El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se desplazó ayer a Izium, una ciudad de valor estratégico en la región de Járkov (en el este del país), en su primera visita a los territorios reconquistados a los rusos gracias a la contraofensiva de este mes. El mandatario, desde el inicio de la invasión rusa, ha abandonado Kiev en contadas ocasiones.
Zelenski participó en la ceremonia de izado de la bandera ucraniana, indicó en Facebook la 25ª brigada aerotransportada, que publicó fotos del mandatario en Izium. “Nuestra bandera azul y amarilla ondea ya sobre Izium”, dijo el presidente ucraniano en su cuenta de Telegram, en un mensaje acompañado de una fotografía suya con militares desplegados en esa ciudad. Y felicitó a soldados que habían tomado parte en la liberación.
En el acto, que comenzó con un minuto de silencio en honor de los militares caídos para retomar la ciudad, también estuvo presente la viceministra de Defensa, Hanna Malyar, así como varios altos representantes de las Fuerzas Armadas de Ucrania. El país anunció haber recuperado el control de varios miles de kilómetros cuadrados en el este y el sur, zonas que los rusos ocupaban desde la invasión lanzada el 24 de febrero, que incluyen unas trescientas localidades. El ejército ruso ha respondido con bombardeos masivos sobre las zonas recuperadas.
Después de una ofensiva relámpago, Ucrania reconquistó en dos semanas la casi totalidad de la región de Járkov, fronteriza con Rusia, en particular las ciudades de Balaklia, Kupiansk e Izium. Estos dos últimas eran centros logísticos clave para las fuerzas rusas que desde entonces se han replegado, según Moscú, a la provincia de Donetsk, una de las dos regiones separatistas de Donbás dirigidas por Rusia en territorio ucraniano.
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