el cultivo está entrando en la fase de crecimiento rápido y falta poco para la floración. “Llegar al 20 de diciembre con 20 a 30 milímetros es casi como tener firmados el certificado de defunción”, afirmaron.

En Cañada de Gómez, los técnicos sostienen: “Los maíces, tanto los de septiembre como los de octubre, están en situación crítica. De día muestran mucho estrés, están encartuchados. Por la noche tiende a revertirse un poco la situación, pero están todos en mal estado. Tiene que llegar la lluvia del fin de semana sí o sí”.

En Corral de Bustos, expresaron con preocupación que no hay pronosticadas lluvias importantes. “Con 15 mm, hacemos poco y nada. Si bien los maíces están muy estresados, todavía se mantienen, pero la situación es un desastre. Hacía mucho no se veía algo así.

En Venado Tuerto y alrededores, los maíces continúan mostrando grandes síntomas de estrés a pesar de los 15 a 40 mm que recibieron en la última lluvia. Donde sí están mejor es en el noroeste de Buenos Aires, en Piedritas, donde los maíces han mostrado una recuperación tras los 45 a 60 mm registrados la última semana. Por otro lado, hay 325.000 hectáreas de maíz tardío, y hasta algunas de maíz de segunda, que se han implantado en toda la región.

Se avanzó donde las últimas lluvias dejaron algunos milímetros. En el suroeste bonaerense reportan un 50% de avance, en Venado Tuerto 20%, en Rojas 55%. Pero en el resto de la región la siembra se generalizaría recién a mediados de diciembre, siempre y cuando llueva.

Asimismo, los asesores comentan que con el maíz tardío están más holgados con la fecha de siembra que con la soja, por lo que están evaluando la posibilidad de incorporar más hectareaje.

“Aún falta bastante de sembrar de soja de segunda y cada día que de atraso perdemos potencial de rinde. Por lo que nuestro limite es el 15 o 20 de diciembre. Hasta allí esperaremos una lluvia para recuperar humedad. Pasada esa fecha, los lotes se destinarán a maíz tardío”, señalaron.

En la última semana, se sumaron 100.000 hectáreas a la condición mala y otras 200.000 a la regular en la región núcleo. En total son 300.000 hectáreas malas y 1,43 millones de hectáreas regulares en soja de primera en esas condiciones (8% y 35% respectivamente).

El 51% se la considera como buena y solo un 6% como muy buena. En Venado Tuerto, por el estrés hídrico y térmico se observa “estrangulamiento” de la base del tallo en plántulas, situación que hace mucho no se veía en la zona. En Cañada de Gómez, lo que se sembró sobre cultivo de servicio o campo laboreado es lo que está más grave.