Las protestas en Perú en reclamo de elecciones anticipadas y el cierre del Congreso causaron en las últimas horas al menos 24 muertes, según cifras oficiales, aunque el número varía si se cuentan fallecidos en accidentes de tránsito vinculados a los bloqueos de rutas y por imposibilidad de traslados a centros de salud.
A su vez, el Congreso de Perú rechazó ayer el proyecto que proponía que las elecciones presidenciales y legislativas se lleven a cabo en diciembre de 2023 y la asunción del mandatario electo se hiciera en abril de 2024.
La ministra de Salud, Rosa Gutiérrez, dijo que son 18 los muertos, pero el sitio del diario La República y la agencia AFP dan cuenta de otras seis víctimas fatales en accidentes relacionados con cortes de rutas.
Al no haber un registro centralizado, los números difieren por las informaciones de provincias y departamentos y por las fuentes que los consignan: policías locales, Defensoría del Pueblo y carteras de salud, entre otras. Hasta acá parece claro que las situaciones más graves se dieron en Ayacucho, donde el jueves hubo ocho muertos en el intento de toma del aeropuerto, y en Apurímac, donde se llevan contabilizados 6 fallecidos.
Los números varían luego en La Libertad, Arequipa y Huancavelica. Las Fuerzas Armadas intervienen en el intento de controlar la seguridad interna tras la declaración, el último miércoles, del estado de emergencia para contener las manifestaciones.
En el aeropuerto de Ayacucho, “al verse rodeados y que la masa se iba acercando, lo que señalan (los reportes) es que habrían dado la orden de ‘alto’ (antes de disparar); primero disparos al aire, pero después han sido disparos al cuerpo”, explicó a la agencia AFP la Defensora del Pueblo, Eliana Revollar. Detalló que los manifestantes portaban hondas y piedras. “Esto amerita una investigación penal; estás personas han fallecido por impacto de bala”, consideró.
El Gobierno regional, en tanto, exigió “el cese inmediato del uso de armas de fuego y represión por parte de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional del Perú”. La Policía Nacional del Perú respondió con un llamado a los habitantes de Ayacucho para “evitar acciones contra el orden democrático”.
En tanto, la presidenta Dina Boluarte trasladó su más sentido pésame a las familias de los fallecidos: “Lloramos el llanto de las madres en Ayacucho y sufrimos el dolor de las familias en todo el país. Hoy, en una triste jornada de violencia, nuevamente lamentamos la muerte de peruanos”.
Las manifestaciones piden, en algunos casos, la libertad del expresidente Pedro Castillo, la renuncia de Boluarte, el cierre del Parlamento y elecciones generales ya. Las protestas más fuertes, con miles de personas marchando en las calles, ocurren en el sur, donde se mantienen cerrados cinco aeropuertos (Andahuaylas, Arequipa, Puno, Cuzco y Ayacucho).
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