El proceso de selección y designación de magistrados del Poder Judicial y Ministerio Público se demoró notablemente en los últimos años, lo cual comenzó a generar un cúmulo de vacantes que no fueron cubiertas, generadas por jubilaciones, renuncias y fallecimientos.
Esta situación es una problemática que está a afectando a todo el sistema judicial de la provincia de Buenos Aires y, en base a esto, el gobierno bonaerense promulgó una ley que procura agilizar el proceso de coberturas de vacantes en cargos judiciales en toda la provincia al suspender por dos años la exigencia de una evaluación oral y la doble convocatoria anual a un examen de oposición establecidos por el Consejo de la Magistratura.
Por medio del decreto 123, publicado el pasado 4 de enero en el Boletín Oficial, el gobierno provincial puso en marcha la ley 15.478 sancionada por la Legislatura el 20 de diciembre pasado.
En la ciudad de Pergamino, existen 15 puestos vacantes en los distintos fueros.. En concreto, existen faltante de cinco fiscales, dos cargos de camaristas penales, un cargo de camarista civil, un cargo de juez civil, cargo de Defensor General, dos cargos de defensores, dos cargos en el Tribunal Oral en lo Criminal y el de juez en el Fuero Penal Juvenil.
El fiscal general, Mario Daniel Gómez, le expresó a diarioncleo.com que ""quince cargos vacantes de magistrados para un Departamento Judicial chico como lo es el de Pergamino es muchísimo.
Y agregó: "No se puede trabajar sin lo esencial que son las personas que están al frente de las distintas dependencias. Si bien hay gente que está subrogando, esas personas tienen un doble trabajo porque tienen que atender su propia dependencia y después subrogar en el lugar que está vacante y a la espera de la designación".
En el mismo sentido, el juez del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 1, Guillermo Burrone, habló con diarionucleo.com acerca de cómo afecta al normal funcionamiento de su dependencia la falta de dos jueces.
"Hace dos años que estoy solo al frente del TOC. Esto es un problema terrible porque uno termina haciendo malabares para que le designen los jueces faltantes", expresó.
Burrone explicó que la primera consecuencia que esto genera en el sistema judicial es el retraso en los juicios y en la resolución de causas. "Y el segundo inconveniente que se crea es que aumenta el riesgo de cometer errores debido a que el trabajo de los magistrados se multiplica, las tareas que tienen que hacer tres personas las hace una", explicó el juez.
A la hora de explicar esta problemática en el sistema judicial de todo el territorio bonaerense, Burrone sostuvo: "Es un tema político que debería resolverse en el Senado de la provincia de Buenos Aires entre el oficialismo y la oposición".
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