“Deben retirar esos paneles solares a la brevedad o lo vamos a hacer nosotros”, advirtió Gabriel Boric a la Argentina este lunes a la mañana. Y además, con un tono inusualmente amenazante, subrayó que se lo dijo a Javier Milei, quien habría sido receptivo, según reconoció luego el mandatario chileno.
Boric hizo unas breves declaraciones a los periodistas chilenos que lo acompañan en su visita a Emmanuel Macron, en Francia cuando le preguntaron por la insólita nueva escalada bilateral: la Armada Argentina colocó en territorio chileno unas instalaciones para nutrir de energía un destacamento que tiene en el extremo sur de Tierra del Fuego.
Luego de la escalada diplomática, este lunes el embajador argentino en Chile, Jorge Faurie, le informó este lunes al gobierno de Boric que la Armada Argentina envía 11 efectivos (entre ellos técnicos) a correr los paneles de la polémica. Así lo ordenó el ministro Luis Petri, que está de viaje en Europa (estuvo en Bélgica, Italia, en Suiza con Milei y ahora en Francia).
Los 11 militares de la Armada que van a la zona son los que están apostados en Río Grande. Pero a su vez, la empresa Total Energy, que donó las instalaciones, manda dos empleados a ayudarlos y la empresa Auster subcontratada por Total para instalarlos enviará otras tres personas. En total son 16. Un comunicado de la Armada dijo este lunes que las tareas ya estaban por ejecutarse.
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