noscript
Tras el femicidio de Úrsula, los botones antipánico en Rojas se incrementaron un 3100%
INFORME ESPECIAL

Tras el femicidio de Úrsula, los botones antipánico en Rojas se incrementaron un 3100%

Previo al 8 de febrero de 2021, fecha en la que murió Bahillo, había 10 botones activos; en la actualidad, hay cerca de 320. Qué cambió después del femicidio que conmocionó al país.

Compartir

Rojas es una ciudad típica del interior del territorio bonaerense con 23 mil habitantes donde reina la tranquilidad. Pero la noche del lunes 8 de febrero de 2021 esa característica se vio alterada tras el femicidio de Úrsula Bahillo (18), en manos del ex policia Matías Ezequiel Martínez, quien fue condenado a prisión perpetua el 14 de diciembre de 2022.

No caben dudas que la muerte de Úrsula marcó un antes y un después en Rojas y el accionar de diferentes actores en materia de prevención dio un giro de 180 grados. Una de las herramientas preventivas son los botones antipánico, que son dispositivos que se utilizan para alertar tempranamente a las autoridades del Estado -especialmente a las fuerzas de seguridad- ante una posible e inminente situación de violencia. Este sistema ya se usaba previo al femicidio pero en la actualidad el protocolo es totalmente diferente.

El camino para que una mujer que es víctima de violencia de género acceda al botón nace en la Comisaría de la Mujer donde se radica la denuncia (también se puede hacer en la Comunal), allí se pone al tanto de la situación al Juzgado de Paz (también lo puede hacer la fiscalía) y es el juez quien toma la decisión si el caso en cuestión requiere de resguardo o no.

De activarse el protocolo, la víctima es monitoreada con el sistema para permanecer protegida del victimario. Hay quienes sostienen que con esta medida es suficiente, otros, piensan lo contrario y creen necesario que los acosadores tengan pulseras de monitoreo.

Un dato revelador

El pasado jueves 8 de junio el Honorable Concejo Deliberante realizó la sexta sesión ordinaria del año, en la cual el bloque Juntos, a través de la concejal María José Ojeda, presentó un proyecto de resolución solicitando al Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires la incorporación con carácter urgente de un móvil policial destinado a la Comisaría de la Mujer y la Familia del Distrito de Rojas. En su exposición, la edil explicó que en la actualidad hay 300 botones antípanico activos.

Inmediatamente surgió la necesidad de saber cuántos había previo al femicidio de Úrsula. Y el número fue, al menos, llamativo. Previo al 8 de febrero de 2021, en el distrito rojense había diez botones activos; hoy, el número ronda los 320 dispositivos en funcionamiento. Para realizar una comparación, en Pergamino, ciudad de 114 mil habitantes, hay 40 mujeres monitoreadas.

Diarionucleo.com habló con Silvana Loso, quien forma parte de la Dirección de Seguridad del Municipio de Rojas y se encarga de coordinar el control de los sistemas activos. Loso contó que desde la Dirección de Seguridad se trabaja de forma conjunta con la Comisaría de la Mujer, Policía Comunal, Policía Rural y el Centro de Monitoreo. Dependiendo dónde se ubica la persona con el botón, dependerá también de qué fuerza entra en acción ante cualquier eventualidad.

La forma de trabajar post el caso Úrsula cambió por completo. Hoy los botones se entregan con mayor fluidez, se recuperaron los que estaban inactivos y se está en contacto permanente con la víctima (también hay hombres con botones antipánico). 

Cambios en la forma de trabajar

Además de lo mencionado, antes los botones eran entregados por efectivos masculinos, algo que incomodaba a las víctimas. Por eso, hoy es una mujer quien se encarga de brindar la asistencia. “Había diez botones en ese momento, también algunos estaban entregados y ya no estaban en uso, es decir que había personas lo seguían teniendo en su poder, pero no lo utilizaban”, contó Loso consultada sobre la cantidad de sistemas activos previo al femicidio.

Sobre el caso Úrsula, la integrante de la Dirección de Seguridad dijo que “no hubo un pedido de botón”, y que “si se hubiera pedido, el municipio lo hubiera entregado”. De todos modos, la forma de trabajar cambió ya que previo al femicidio los botones se entregaban un día después de la denuncia. Hoy es al instante, más aún si se considera un caso peligroso.

Como la Comisaría de la Mujer no cuenta con patrullero, algo que expuso la concejal Ojeda, las rondas periódicas se hacen con personal de la comunal y sus unidades. Por eso es fundamental un trabajo coordinado. “Se trabaja de otra forma, cuando los botones tienen batería baja nosotros lo sabemos gracias al nuevo seguimiento. Eso hace que podamos avisarle a la persona y si no contesta, el móvil debe ir a su domicilio para que ellas se conecten”, explicó.

Silvana Loso admitió que “es un trabajo muy complejo y muy difícil”, porque “hay que estar todo el tiempo en alerta”. “Trabajamos con mucho compromiso y respeto porque las víctimas son personas”, anexó.

Por último, remarcó el compromiso con el que se trabaja desde el Municipio y destacó que “se trabaja a cualquier hora, con mucha pasión y responsabilidad”. “Hay muchas personas que trabajan para cuidar a las mujeres que son víctimas porque si nos equivocamos el precio que se puede pagar el muy alto”, sintetizóo.

Cómo se trabaja en Pergamino

En diálogo con diarionucleo.com, Ignacio Doddi, secretario de Seguridad de Pergamino contó que en el distrito se utilizan dispositivos duales para monitorear a víctimas y victimarios. El programa "Ojos en Alerta" incorporó una función similar al botón antipánico y se trabaja con las víctimas para su implementación. Actualmente, hay aproximadamente 40 chicas adheridas al programa.

Con el sistema dual se monitorean a ambas partes, y, en los casos más graves interviene provincia y fiscalía. En tanto, con Ojos en Alerta se monitorea a cada una de las víctimas con ubicación en tiempo real. De ser necesario, el caso es derivado para que tomen intervención las autoridades correspondientes. “Actualmente hay unas cuarenta chicas que fueron recientemente adheridas al programa”, reveló Doddi.

El caso Úrsula Bahillo

Según pudo reconstruir el tribunal, el día 8 de febrero de 2021, Matías Martínez y Úrsula Bahillo concertaron un encuentro a través de mensajes de texto, el cual se materializó a las 16.30, cuando Martínez pasó a buscar a Úrsula a bordo de su vehículo, por un negocio dedicado a la venta de repuestos de autos de la localidad de Rojas.

Cerca de las 20.30, cuando Bahillo y Martínez emprendían la vuelta a Rojas, “descendieron del auto, y a unos siete u ocho metros de distancia desde el lugar donde se hallaba detenido el vehículo, Martínez empleando una cuchilla con significativo filo, le aplicó una puñalada a Úrsula en la zona del flanco izquierdo”.

“Seguidamente Martínez le causó lesiones en región dorsal y dorso lumbar, así como otras en región de abdomen, las cuales fueron causadas en un período preagónico a consecuencia de importante sangrado que generaron las lesiones mortales, destacando que algunas de las lesiones que Martínez causó a Úrsula, con posterioridad a las mortales, fueron provocadas mientras la víctima yacía agonizando en el suelo”, detallaron los jueces en diciembre pasado.

El femicidio fue descubierto tras un alerta al 911 de un tío del condenado, quien refirió que creía que su sobrino había matado a una joven porque le confesó en un llamado que "se había mandado una cagada".

Prisión perpetua para Martínez

El 14 de diciembre del año pasado Martínez fue condenado a prisión perpetua por el femicidio Bahillo. El policía fue encontrado culpable del "homicidio doblemente agravado por el vínculo, por alevosía y por femicidio", sumando cuatro hechos por violación de las restricciones perimetrales.
La pena impuesta por el tribunal coincidió con lo que habían solicitado en sus respectivos alegatos el fiscal de juicio, Sergio Terrón, y el abogado representante del particular damnificado, Emiliano Basso.

Tras conocerse la sentencia se vivieron momentos de dolor. Patricia Nasutti, madre de Úrsula, gritaba en plena sala de audiencia: "Volá alto hija mía, volá alto hija. Que se pudra en la cárcel". "Gracias Dios por suavizar el alma. Se logró que se haga justicia y que pague con la cárcel por lo que le hizo a mi hija. Volá bien alto chiquita mía", expresaba la mujer llorando a los gritos.

A su vez, el padre de Úrsula agradecía al tribunal, al fiscal Sergio Terrón y a los abogados Emiliano Basso y Fabián González por "el trabajo realizado" tras la lectura del veredicto y criticaba la labor de un juez de Mercedes que le negó, en enero 2021, un pedido de prisión del condenado Martínez, quien había sido acusado de atacar sexualmente a una niña con discapacidad.

En el fallo, los jueces calificaron el caso como “femicidio” ya que demostraron “el contexto de violencia de género (física y psicológica) en el cual se desarrollaba la relación de pareja entre Matías Martínez y Úrsula Bahillo y donde se produjo el lamentable desenlace”.

Los jueces aseguraron en el veredicto que "no existen elementos probatorios que permitan afirmar que el obrar de Matías Martínez constituyó una reacción frente a una agresión ilegítima materializada por Úrsula Bahillo".

Comentarios