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Joaquín Medrán: Treinta años junto a la guitarra
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Joaquín Medrán: Treinta años junto a la guitarra

Comenzó sus estudios junto al legendario Carlos Morán y rápidamente tomó vuelo propio; aunque en un principio soñaba con ser rockero, su formación lo llevó a triunfar con el tango y el folclore, tuvo la oportunidad de tocar con su ídolo Juanjo Domínguez y en la actualidad presentara "Simbiosis", su último trabajo.

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Cuando tenía once años, Joaquín Medrán se compró una guitarra eléctrica: admiraba a Keith Richards y soñaba con tocar las canciones de Rolling Stones. Su madre, cantante de folklore y amante de la música, lo llevó a aprender los secretos del instrumento a la escuela que en ese entonces administraba Carlos Morán; histórico músico de tango y folklore, donde asistía junto con su primo; el también reconocido y talentoso Leandro Pericás. La influencia de su maestro fue tal que al poco tiempo Joaquín se despidió de sus anhelos rockeros y se enamoró del tango y el folklore, para nunca alejarse de esos estilos musicales.

En un par de años, Joaquín se convirtió en un adolescente que iba ganando cada vez más espacio en peñas y festivales locales y regionales. Su trabajo con la guitarra lo llevó a recorrer gran parte del país, a actuar varias veces en CABA y a conocer y compartir escenario con Juanjo Domínguez, que se convirtió en su ídolo y fuente de inspiración.

A los 41, con varios discos editados y casi treinta años de trayectoria, Joaquín atraviesa un momento positivo y presenta su último trabajo: "Simbiosis", cuyo título sintetiza la pasión por la guitarra y por la música.

En la última edición de EN VIVO: DiarioNucleo.com; que se emite los martes a las 19 por la señal de streaming Fana Digital, Joaquín habló de sus inicios, de su crecimiento musical y del auspicioso presente que artaviesa. 

¿A qué edad y cómo empezaste a tocar la guitarra? 

El amor por la música me viene un poco de mi vieja. Ella canta y lo hace muy bien. Y yo empiezo a aprender guitarra con Carlos Morán en el año 95 con Leo Pericás, mi primo y cuando arranco Leo ya hacía más o menos un año que había empezado, pero íbamos juntos a clases; enseguida con Leo se dio esa buena onda de poder empezar a ir juntos y compartir esa hora de clase, en un primer momento con mucho miedo.
Recuerdo que la primera clase que hice con Carlos Morán fui con un miedo terrible porque tenía 11 años y no sabía con lo que me iba a encontrar. Era para mí algo completamente nuevo y ahí empezaba a sentir que eso era lo mío, que estaba en mi lugar.

¿Por qué la guitarra y no otro instrumento?

Mi mamá siempre cuenta que cuando tenía 4 o 5 años me ponía frente al espejo y cantaba las canciones del grupo Tremendo, que era muy famoso en esa época; y que al mismo tiempo hacía una mímica como que tocaba la guitarra. Después cuando crecí un poco quería tocar la guitarra para hacer los temas de los Rolling Stones, porque miraba mucho a Keith Richards. Así me compré una guitarra eléctrica, que nada que ver porque para aprender siempre se arranca con una criolla, así que cuando llegué a la clase el maestro Carlos Morán me dijo "No, pibe, el camino es por acá, vos tenés que aprender con una guitarra criolla" así que empecé a tocar tango y folklore, con Leandro.

Fue entonces que se dieron las primeras presentaciones del dúo Pericás-Medrán.

Así es, pienso que un poco llamaba la atención el hecho de ser tan jóvenes porque yo tenía 12 y 13, y Leo unos 16 y 17, así que lo que resultaba llamativo era que eramos jovencitos y tocábamos tango y folklore. Fueron años de aprender y aprender.

Fuiste desarrollando tu técnica.

Estudié unos seis años con Carlos Morán y siempre seguí tocando la guitarra; hasta que en un momento descubro a Los Nocheros y a Juanjo Domínguez, en ese momento dejé de tocar con púa y empecé con los dedos, o sea, con técnica de yema y uña al mismo tiempo. Eso me abrió un espectro completamente diferente a lo que es técnica de púa, ahí hice un click y desde ese momento nunca más dejé esos estilos musicales. Era la época de mayor auge de Los Nocheros y al mismo tiempo Domínguez se hacía más y más famoso por sus presentaciones en televisión, en distintos programas de mucha audiencia. Así que yo lo miraba y trataba de imitarlo, de sacarle la técnica. 

¿Cuáles fueron y cuales son tus influencias?

Bueno, cuando descubrí a Los Nocheros me sentí identificado con ellos y empecé a "robarles" los primeros tonos, mirando la mano izquierda de cada uno de ellos, les sacaba los punteos y los tonos; eso sumado a la base que yo tenía de Carlos Morán que me enseñó todo lo básico de la guitarra, lo primordial, lo que hay que saber para encarar este instrumento; con esas herramientas que yo tenía, cuando descubrí a Los Nocheros y a Juanjo Domínguez, se abrió ese panorama.
Cuando empecé a seguir a Juanjo Domínguez para mí fue revelador, algo fuera de serie, un tipo que para mí no va a haber otro como él.

Tuviste la suerte de conocerlo y de compartir algunas cosas con él.

Fueron dos o tres veces: la primera fue en 2006, en mi casa. Resulta que hice amistad con su hermano Raúl y en un momento me comentaron que estaban de gira y que iban a pasar por Salto, Pergamino y Colón, y que iban a pasar por casa a visitarme. Se imaginarán mi emoción; no sólo pasaron por mi casa sino que se quedaron a almorzar y después hicimos una guitarreada que es uno de los mejores recuerdos de mi vida. Te digo que una cosa es verlo tocando y otra escucharlo hablar, porque como pasa con todo sabio aprendías mucho al escucharlo: el tipo era un libro abierto en lo que a música se refiere porque todo lo que no escuchabas o no aprendías de él cuando tocaba, lo hacías cuando hablaba y bueno, era un fuera de serie. Lo que sabía Juanjo, yo no sé si otro violero lo ha experimentado lo ha aprendido o lo ha incorporado, lo que el tipo sabía era impresionante.

¿Seguís a algún músico de Pergamino?

Por ahí tengo más interacción con algunos colegas de Junín, Rojas o CABA porque al haber ido tantas veces vas haciendo más amistades. En Pergamino tengo muchas amistades, sobre todo con cantantes como Cora Tulliani, Evelina Rodríguez, Giselle Mc Keon. De CABA te puedo nombrar a  Moscato Luna, que está actualmente tocando con Yamila Cafrune, Carlos Morel, Néstor Roldán o Ana Medrano. Eso eso es lo lindo que tiene la música, poder elegir con quién uno quiere tocar.

Todo esto que contás se sintetiza de alguna manera en tu último disco: "Simbiosis"

Claro, es un trabajo que está disponible en YouTube y la idea es este año hacerlo físico porque me pasó el año pasado que cuando fui a Rojas y a Junín a presentar el disco en formato virtual me pedían el disco físico. "Simbiosis" es un álbum que tiene temas que he tocado desde muy chico, que me enseñó Carlos Morán y la idea fue conservar un poco esos arreglos que él hacía en sus versiones; es un disco en el que me sitúa según mi parecer en el mejor momento con la guitarra, como artista y como persona. Esta simbiosis que se logra, esta amalgama, esta mezcla, esta idea de vuelta que tengo con el instrumento. Siento que estoy en un momento de maduración.

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¿Cómo te encuentra este arranque de 2025?

Bueno, precisamente este mes voy a estar tocando después de nueve años en Mar del Plata una ciudad que yo quiero mucho porque me trae muchos recuerdos: siempre cuento cuando íbamos con mis viejos y eso me trae memorias de tiempos felices, así empieza este año y espero que siga de la misma manera, dándome oportunidades de tocar estas canciones que tanto me gustan y espero compartir todo eso con la gente. 

 

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