Un incendio en una fábrica de baterías en Corea del Sur dejó 22 muertos
Se originó tras la explosión de una serie de pilas en el interior de un almacén con unas 35.000 unidades.
Un incendio declarado el lunes en una fábrica de baterías de litio en Corea del Sur causó la muerte de al menos 22 personas, la mayoría de ellas chinas, y dejó ocho heridos.
El incendio, que ya ha sido extinguido en su mayor parte, se produjo sobre las 10.30 (hora local) en una planta del fabricante de baterías Aricell en Hwaseong, al sur de la capital, Seúl. El incendio se originó tras la explosión de una serie de pilas en el interior de un almacén con unas 35.000 unidades, informó Kim Jin-young, funcionario local de bomberos. No está claro qué desencadenó la explosión.
“Veinte extranjeros figuran entre los fallecidos, 18 de ellos chinos, uno de Laos y una persona de nacionalidad desconocida”, declaró a la prensa un miembro de los bomberos, Kim Jin-young, que advirtió que la identificación de las víctimas era difícil debido a las quemaduras.
En las últimas décadas, muchas personas de China, incluidas algunas de etnia coreana, han emigrado a Corea del Sur en busca de empleo. Como otros migrantes extranjeros de naciones del sudeste asiático, a menudo terminan en fábricas o puestos físicamente exigentes o mal pagados que rechazan los surcoreanos más acomodados.
Más de 100 personas trabajaban en la fábrica cuando se escucharon una serie de explosiones en la segunda planta, donde se inspecciona y empaquetan las baterías de litio, agregó la misma fuente. Tras haber conseguido controlar el gigantesco incendio, los bomberos se introdujeron en el edificio carbonizado para extraer los cuerpos.
“La mayoría de los cuerpos está muy quemados así que llevara tiempo identificarlos”, dijo Kim.
Los bomberos están buscando una persona que sigue desaparecida, agregó, mientras realizan “operaciones de enfriamiento para evitar que el fuego se extienda a otras fábricas cercanas”. El incendio tuvo lugar en Hwaseong, al sur de la capital, Seúl, en una fábrica que pertenece al fabricante surcoreano Aricell, especializado en baterías. Altamente inflamables, unas 35.000 baterías de litio estarían almacenadas en la segunda planta de la fábrica cuando se declaró el incendio.