Uno a uno van llegando los jugadores de Pergamino Básquet al entrenamiento, en el Ricardo “Dorado” Merlo del Club Juventud.
En la “mesa de control”, con computadora y mate en mano, para apaciguar el frío de la mañana, Laura Cors y Federico Díaz (entrenadora y ayudante, respectivamente), dialogan, diagraman y delinean, quizás, el entrenamiento de la jornada.
(Al momento de la nota la bahiense hacia unas horas que había llegado a Pergamino). Con un gesto sereno y amable, antes de comenzar el trabajo, Cors se toma un tiempo para dialogar con Diarionucleo.com
¿Cómo se dio tu llegada al Pergamino Básquet?
LC: “La llegada se dio de la manera natural, que somos contratados todos los entrenadores; o sea, un llamado de mi representante, donde me dijo que la gente de Pergamino estaba interesada. Después empezamos ya a hablar detalles como para lograr el acercamiento. De manera natural se dio todo, sinceramente”.
¿Conocías el proyecto?
LC: “Sabía algo por Ricardo Bojanich, que me había comentado qué era Pergamino Básquet. Y la verdad es algo muy pro, es algo que siempre lo destaco. No existe en otra ciudad de la Argentina. Cuando uno, a priori, empieza a saber algo del lugar donde vas a ir a trabajar, ya viéndolo acá, y viendo a todos los dirigentes que tienen una camiseta distinta, verlos trabajar por un proyecto en común, realmente es algo muy superador”.
Laura, los dirigentes de Pergamino Básquet, una y otra vez, hacen hincapié en el proyecto, más allá de los resultados en la tabla de posiciones. En una nota que diste en un medio nacional, en su momento, vos decías algo similar de Bahía Básquet. ¿Esa particularidad te tentó en aceptar el cargo aquí?
LC: “Sí. Eso, primero, me sorprendió. Que un dirigente te diga: la verdad es que nos gusta ganar como a todos, a mí no me gusta perder a nada, pero nosotros queremos hacer un proyecto, y queremos que el proyecto esté por encima de cualquier resultado. Eso lo había escuchado, en el lugar donde estuve trabajando con varones, que fue Bahía Básquet, dicho por ´Pepe´ Sánchez, ´Generación Dorada´, y todo lo que implica su figura y todo su hacer; y volver a escuchar eso de un grupo de dirigentes fue algo que dije: por fin, hay otras personas que se animan a esto, porque hay que animarse a decir, tratemos de desarrollar, tratemos de que mejore el básquet de la ciudad y pongamos el proyecto por encima de los resultados. Así que realmente yo quiero ir ahí, a ese lugar”.
Dentro de la dirección técnica, ¿a quién o a quiénes tomas como referentes?
LC: “Hay muchos entrenadores que me gustan; en mis comienzos, realmente, me han dejado mucho Hernán Amaya y Leonardo Costa, que actualmente es fuente de consulta. Si uno mira a los referentes a nivel nacional…me gusta el carisma de la (Sergio) ´Oveja´ Hernández, me gustan los contenidos que tiene Silvio Santander. Seguramente debe haber muchos otros entrenadores, porque el entrenador argentino, realmente, es un entrenador que se capacita; es un entrenador que todo el tiempo está con lo último y tratando de innovar. Tengo una gran admiración por el colectivo de entrenadores que tiene la República Argentina”.
Te tocaba en Bahía Weber entrenar, específicamente, en un momento, la parte defensiva. ¿Qué Pergaminos Básquet vamos a ver?
LC: “Cuando yo llego (Bahía Básquet) y entro en el cuerpo técnico, había una idea de hacer un cuerpo técnico horizontal, donde yo me encargaba, como vos bien lo decís, en la parte defensiva, después eso fue mutando, y ya cuando pasamos a Liga Argentina tomé la dirección general del equipo, no el lado defensivo-ofensivo, se cambió ese modo, ese método. El entrenador tiene que estar en la dirección técnica de todo el juego. El Pergamino que vamos a ver hoy va a ser un Pergamino que tiene la aspiración de competir la mayor cantidad del tiempo posible dentro del juego; un equipo que no tengo dudas en los primeros partidos no va a brillar, pero que, seguramente, con el correr de los partidos va a ser un equipo que juegue mucho por concepto, que es lo más difícil, es el camino más largo, y que en la defensa vaya creciendo de manera táctica, sobre todo. Como todo entrenador, me gusta que la defensa sea muy agresiva, es lo que vamos a apuntar, una defensa donde tratemos de neutralizar la parte fuerte del rival y a partir de ahí lo que nos vaya dando, primero, el personal que tenemos, que es un equipo que si bien tiene muchos jugadores de Pergamino, es un equipo nuevo, que se está conociendo, que vamos a ver para qué estamos. Yo siempre digo que una vez que empezamos a andar uno empieza a saber para qué está. Hay que estar tranquilos y a trabajar mucho. Le vamos a poner mucho”.
Pergamino Básquet también te trae para hacer un trabajo con los juniors. Si bien hace muy poquito que estás en la ciudad. ¿Pudiste ver algo de la liga local?
LC: “Estoy sacando la ropa de la valija (risas). De a poco vamos a ir armando algo que todavía le tenemos que poner nombre y apellido, por decirlo de alguna manera. La idea es esa. Ya creo que se está marcando un poco qué es lo que se quiere hacer desde ese proyecto que mencionábamos antes. Hoy tenemos acá a Segundo Galán como ese ejemplo, que es un chico muy chico…Viste que muchas veces se dice ´es mejor el hacer que el decir´. Acá está bien claro que el hacer es ese, y la idea es que salgan más Segundo Galán para formar el día de mañana el equipo de Pergamino. Después faltan los jugadores altos, que siempre faltan en el mundo. Pero por qué no hacer algo interesante con los chicos altos de la ciudad también, como para empezar a desarrollarlos”.
Como puede ser el caso de Franco Villegas
LC: “Claro. Franco tiene un potencial tremendo, es un chico que quiere, están acá por algo. No hay dudas que esto es el trabajo de todos los días, golpear la piedra todos los días”.
Te habrán dicho en muchas entrevistas lo que, indefectiblemente, te voy a decir, también: No podía ser menos que una bahiense la primera mujer en integrar un cuerpo técnico en la Liga, etc. Completalo vos como quieras…
LC: (Risas). Soy bahiense, con un orgullo bárbaro. Para que te des una idea: en un barrio muy humilde de Bahía Blanca, que es el barrio Comahue, nosotros marcábamos con tiza en la pared el aro, marcado con tiza, y tratábamos de hacer puntería al círculo rojo para encestar (se emociona). Imaginate esa cuna del básquet donde hay aros por todos lados, donde tuve la suerte de construirme mi casita, y le puse un aro, porque me parece que es muy significativo. Es un lugar que marcó una historia muy fuerte en nuestro país, porque nada más y nada menos tres generaciones doradas hay ahí. También han salido muchos árbitros, entrenadores… Tal vez fue casualidad o fue un momento en la historia y le pasa la posta a alguna otra ciudad, pero la verdad es que me da mucho orgullo ser bahiense. Y ser la primera…podría haber sido otra, yo no me fijo en esas cosas. Le quiero decir a la gente de Pergamino que vamos a trabajar mucho y que acompañen al equipo”.
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