Afuera, en la calle, el calor del mediodía es agobiante. Luciano Dragi recibe a Diarionucleo.com en su local comercial con la mejor predisposición. Rodeados de objetos deportivos, como no podía ser de otra manera, el destaco atleta pergaminense se prestó una charla amena donde repasó sus inicios, la actualidad de la disciplina, el futuro y el próximo compromiso: La Maratón de Sevilla.
Luciano, vamos desde tus inicios. ¿Cómo comenzaste en el ´mundo del atletismo´?
LD: “Arranco en el atletismo con Roberto Vital, hace muchos años, en el año 2002…2003 en los Torneos Bonaerenses, en ese momento era posta 4 por 100, lo que hoy es relevo, eso de adolescente; de joven dejo el atletismo, me dedico más al fútbol. Pasó el tiempo, y en el año 2015 me encuentro en Rosario con un grupo de entrenamiento: Atenas. Yo no sabía lo que era, hoy son uno de los grupos más numerosos e importantes del país, con un entrenador muy groso como lo es Cristian Crobat, a nivel nacional, y yo te diría sudamericano. Empiezo a correr como atleta aficionado porque no tenía nada que hacer en Rosario, trabajaba, iba al gimnasio, me aburría, y un día me invitan a correr una carrera los chicos de Atenas...Fui, me acuerdo, era la famosa “Canal 5 de Rosario”, tenía no tenía 10 kilómetros, pero anduve muy bien, con tiempo que voy a decir para un atleta amateur y que recién arranca, vestido de futbolista todavía, muy bueno. Ahí fue como que hice un clic y empecé a ir en busca de más en los entrenamientos, siempre quería agarrar al de adelante, fui mejorando. Me vuelvo para Pergamino por cuestiones laborales, en el 2016-2017, me vengo a entrenar con Hernán (García), que en ese momento era el único que por ahí me podía dar una mano, así que estuve un año y tres meses con Hernán, un gran entrenador y un gran atleta, ya todos sabemos lo que es. Decidí dar el salto, nuevamente, a Atenas, que era mi grupo de inicio, del 2018 hasta el 2020, en donde ya entrenaba con atletas federados; ya la mejora era notoria, obviamente al futbolista se le hace un poco más fácil porque tiene la base de fuerza, le pasa, por lo general, a todos los futbolistas. En 2020, entrenando a distancia, poco motivado, aparte la pandemia, decido dar un cambio de rumbo, hablo con los chicos de Atenas, y acá en Pergamino tenía la opción de ´Pato´ Foster, yo lo conocía del grupo de Hernán, habíamos compartido grupo, y él iniciaba con su grupo: Matías Sueta, Leo De Luca y Martín Feramonti, eran cuatro amigos corriendo y decidieron formar un grupo. Nos sentamos, charlamos, planificamos, objetivizamos a futuro, a largo plazo, y hoy me encuentro siendo lo que soy, un atleta ya más maduro, más formado con más de 80 carreras de calle, y siempre tratando de dejar el atletismo de Pergamino lo más alto posible, dentro de mis realidades. Yo hasta hace cinco meses fui un empleado en relación de dependencia y me costaba entrenar, sumar mucho, más que yo era vendedor viajante, es complicado bajarse la ruta a entrenar. Hace cinco meses que me encuentro dentro del proyecto de ´Pato´, del año 2020 para acá, con más tiempo para entrenar, con un emprendimiento propio que me permite, me da los tiempos para sumar volumen. Ya con Patricio tengo cuatro maratones en el lomo, y un quinto que será ahora el 18 de febrero en Sevilla”.
Antes de meternos en “La Maratón de Sevilla”, contame cómo es la preparación de un atleta. ¿Cuánto tiene de componente de mental, de físico, de nutricional, de psicológico?, ¿es un poco de todo, un combo?
LD: “Un atleta, obviamente, tiene que tener o tiene que haber generado buenos hábitos de alimento, buena conducta y mucha disciplina. Conducta en el sentido de que tiene que privar de cosas que vos sabes que no son compatibles: tema alcohol, tema salidas, porque después te repercute. Yo soy una persona que genera hábitos enseguida, no me cuesta, si tengo que levantarme temprano lo hago, siempre con las mismas ganas de todos los días. Si hay algo que no perdí nunca fue la motivación. Me encanta entrenar, no soy de esos que le cuesta, así que tiene que tener hábitos alimenticios, buen descanso, como te dije disciplina, conducta, obviamente asesorarse con un nutricionista, visitar un deportólogo, ir cada tanto al masajista, detectar si sabes que hay algo que te está molestando detectarlo para prevenir una lesión; hay que tener muchos cuidados. Mi día a día es: arranco el lunes entrenando a la mañana, suave, tranquilo, después trabajo, descanso un ratito antes del entrenamiento de la tarde, y así todos los días, con días de doble turno de pedetrismo y días de doble turno de gimnasio a la mañana, y por la tarde de pedetrismo, descansamos un día por semana, que son los domingos, que lo consideramos para la familia, y para uno mismo también porque no podemos estar sometiendo el cuerpo en todo momento los 7 días de la semana porque llega un momento que el riesgo es bastante alto para lesiones, sobre entrenamiento, fatiga. Si bien hay algunos domingos que, por ahí, vamos a necesitar sumar un trote fácil, más que nada para sumar volumen, pero sí, el deportista, en el caso mío maratón, necesita de buenos hábitos alimenticios, descanso y entrenar. Los entrenamientos los considero un 70 a 30 por ciento físicos y el resto mental, la competencia es al revés: 70 a 80 por ciento mental y el resto físico; está comprobado, no es que lo diga yo, lo dicen los grandes maestros del atletismo, los grandes maratonistas de la World Elite. Vos en los entrenamiento podes pulir cosas, podes tener días mentalmente más fuerte o menos fuerte que otros, pero en la competencia necesitas que tu mente, tu cuerpo, esté conectado al cien por ciento. Eso es lo bueno de correr, de ser maratonista, generar hábitos y cuidados”.
¿Quién o quiénes son tus referentes, a nivel internacional, nacional o local?
LD: “Admiro a mucha gente. Siempre digo que respeto a todos, al que corre lento, al que corre fuerte, a veces admiro más al que corre más lento porque le cuesta, por ahí, horrores, y el tipo o la tipa llega y le mete un corazón bárbaro. Si tengo que hablar de profesionalismo, sin lugar a dudas Eliud Kipchoge, el que en keniata le acaban de sacarle el récord del mundo, quizá Bekele, a nivel nacional Julián Molina, que es un amigo también, y tuvimos la suerte de tenerlo bastante seguido en Pergamino. Yo creo que el coraje, la actitud que tiene Juli no lo tiene otro atleta en el país. Obviamente Joaquín Arbe, actual récordman de maratón a nivel nacional, y Antonio Sirio. Creo que esos tres atletas, junto con Florencia Borelli, que vienen teniendo unas actuaciones tremendas, son las personas que por ahí más estoy pendiente, porque son súper profesionales, porque atrás de cada uno de ellos hay una historia de vida diferente, y nos han representado siempre de la mejor manera. Y a nivel local admiro, tengo referentes como Diego Recouso, ´Pato´ Foster, Hernán García, han dejado el atletismo siempre lo más alto posible”.
¿Por qué pensas que tanta gente se volcó a esta disciplina?, ¿Es moda o llegó para quedarse?
LD: “El atletismo viene de siempre. Se ha hecho a mayor escala, a menor escala, pero es como que la pandemia lo rebrotó. Más que atletismo, la actividad física, el famoso running, potenció todo. La gente al estar encerrada en su casa se ha volcado al running, al caminar, al fitness, al armarse en su gimnasio en su casa. Creo que eso fue lo que potenció a que la gente haga actividad física. Antes éramos pocos los que andábamos corriendo y nos decían: ´sos loco, con esos pataloncitos´ (risas). Y si te vas más atrás, tipos que tienen más experiencia, como Hugo Recouso, como Diego, como Pato, como Ramiro Cabrera, que vienen desde antes, más locos todavía. Después vinimos todos nosotros, yo no me considero un longevo en el atletismo, sino que me considero una persona que llegó en el 2015, 2016, se incursionó en esto y le mete mucha garra, después el tiempo, la historia dirá quién fue o quién es Lucho Dragi. Pero hoy no me considero un experimentado”.
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Bueno, pero te ganaste tu nombre dentro del ambiente por mérito propio. ¿Qué te paso con los premios, con los galardones?
LD: “Lo respeto, pero no me gusta hablar de logros. Yo sé que las personas lo hacen con mucho corazón, mucho pulmón, porque hay todo un laburo detrás. Eso lo admiro y lo respeto, pero yo no me guío por los logros, ni por las medallas, ni por los trofeos. Yo me paro en la línea alargada y lo único que pienso es dejar a Pergamino lo más arriba posible, más allá de cualquier tipo de resultado, o medalla, o trofeo que después me den, o lo que sea. Trato siempre de dejar algo, un valor, un mensaje. De hecho, me escribe la gente por Instagram que soy un ejemplo, que me sigue, que me mira, que esto, que lo otro, que no baje los brazos. Y eso es lo que realmente lo considero un logro, porque los trofeos, las medallas van a un cajón, capaz que se llenan de tierra. El logro más importante para mí es dejar un mensaje de valor, de factor humano. Yo con eso ya me quedo tranquilo. No me gusta hablar de lo que gané, si salí segundo, no, eso lo dejo a criterio cada uno”.
Nos metemos, si queres, en lo que se viene, en la Maratón de Sevilla. Solo tres argentinos, por lo que me decis, y solo un pergaminense.
LD: “La Maratón de Sevilla surge a raíz del Maratón de Rosario de este año (2023), que hice una linda prueba, hice una gran prueba, pero me quedó la sensación de que podía más. Venía de equivocarme en el tercer Maratón en Buenos Aires el año anterior, en el 2022. Creo que fue mi mejor preparación, pero me equivoqué mucho técnicamente, me sirvió de experiencia para no hacerlo en Rosario. Esa sensación de querer más, de tener ganas de más, me surgió la iniciativa de decir: ´si no es ahora, cuándo´. Venía de buenos años. Lo hablo con mi equipo, todo parecía como que era una ilusión. Entonces hice una rifa, sorteamos un cronómetro, hicimos mil números, vendimos bien. A raíz de eso pudimos cubrir una parte de los aéreos, más alguna ayuda del Municipio, un apoyo de alguna empresa privada, y así se fue armando todo. Sevilla está considerada una de las pruebas más importantes, es el maratón más plano de Europa, así la venden en su sitio web. Hace dos meses se ocuparon las 12.000 plazas, y lo más lindo de todo esto es que va a estar toda la World Elite, los mejores atletas del mundo, porque es la última chance que tienen de clasificar a los Juegos Olímpicos, en la disciplina de maratón. Tengo la suerte de largar en los cajones de adelante, así que los voy a tener ahí, aunque sea para hacer un metro con ellos. Todo esto que pareció una ilusión se hizo realidad. La prueba es el 18 de febrero, ocho y media de la mañana, hora española, o sea, que acá van a tener que estar a las cuatro y media de la mañana expectantes…Se van a tener que levantar tempranito (risas”).
¿Viajas con un equipo, cómo emprendés este compromiso internacional?
LD: “En principio se me ha hablado de ir con ´Pato´ (Foster) pero tiene compromisos; así que viajo con Agustina, que es mi señora, y a su vez es mi asistente, es la que me acompaña en los fondos largos, y es mi nutricionista. No solo eso, sino que es un apoyo extra para mi día a día, para mi motivación”.
Para ir cerrando. ¿Qué significa para vos el atletismo?
LD: “El atletismo para mi es un estilo de vida, es algo que lo hago pura y netamente por pasión, y con las mismas ganas de siempre, me levanto todos los días motivado para entrenar. El atletismo hoy es mi vida, todo se basa en mi alrededor del atletismo, no es solo una actividad física o hacer una pasada tanto tiempo, un fondo de tantos kilómetros, sino que es mi estilo de vida, es mi esencia, es lo que hoy soy, y es a lo que me dedico y lo hago con tanta pasión”
No te estoy jubilando…Pero cómo te ves en dentro del atletismo dentro de unos años: ¿enseñando?, ¿formando grupos?
LD: “Tengo 36 años, y en algún momento el rendimiento empieza a mermar, por una cuestión fisiológica, y hay que ser realista, siempre con los pies sobre la tierra. Yo me he estado capacitando a lo largo de estos años, de echo soy preparador físico, el año pasado, en 2023, me perfeccioné como entrenador de atletismo internacional, de nivel 1 de la World Athletic, porque a mi me gusta la parte formativa. Pretendo en unos años, o en algún proyecto próximo, ser parte del atletismo formativo, del mini atletismo, por los valores, por los principios. a mi no me gusta…no me veo entrenando gente, no por nada en particular, sino que a mi me gusta los valores, los principios, dejar algo en lo formativo; y cuando te digo mini atletismo te hablo de todas las pruebas de desarrollo: salto, lanzamiento, velocidad, eso, me veo haciendo eso, estando con los nenes del mini atletismo, que va de los 6 a los 12 años, formando, y después que pasen a la siguiente etapa con el entrenador que le toque, ya formado, con mucho énfasis, para después forjar grandes atletas, que creo que es lo que le está faltando ahí a Pergamino, ese primer paso formativo para dar el boom. Así que me veo estando ahí en la parte formativa, esperemos algún día. Por último, quiero agradecerle a todos los sponsors, a la gente de Pardo, a todos los sponsors que son varios, por eso no los nombro. Agradezco al intendente Javier Martínez, el área de deporte de la ciudad, con Maximiliano Greganti a la cabeza, principalmente a mi familia, porque son el sostén, y a la gente de Pergamino y la zona, que me ha dado una mano enorme para que yo pueda al menos estar en la línea de largada en Sevilla, después la carrera es circunstancial. Estoy preparado para lo que me toca, somos conscientes de lo que vamos a buscar, no vamos a hacer locuras, porque la expectativa es bastante amplia. De menos a más, ya estar ahí, después yo sé que la voy a pelear. La maratón es una carrera distinta, no son 10K, no son 21, no son 15, no son 8. Es la prueba que le cuesta a un montón de personas. Vos podes andar bien en 10, podes ser un animal, pero cuando te toca correr un maratón creeme que es otra cosa”.
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