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SEGÚN UNA INVESTIGACIÓN

Boris Johnson mintió acerca del “partygate” al Parlamento

“No existe ningún precedente de un primer ministro que haya engañado deliberadamente a la Cámara”, afirmó la comisión.

El ex primer ministro británico Boris Johnson “engañó deliberadamente” al poder legislativo sobre el “partygate”, el escándalo por las fiestas en su residencia cuando estaba en el poder durante el confinamiento por el covid-19, según concluyó ayer una comisión parlamentaria. El exdirigente conservador, que está por cumplir 59 años, renunció a su banca como diputado la semana pasada tras ser informado sobre las conclusiones de esta investigación que duró 14 meses sobre las fiestas en Downing Street mientras el resto del país estaba confinado. 

La comisión de siete miembros determinó que Johnson “engañó deliberadamente a la comisión y a la Cámara” y que si no hubiera renunciado a su cargo de diputado el viernes pasado, hubiese sido suspendido por 90 días por “desacato reiterado y por intentar socavar el proceso parlamentario”. “No existe ningún precedente de un primer ministro que haya engañado deliberadamente a la Cámara”, afirmó la comisión. “Engañó a la Cámara en un asunto de la mayor importancia para la Cámara y para el público, y lo hizo reiteradamente”, agregó. 

Con su dimisión, el ex primer ministro conservador evitó una sanción de sus pares de la Cámara de los Comunes. El informe de la comisión será debatido el lunes por el pleno de los diputados, y después será sometido a votación. Entre las recomendaciones, la comisión pide que se vete a Johnson el acceso a la sede del Parlamento, que habitualmente es un privilegio del que gozan de los ex primeros ministros. 

Al informar su dimisión Johnson denunció la existencia de un “montaje político”, pese a que el ente investigador está conformado en su mayoría por miembros de su propio partido. Johnson mantuvo ayer su actitud crítica y calificó la comisión como “antidemocrática”, al tiempo que dijo que tiene como objetivo “ser la estocada final de un prolongado asesinato político”. “La comisión no encontró ni una sola prueba”, afirmó Johnson que en un vehemente comunicado aseguró que su asistencia a las fiestas se trató de una cuestión “legal” requerida por su trabajo.