Esta mañana se desarrolló la última audiencia del juicio por el asesinato de Fernando de Liguori que tuvo desarrollo durante una semana en el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Pergamino.
Durante las mismas, las partes dieron a conocer sus alegatos de clausura ante los jueces Guillermo Burrone, Carlos Picco y Alejandro Salguero.
El fiscal Horacio Oldani, representante de la acusación, le solicitó al tribunal la pena de reclusión perpetua para Fernando Aita Valiente y Marcelo Barrionuevo por considerarlos responsables de la muerte de Liguori. En su exposición final, Oldani consideró que durante el proceso judicial quedó comprobada la autoría de ambos por los delitos de 'homicidio agravado por criminis causa y alevosía'.
Acerca de los cinco atracos que ambos imputados habrían cometido tras el crimen, Oldani le solicitó al tribunal 22 años de cárcel para Aita Valiente por 'robo agravado por el uso de arma de fuego'. Cabe recordar en este punto que Barrionuevo firmó un juicio abreviado por estos hechos y fue condenado a 15 años de prisión por ser coautor penalmente responsable.
Por su parte, el abogado defensor de Aita, Hugo Oberti, precisó que no discute la materialidad del homicidio pero sí los agravantes, es decir, la alevosía y el criminis causa. Para el abogado, el accionar de su defendido no tuvo los agravantes planteados por la Fiscalía. "Creo que no hay prueba subjetiva específica que justifique el agravante que se le quiere poner", expresó.
Acerca de la responsabilidad de los cinco robos, Oberti sostuvo que los diferentes testigos que declararon durante el juicio no pudieron probar la presencia de Aita Valiente en el lugar de los hechos.
El abogado de la Defensoría oficial y representante de Barrionuevo, Luis Urbano Vidal, afirmó que la información que se generó de las personas que se acercaron hacia el lugar de la muerte de Liguori "fue muy poca a nivel probatorio".
"El agente fiscal siempre dio por hecho que había otra arma y ha hecho esfuerzos denodados durante todo el debate para poner en manos de Barrionuevo un arma".
El abogado indicó que las pruebas exhibidas durante el proceso no probaron la portación de arma de su defendido en el momento de la muerte de Liguori. Vidal se basó en las declaraciones del tercer imputado, Amilcar Leonel Valente, quien era el conductor de la camioneta en la que circulaban Aita y Barrionuevo y que fue condenado a 15 años de prisión tras ser encontrado partícipe secundario del asesinato de Liguori en un juicio abreviado. "Valente dijo en más de una oportunidad que Barrionuevo no llevaba arma", dijo.
También mencionó como prueba la declaración de Aita, quien se hizo responsable de los disparos ante el tribunal. Y, finalmente, se basó en las pruebas de Dermonitrostest que le realizaron a su defendido y que dieron resultado negativo.
La palabra de los imputados
Al finalizar los alegatos de las partes, el juez Burrone le cedió la palabra a los acusados. El primero en hablar fue Aita, quien expresó: "Nuevamente le pido disculpas a la familia de la víctima y vuelvo a repetir que fue un accidente y eso está más que claro por más que el fiscal ponga todo el peso de la ley en mi contra y de los demás acusados".
A continuación, Barrionuevo hizo uso de la palabra por primera vez en el juicio y declaró: "Pido perdón por las cosas que hicimos. Nosotros no quisimos matar a nadie. En lo que sí estoy de acuerdo es en que yo quería robar".
Luego de las palabras de los acusados, el juez Burrone indicó que la sentencia se dará a conocer el próximo lunes 5 de agosto.
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