Rusia amenazó a Ucrania con tomar represalias
Los drones lanzados por Kiev, que no causaron víctimas, fueron calificados como “métodos terroristas” por el Kremlin.
Rusia indicó que se reserva el derecho de tomar “severas represalias” tras los ataques con drones atribuidos a Ucrania contra la ciudad de Moscú y la península anexada de Crimea, comunicó la diplomacia rusa.
“Valoramos lo acontecido como un nuevo empleo de métodos terroristas por la jefatura político-militar de Ucrania e intimidación de la población civil”, denunció en una declaración el Ministerio de Exteriores de Rusia, pese a que las tropas rusas han venido utilizando esos dispositivos desde hace meses y que el ataque ucraniano no causó víctimas, mientras que el ataque en Crimea fue contra un depósito de municiones.
Todo ello un día después de que Rusia sea acusada de un crimen de guerra por la destrucción de la catedral de Odesa. La cancillería rusa dijo que, ante la nueva ofensiva ucraniana, Rusia “se reserva el derecho de adoptar drásticas medidas de respuesta” y condenó este “nuevo crimen del régimen de Kiev”, llamando a las organizaciones internacionales a “darle a éste la valoración que se merece”.
“Detrás de la descaradas acciones de los neonazis ucranianos se encuentra el propósito de Occidente de agravar la situación”, indicó Exteriores, que resaltó que “todos los culpables serán hallados y castigados”.
Según dijo a AFP una fuente ucraniana de Defensa, que pidió el anonimato, el ataque contra Moscú fue “una operación especial del GUR”, los servicios de inteligencia militar ucraniano.
La declaración rusa subraya que Ucrania no solo asumió las responsabilidad por estos ataques, sino que amenazó con que continuarán y aumentarán en número. El Ministerio ruso de Defensa aseguró antes haber frustrado “un intento del régimen de Kiev de perpetrar un ataque terrorista con dos aparatos aéreos no tripulados contra instalaciones en el territorio de Moscú”.
No obstante, el alcalde de la capital, Serguéi Sobianin, informó de que los drones impactaron en dos edificios no residenciales de Moscú, uno de ellos cerca del Ministerio de Defensa.
Ayer Ucrania atacó también un depósito de municiones en la región de Dzhankói, en el norte de la anexionada península ucraniana de Crimea, aunque se derribaron 11 drones, según las autoridades locales impuestas por el Kremlin.
Por razones de seguridad, se suspendió temporalmente el tráfico ferroviario en Dzhankói y la carretera entre Dzhankói y Simferópol, indicó el gobernador, que ordenó la evacuación de las aldeas situadas a 5 kilómetros a la redonda del depósito atacado.
Ataque ruso
En tanto, un ataque ruso con drones sobre la infraestructura portuaria de la región ucraniana de Odesa destruyó un hangar de almacenamiento de granos, informaron las fuerzas militares de Ucrania ayer.
Un ataque con drone “fue dirigido contra la infraestructura portuaria del Danubio (...) como resultado de los ataques, un hangar de granos fue destruido y otros depósitos fueron dañados”, dijo el comando militar sureste de Ucrania vía Telegram.
“Tres drones fueron destruidos por las fuerzas de defensa antiaérea”, añadió el mando operativo, según el cual “el enemigo sigue aterrorizando Odesa”. Según los primeros informes, al menos seis trabajadores portuarios resultaron heridos.
Odesa, cuyo centro histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco a principios de año, fue objeto el sábado de un ataque que causó dos muertos y 22 heridos, entre ellos al menos cuatro niños, según las autoridades ucranianas.