El plantel trabajó con la mente puesta en el encuentro de mañana ante Sportivo Las Parejas (15:30 horas por la fecha 19 con el arbitraje de Jonathan Correa).
Douglas viene de conseguir una victoria, trabajada, por 3 a 1 ante El Linqueño, el miércoles pasado en el Miguel Morales. El equipo pergaminense llegó a su quinto triunfo en fila y mantiene el liderazgo de su zona.
El entrenador rojinegro, Gustavo Raggio, analizó el último y realizó un balance del presente de su equipo: “De inicio mismo fuimos a protagonizar el partido. Siempre tratamos de hacernos eje del monopolio de la pelota. A nosotros El linqueño, que está en una posición mentirosa, por el caudal de juego que tiene, allá nos hicieron renegar un montón. Cambiamos el sistema de juego en la mitad de la cancha, el equipo fue sólido, nunca perdió la ambición de atacar, generamos una muy buena cantidad de situaciones de gol, tuvimos un infortunio en la jugada de gol de ellos, nos repusimos y entramos en el segundo tiempo a adueñarnos del partido. La verdad me pone muy contento por las formas que este equipo, que los jugadores desarrollan en la cancha”, sostuvo.
“Estamos tranquilos, contentos, por el momento. No es habitual cosechar tantas alegrías. Nosotros nos ilusionamos, porque los jugadores entendieron cuál es el mensaje: el equipo y el grupo está por sobre todas las cosas, parece una frase gastada en el futbol, pero es una realidad que se puede afirmar”, se explayó el entrenador.
Acerca del presente futbolístico, Raggio indicó: “Nosotros decidimos quién juga, el de afuera apoya, el que entra juega con la piel. Tenemos que seguir transitando este camino. El día que no nos embarremos, futbolísticamente, que el equipo deje de correr, deje de presionar, deje de tener compañerismo, que son todos valores que hoy los tienen, el sueño se va a empezar a apagar. Está en la capacidad nuestra y en la inteligencia de un equipo que sabe perfectamente lo que quiere. Después en el fútbol te pueden ganar, empatar, podes jugar mal, pero el equipo fecha a fecha va creciendo en identidad. Es un grupo sano. Cualquiera puede estar capacitado para jugar. El secreto es: muchísima humildad, saber bien lo que pretendemos, hacia dónde vamos. El mensaje que se baja no tiene misterio. El tema es entrenador todos los días a la mejor expresión haciendo cada uno lo que le toca en su lugar”, cerró.
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